El humanista Max Caldas
Este argentino con carrera en Holanda dirige desde septiembre a la Selecci¨®n masculina de hockey. ¡°Creo que en lo que viene. Toca mejorarlo¡±, dijo en AS.
Del militarismo, y la genialidad, de Mauritz Hendriks (plata en Pek¨ªn 2008) al car¨¢cter del franc¨¦s Fred Soyez. La Selecci¨®n espa?ola de hockey hierba ha apostado, desde hace dos d¨¦cadas, por t¨¦cnicos for¨¢neos salvo alguna excepci¨®n. Y ahora sigue la tradici¨®n con Max Caldes, nacido en Argentina, pero forjado en Holanda, de 48 a?os, una mente humanista: ¡°La profesionalidad no tiene que ver con lo que te pagan sino con lo que quieres ser¡±, lanza, como carta de presentaci¨®n.
El fichaje del t¨¦cnico argentino se forj¨® mucho antes de Tokio 2020 (¡°en 2019 el presidente Santiago De¨® ya me dijo: ¡®tenemos que hablar despu¨¦s de los Juegos¡±), aunque se oficializ¨® una vez Soyez anunci¨® que no seguir¨ªa y que Espa?a quedara eliminada con la cabeza alta en los cuartos de final ol¨ªmpicos ante B¨¦lgica. ¡°Creo en lo que viene por delante. Hay un trabajo hecho y quiero mejorarlo¡±, relata Caldas.
La primera misi¨®n del entrenador, un apasionado del f¨²tbol australiano (¡°es el deporte que se parece m¨¢s al hockey¡±), es la de conocer a las personas. No a los jugadores, eso vendr¨¢ luego, porque los l¨ªmites de cada uno los marca lo primero. Por eso mismo ha organizado varias jornadas (la primera en Ourense) y recorre cada fin de semana los clubes. ¡°Debe haber talento, pero la clave es elegir un tipo de vida y dar lo m¨¢ximo. A veces utilizamos las fichas como raz¨®n para no hacer m¨¢s. Hay que pensar en lo que podemos hacer. Conocer a todos y sumar¡±, a?ade.
Caldas quiere hacer un ¡°seguimiento¡± individual y semanal. ¡°Hay que ver a los jugadores en sus clubes, con su gente, en su idioma, yendo a entrenar en bicicleta¡ Hay que trabajar desde la persona como centro de todo¡±. El seleccionador logr¨® ser campe¨®n ol¨ªmpico con la selecci¨®n holandesa femenina en 2012 y subcampe¨®n mundial con la masculina. Espero que esos ¨¦xitos se trasladen a Espa?a y no quiere perder ni un minuto.
Las dos caras de Holanda y la cultura espa?ola
¡°Hay que estar ya ma?ana. Todos los momentos cuentan, el alto rendimiento no espera¡±, comenta. Caldas se enfrenta a un cambio generacional despu¨¦s de Tokio. Cinco pilares de la Selecci¨®n colgaron el stick, pero considera que hay talento para generar nuevo liderazgo y que en eso los clubes son clave. ¡°En Holanda todos cambian de club por conveniencia. Aqu¨ª tienes tu club, tu gente, tu lugar en el mundo y eso te hace m¨¢s orgulloso y desarrolla liderazgo¡±.
De la mano de Hendriks, amigo de Caldas (¡°tiene que venir a Barcelona a hacer un asado¡±), Holanda se col¨® entre los diez mejores pa¨ªses del mundo en Tokio. El ex seleccionador de hockey hizo un cambio de mentalidad que el comienzo gener¨® dudas. ¡°Crecimos gracias a que exigi¨® m¨¢s internamente. Si con un minuto ibas a los Juegos, ¨¦l lo bajo a 59 segundos. Quer¨ªa deportistas que fuera a por finales, no que fueran a participar¡±. Y eso mismo quiere Caldas de un hockey al que, desde su amigo Hendriks, le ha faltado ese pasito m¨¢s hacia las medallas en cada campeonato.