Trubisky pidi車 consejo a Manning, Luck y Roethlisberger
El quarterback de los Chicago Bears quiso saber que le recomendaban tres de los m芍s grandes de su posici車n de cara a afrontar el proceso del draft.
Mitch Trubisky es un chico con fe en s赤 mismo, como ha demostrado en innumerables ocasiones en el campo dirigiendo el ataque de la universidad de North Carolina, pero, a la vez, con una notable consciencia sobre s赤 mismo que le hace hasta cierto punto humilde, algo muy poco com迆n tanto en jugadores de primera ronda del draft de la NFL como en quarterbacks, donde parece que se exige el liderazgo y la ausencia de dudas desde el d赤a uno.
Por eso llam車 la atenci車n aquella reuni車n que tuvo con los directivos de los Bears, antes del draft, en la que acudi車 con su viejo coche destartalado y se mostr車 como alguien cercano y capaz de dudar de s赤 mismo, algo nada com迆n en el negocio. Despu谷s, y ya tras ser el n迆mero dos del draft y la evidente cara de la franquicia de Chicago para el pr車ximo lustro, cumpli車 su promesa de seguir con la misma forma de ser y acudi車 desde North Carolina hasta Illinois en el mismo viejo trasto.
Cuenta ahora el propio Trubisky que 谷l es as赤 y no tiene pensado cambiar. De hecho, antes de presentarse al proceso de selecci車n de rookies de la NFL contact車 nada menos que con Andrew Luck, Peyton Manning y Ben Roethlisberger para pedirles consejo sobre c車mo comportarse y cu芍l era la mejor manera de proceder en las entrevistas, am谷n de si era conveniente o no que fuese a la propia noche del draft a Philadelphia o se quedaba en casa.
Lo ha dicho en una entrevista concedida a la ESPN en la que ha a?adido que, de todos los consejos, el que m芍s le marc車 fue el de Big Ben. Comparte agente con el quarterback de los Pittsburgh Steelers, lo que sin duda fue lo que facilit車 el acercamiento e, incluso, el poder lanzar juntos un par de tardes.
Roethlisberger le dijo que no se preocupase por nada ajeno, que no dejase de ser 谷l mismo y que mostrase con total naturalidad c車mo era su personalidad, que eso era la 迆nica receta v芍lida para no defraudar a nadie y mantener las expectativas en su justa medida.
Y lo cierto es que Trubisky ha cumplido. En su a迆n escas赤sima carrera en la NFL, donde no ha jugado un snap, ya ha demostrado suficiente personalidad y aplomo como para sobrellevar con dignidad y soltura el ser abucheado por el p迆blico de los Chicago Bulls cuando fue a ver un partido del equipo de baloncesto, y suficiente sentido de la realidad al asumir que Mike Glennon es el quarterback titular del equipo hasta nueva orden.
Que un joven elegido con el n迆mero dos del draft no peque de creerselo demasiado y, a la vez, tampoco tenga miedo de lo que inevitablemente se le viene encima, dice una barbaridad de 谷l como persona. Otra cosa es lo que tenga que decir en el campo, c車mo juegue y c車mo sus talentos se trasladen al mundo profesional. Pero para hablar de eso vamos a tener tiempo suficiente en el futuro.