J.D. Mart¨ªnez hace historia en el a?o del home run
El bateador de Arizona Diamondbacks se convierte en el 18? jugador al mandar cuatro veces la pelota a la grada en el triunfo sobre los Dodgers.
Se dice que batear una pelota de b¨¦isbol es lo m¨¢s dif¨ªcil de conseguir en el mundo del deporte profesional y es totalmente cierto. Pensemos que ¨²nicamente los mejores son capaces de conectar con acierto (hit) tres de cada diez ocasiones ante los endiablados lanzamientos de los pitchers que cuentan en su haber con un arsenal de lanzamientos endiablados que oscilan entre las 100 y las 75 millas por hora, de los 120 a los 160 kil¨®metros por hora, y con distintas ubicaciones destinados a no ser previsibles y pillar siempre con el paso cambiado al bateador.
Luego est¨¢ el asunto del home run, para el que debes conseguir un contacto tan extraordinario con la bola que te permita mandarla a partir de los 90 metros que es el lugar donde se sit¨²a la grada y que marca el punto decisivo para lograr algo m¨¢gico.
Por una noche, J.D. Mart¨ªnez ha sido capaz de hacer que lo dif¨ªcil parezca f¨¢cil.
El bateador de los Arizona Diamondbacks ha sido capaz de conectar para home run en cuatro ocasiones con los lanzamientos de cuatro pitchers distintos de Los ?ngeles Dodgers, que tambi¨¦n es algo a tener en cuenta, en la absoluta demolici¨®n del mejor equipo de la competici¨®n como son los angelinos a cargo del m¨¢s entonado del momento, con permiso de los Cleveland Indians que ya suman 12 victorias seguidas.
Una haza?a para la historia
Lo conseguido por J.D. Mart¨ªnez es absolutamente maravilloso porque estamos hablando de hacerlo contra el cuerpo de lanzadores m¨¢s efectivo en 2017. A efectos pr¨¢cticos, ser¨ªa como marcar un hat-trick en el f¨²tbol contra la mejor defensa. Esto es lo que hizo el fabuloso bateador de los D?backs.
Adem¨¢s, para ponerlo en perspectiva hay que tener en cuenta que en la historia de las Grandes Ligas, que cuenta con m¨¢s de 200.000 partidos en su haber, s¨®lo en 18 ocasiones se ha conseguido sacar cuatro veces la pelota del campo en el mismo d¨ªa y es la segunda vez que sucede en la temporada actual tras la haza?a de Scooter Gennett, que lo logr¨® el pasado 6 de junio.
De hecho, ha habido m¨¢s partidos perfectos (23) que encuentros en los que se ha conseguido cuatro home runs.
M¨¢s all¨¢ de la calidad de algunos de los miembros de ese selecto grupo, que cuenta con Hall of Famers como Lou Gehrig, Willie Mays o Mike Schmidt y Carlos Delgado o Josh Hamilton por mencionar algunos ejemplos m¨¢s recientes, cualquier explicaci¨®n racional supera la l¨®gica.
Es tan sencillo como que los dioses del b¨¦isbol te han sonre¨ªdo para un d¨ªa m¨¢gico como hacen en ocasiones.
Eso y que los pitchers no tengan su mejor d¨ªa, claro.
Una explosi¨®n en ataque
Sin restar m¨¦ritos a J.D. Mart¨ªnez, que no estamos para aqu¨ª para eso sino para todo lo contrario, hay que decir que lo ocurrido en el 13-0 sobre los Dodgers y que cont¨® tambi¨¦n con una incre¨ªble actuaci¨®n de Robbie Ray desde el mont¨ªculo, es otro episodio m¨¢s de un hecho que se est¨¢ produciendo a ritmo de r¨¦cord en 2017.
Todo el mundo busca llegar a la grada y lo est¨¢ logrando con m¨¢s frecuencia que nunca, incluso superando lo que se vio en plena era de los esteroides.
A d¨ªa de hoy, 86 jugadores ya han conseguido alcanzar los 20 home runs en lo que llevamos de a?o y si se sigue con este ritmo, se estima que en torno a los 120 llegar¨¢n a esa cifra.
En 2014, s¨®lo 57 jugadores llegaron a los 20 home runs as¨ª que haceos a la idea.
Como dec¨ªamos anteriormente, no estamos aqu¨ª para menospreciar la haza?a de J.D. Mart¨ªnez, que a fin de cuentas s¨®lo un tal Giancarlo Stanton ha conseguido m¨¢s home runs en las Mayores que ¨¦l desde su llegada al desierto de Arizona el pasado19 de julio y suma ya 18 en ese per¨ªodo de tiempo.
Lo que s¨ª est¨¢ claro es que es un momento para el recuerdo y que nos prepara para unos playoffs en los que Arizona Diamondbacks bien puede convertirse en el gran ¡®tapado¡¯ de la competici¨®n, siempre que el codo de Paul Goldschmidt, candidato a MVP, no le d¨¦ mucha lata.