Koepka tendr¨¢ un arma secreta en el Open: su caddie
Ricky Elliott, el caddie del n¨²mero uno del mundo, naci¨® y creci¨® en Portrush, Irlanda del Norte, lugar donde se disputar¨¢ la 148? edici¨®n del Open Brit¨¢nico.
Brooks Koepka (29 a?os) llega a la 148? edici¨®n del Open Championship de golf en el mejor momento de su carrera. El ganador de cuatro majors, todos ellos en los dos ¨²ltimos a?os, est¨¢ cosechando grandes resultados en este 2019. A su victoria en el PGA Championship, donde destroz¨® varios r¨¦cords, se le suman los segundos puestos en el U.S. Open y en el Masters de Augusta. Su objetivo ahora es el Open Brit¨¢nico, cuarto y ¨²ltimo gran torneo del a?o, que se disputar¨¢ desde este jueves, 18 de julio, hasta el domingo 21 en el Royal Portrush Golf Club de Irlanda del Norte.
Para este torneo, Koepka parte con una ventaja inesperada: su caddie, Ricky Elliott, naci¨® y creci¨® en Portrush. El escudero del n¨²mero uno del mundo vivi¨® durante toda su infancia a menos de 500 metros del campo, y cuando le preguntan cu¨¢ntas veces ha podido jugar en el Royal Portrush, Elliott responde entre risas: ?Mil veces quiz¨¢s? S¨ª, seguramente unas mil veces".
Antes de ser caddie, Ricky Elliott era una joven promesa del golf norirland¨¦s. Durante su etapa j¨²nior, Elliott jugaba junto a Graeme McDowell, ganador del U.S. Open en 2010, y tambi¨¦n nacido en Portrush. Por las ma?anas, Elliott se quedaba limpiando palos y ayudando en el campo, mientras McDowell practicaba por el campo. Por las tardes cambiaban las tornas, y era McDowell el que echaba una mano mientras Elliott jugaba los 18 hoyos. "Pas¨¢bamos todo el d¨ªa ah¨ª. Mi madre nos dejaba en el campo a las 8:30, se iba a trabajar, y nos recog¨ªa las 17:00", contaba el ahora caddie de Koepka.?
En su etapa amateur, destacan sus victorias en el Ulster Boys Championship y en el Ulster Youth Championship. Tras estudiar en la Universidad de Toledo, en Ohio, Elliott intent¨® convertirse en profesional del circuito americano, pero sus malos resultados le llevaron a convertirse en caddie. Tras ayudar a Maarten Lafeber y Ben Curtis -ganador del British Open en 2003-, se convirti¨® en el caddie de Koepka en 2013, llevando su bolsa en las cuatro principales victorias del golfista norteamericano.?
La de este a?o ser¨¢ la segunda ocasi¨®n en la que el Open Championship se disputa en el Royal Portrush -la primera vez fue en 1951, con victoria de Max Faulkner-, por lo que, con permiso de su amigo McDowell, nadie en el torneo conocer¨¢ el campo tan bien como Ricky Elliott. Su mejor vuelta en el campo son 64 golpes, siete bajo el par del mismo. "Puede ser una gran ventaja, ya veremos. En cada hoyo, me girar¨¦ hacia ¨¦l y le preguntar¨¦ qu¨¦ hacer. ?l ha jugado aqu¨ª m¨¢s que nadie", declaraba Koepka sobre la oportunidad que se le presenta.?
Elliott, que dormir¨¢ durante esta semana en casa de sus padres, en la misma habitaci¨®n en la que dorm¨ªa durante su infancia, se ha convertido en el hombre m¨¢s popular de Portrush durante estos ¨²ltimos d¨ªas, por encima de las estrellas mundiales que acudir¨¢n al torneo. "Necesitar¨¦ unas cincuenta entradas. Toda mi familia y amigos siguen viviendo aqu¨ª y quieren venir a verme", comentaba el caddie en la previa del torneo.
El claro objetivo de Koepka y Elliott es la Jarra de Clarete. El golfista sumar¨ªa su quinto major y primer Open, mientras que el caddie cumplir¨ªa su sue?o de ganar en casa. Sobre esta posibilidad, Koepka comentaba: "No habr¨ªa nada mejor que ganar aqu¨ª. No creo que cuando Ricky era peque?o se imaginaba que un Open se jugar¨ªa aqu¨ª. Y por si era poco, que ¨¦l formar¨ªa parte del torneo. Si conseguimos ganar, se convertir¨ªa en una leyenda, aunque ya lo es".
Una de las an¨¦cdotas que deja esta historia es que, tal es la confianza que tiene Koepka depositada en su caddie, que el golfista norteamericano ha rechazado practicar estos d¨ªas con Tiger Woods. "Le escrib¨ª coment¨¢ndole si quer¨ªa dar una vuelta de pr¨¢ctica. Todav¨ªa no me ha respondido", confesaba entre risas Tiger.?