Las otras Super Bowls de los New England Patriots

Es complejo afrontar un art¨ªculo sobre las Super Bowls de los New England Patriots. En corto: son muchas. Much¨ªsimas. M¨¢s que nadie en la historia de la NFL. As¨ª que la mera descripci¨®n cronol¨®gica de las mismas se me hace pesado de narrar y, creo, de leer. Es por eso que he pensado dividir en tres grandes grupos todas esas finales.

Lo primero que hay que subrayar es que, como he dicho, los New England Patriots son la franquicia que m¨¢s veces ha estado en la Super Bowl. Un total de en diez ocasiones. Los siguientes clubs en esta lista son los Pittsburgh Steelers, los Dallas Cowboys y los Denver Broncos, que han estado en ocho. Digo que han estado en diez y, en puridad, son nueve, pues la d¨¦cima a¨²n no se ha jugado, ya que es la de este fin de semana.

De esas nueve, han ganado cinco, a tan s¨®lo una de los que tienen el r¨¦cord de triunfos, que son los Pittsburgh Steelers con seis.

Una vez establecido ese marco general, ah¨ª van los tres grupos de diferentes Super Bowls de los Patriots:

Los cinco triunfos

Bill Belichick se hace con los mandos de la franquicia en la temporada 2000 y, a partir de ah¨ª, comienza la dinast¨ªa m¨¢s imponente que ha existido jam¨¢s en la NFL. Estamos en la 2017 y no s¨®lo no ha bajado el pist¨®n, sino que parecen tan temibles como siempre. O m¨¢s a¨²n.

La otra pata de la dinast¨ªa surgi¨® de manera sorprendente. Tom Brady fue elegido en el draft en la sexta ronda, en el puesto #199, en esa misma temporada 2000. En modo alguno iba a ser titular, claro. De hecho, era el cuarto QB de la plantilla.

Pero al inicio de la campa?a 2001, en el segundo partido, Drew Bledsoe, el titular y una de las estrellas del equipo, se lesion¨® y el chaval desconocido tuvo que jugar. Se hizo con los mandos del ataque y lider¨®, para asombro de toda la liga, hasta los playoffs al equipo. Y, aunque hubo dudas, se hizo con el puesto para jugar tambi¨¦n la Super Bowl XXXVI ante los Saint Louis Rams.

Nadie, y digo nadie, dada un c¨¦ntimo por ellos. Enfrente estaba "The Greatest Show On Turf", uno de los mejores ataques nunca vistos en la NFL, y sus opciones eran cero. O eso parec¨ªa, porque un plan defensivo magistral, digno del genio de Belichick, llev¨® el partido al instante final donde un field goal de Adam Vinatieri les dar¨ªa el insospechado anillo y marcar¨ªa el inicio de esta era de gloria absoluta.

Con la defensa cada m¨¢s establecida, y con un Tom Brady en permanente crecimiento, los New England Patriots ganar¨ªan la Super Bowl XXXVIII a los Carolina Panthers, tambi¨¦n con un field goal de Vinatieri, y la Super Bowl XXXIX a los Philadelphia Eagles en un memorable duelo defensivo.

Esos tres anillos convirtieron a esta franquicia en una cosa muy diferente de lo que hab¨ªa sido hasta entonces. Y, adem¨¢s, les permiti¨® mirar al futuro de manera diferente. Tras haber llegado al estrellato siendo un gruipo de hombres sin nombre, sin estrellas, Tom Brady se convirti¨® en la gran figura de la liga y hubo que reinventarse porque la defensa se hizo mayor.

Pasaron varios a?os hasta sus siguientes triunfos. Fue en la Super Bowl XLIX, en la temporada 2014, cuando volvieron a levantar el Lombardi Trophy. Hab¨ªa pasado una d¨¦cada desde el anterior. El rival fueron los Seattle Seahawks, que eran los campeones en vigor, y que s¨®lo sucumbieron con una jugada ya marcada a fuego para siempre: la intercepci¨®n de Russell Wilson a manos de Malcolm Butler en la yarda uno, cuando en ese equipo jugaba Marshawn Lynch.

Fue, ahora lo sabemos, el aldabonazo para la segunda gran era de los Patriots de Belichick y Brady. S¨®lo dos a?os despu¨¦s, la pasada temporada, ganaban la Super Bowl LI a los Atlanta Falcons en la mayor remontada que se ha visto en la final. 28-3 perd¨ªan en las postrimer¨ªas del tercer encuentro y, a¨²n as¨ª, fueron capaces de remontar en un final memorable.

Si ganan el domingo, por lo tanto, ser¨¢ la segunda vez que consiguen tres anillos en cuatro a?os, como a principios de siglo.

Las dos derrotas de Belichick y Brady

En el medio de ambas imponentes rachas triunfadoras, los Patriots de Belichick sufrieron dos derrotas enormemente dolorosas. Y las dos contra el mismo enemigo, los New York Giants.

La Super Bowl XLII es, quiz¨¢s, el partido m¨¢s comentado de la historia de la NFL. Los Patriots llegaban invictos, con un 16-0 en temporada regular que les permit¨ªa so?ar con ser el segundo equipo perfecto, tras los Miami Dolphins de 1972, y el ¨²nico en poder conseguir la haza?a de no perder ning¨²n partido desde que la temporada pas¨® a ser de 16 jornadas.

Pero les esperaba un pass rush fabuloso, una defensa soberbia y una gotas de magia, suerte, destino, lo-que-sea, a manos de Eli Manning y la recepci¨®n de David Tyree. Tal y como los Patriots hab¨ªan sorprendido al mundo ganando a los Rams en 2001, los Giants devolv¨ªan a los de New England al territorio de lo inesperado, s¨®lo que en el lado malo esta vez.

Y lo mismo, aunque en mucha menor escala, sucedi¨® en la Super Bowl XLVI. Otra vez los New York Giants se interpon¨ªan entre los de Tom Brady y su cuarto anillo. Ahora suena a chiste de mal gusto, pero pod¨¦is creerme: los debates entonces era si Brady no estaba acabado o, cuidado con las risas, si es que ya no sab¨ªa ganar en los momentos de la verdad. El resultadismo jam¨¢s descansa, amigos.

Los dos partidos de los otros New England Patriots

No se deben olvidar las dos Super Bowls que perdieron los New England Patriots antes de ser los New England Patriots.

Antes de la llegada de Bill Belichick esta franquicia era una de las grandes perdedoras hist¨®ricas. Fundada en 1960 junto a sus compa?eros de la AFL, era el patito feo de, agarraros, un grupo que ten¨ªa a "equipos con pedigr¨ª ganador" como los Miami Dolphins, los Buffalo Bills o los New York Jets, sus actuales oprimidos de la AFC Este que, en su d¨ªa, todos ellos pudieron presumir de ser superiores a los Patriots en un contexto general. Por no hablar de los Kansas City Chiefs o los Oakland Raiders, claro.

A¨²n as¨ª, jugaron dos Super Bowls. El problema es que en ambas fueron no s¨®lo ganados con claridad, sino que poco menos que la excusa del duelo de un par de equipos hist¨®ricos.

En 1985 llegaron a la Super Bowl XX para caer ante los Chicago Bears por 46 a 10. Todo Estados Unidos esperaba que aquel partido fuera entre los Miami Dolphins de Dan Marino y los "Monsters of the Midway" de los Chicago Bears. Juntos hab¨ªan jugado un Monday Night Football ¨¦pico en el que los Dolphins hab¨ªan acabado con la imbatibilidad de los Bears. Sin embargo, y de forma sorprendente, los Patriots, llegados desde la wild card, vencieron a los Dolphins en su propio estadio en un accidente brutal de los de Marino: seis p¨¦rdidas de bal¨®n.

En 1996 los Patriots jugar¨ªan la Super Bowl XXXI... contra los Green Bay Packers de Brett Favre en el ¨²nico anillo del genio e ¨ªdolo absoluto de aquella NFL. Huelga decir que el recuerdo que queda de aquel partido s¨®lo se refiere a los ganadores.