Espa?a derrite a Serbia y estar¨¢ en semifinales 10 a?os despu¨¦s

David Mart¨ªn quer¨ªa que jugar ante Espa?a fuera un infierno para los rivales y en ese fuego se derriti¨® Serbia, la actual campeona de Europa y de la Liga Mundial (12-9). La Selecci¨®n masculina de waterpolo se mete en las semifinales del Mundial de Gwangju por segundo gran torneo consecutivo y despu¨¦s de una d¨¦cada de caer en cuartos de final, una se?al de las posibilidades de una generaci¨®n joven y con un techo a¨²n inimaginable. El duelo ser¨¢ ante Croacia (jueves, 10:00, hora peninsular espa?ola), el coco, el campe¨®n del mundo y ol¨ªmpico en 2012. En juego, la final y la clasificaci¨®n para Tokio 2020 (en la otra semifinal chocan el jueves a las 11:30, Hungr¨ªa e Italia).

Sujetados por un Dani L¨®pez Pinedo colosal, un pulpo en la porter¨ªa, y por una defensa de boya eficiente, la Selecci¨®n fue un cicl¨®n en los dos primeros parciales. Dejar a Serbia con solo tres goles a favor es una heroicidad, por mucho que su seleccionador Dejan Savic haya dejado a seis titulares en su pa¨ªs al tener ya el pase ol¨ªmpico en el bosillo. A los balc¨¢nicos se les not¨® la falta de experiencia y de oficio, pero mantienen el talento fruto de un pa¨ªs con una arraigada cultura waterpol¨ªstica.

Fran Fern¨¢nez, el velocista espa?ol, abri¨® la lata de manera sorpresiva (1-0) y sigui¨® Granados con un gol marca de la casa (2-1), a lo que respondi¨® Rasovic aprovechando una superioridad (2-1). Los mejores minutos espa?oles estaban a punto de llegar, un colch¨®n sobre el que se asentaron los sue?os de llegar a semifinales. Tahull, un boya habilidoso, puso el 4-1 con dos recepciones en la boya y dos magn¨ªficas finalizaciones, muestra que la ma?ana vale m¨¢s que la fuerza incluso en un deporte de tanto contacto.

El arrojo espa?ol no se detuvo. De la habilidad de Tahull al lanzamiento de Munarriz, un aut¨¦ntico misil a la l¨ªnea de flotaci¨®n serbia. Sus dos lanzamientos sorprendieron al portero, como el palmeo de Larumbe para convertir un 7-3 que se antojaba definitivo ante cualquier rival, menos ante Serbia. Los espa?oles no pod¨ªan bajar el pist¨®n en defensa, de lo contrario le dar¨ªan alas a un equipo con un instinto fuera de la com¨²n, y sobre todo sujetaron a Mandic. Esta fue la consigna. El jugador serbio no pudo lanzar.

Pero esa competitividad serbia se mostr¨® en el tercer parcial. Se lleg¨® con 10-7 y Serbia tuvo posesiones para ponerse a dos goles, aunque de nuevo L¨®pez-Pinedo y la defensa fueron clave. Los balc¨¢nicos solamente encontraban en Rasovic el gol, mientras que Espa?a hall¨® petr¨®leo en las manos de Del Toro, en un reverso en la posici¨®n de boya al m¨¢s puro pivot de la NBA, Mallarach y Barroso. Los rebotes acompa?aron a Espa?a, as¨ª como las exclusiones, y en ese baile Fern¨¢nez hizo un 11-7 que parec¨ªa cuanto menos definitivo. Quedaban dos minutos y Serbia solo hab¨ªa logrado acercarse a tres goles. El partido estaba sentenciado cuando son¨® la bocina y Espa?a explot¨® de rabia y de ilusi¨®n. Son los reyes en el infierno que proponen sobre el agua de Gwangju.