Borriol: el pueblo que vio crecer de cerca a Sergio Garc¨ªa

Borriol, un peque?o pueblo de la Comunidad Valenciana, pegadito a Castell¨®n, luce estos d¨ªas un poco m¨¢s alegre de lo normal. Motivos tiene de sobra. Uno de los suyos se ha coronado como el rey del golf. El jugador del momento. Ese es Sergio Garc¨ªa, que desde el pasado domingo ya puede decir que por fin ha ganado un gran torneo tras enfundarse la m¨ªtica chaqueta verde que le acredita como campe¨®n del Masters de Augusta. Le ha costado, s¨ª. Pero como casi siempre todo trabajo tiene su recompensa.

Decir Sergio Garc¨ªa en el pueblo es nombrar a uno de sus poco m¨¢s de 5.000 habitantes. Cuando Sergio est¨¢ por all¨ª es solo uno m¨¢s: Sergio Garc¨ªa, ciudadano de Borriol. Pasa el rato con sus amigos, juega a f¨²tbol en su equipo (del que es presidente) y disfruta de su gente. ¡°Es muy cercano. Cuando viene se mete hasta en la cocina a hacer paellas con los cocineros¡±, relata un empleado del club.

Hoy, esta instituci¨®n ya le espera para hacerle un merecido homenaje. Mientras tanto, le felicitan con una pancarta gigante en la entrada que da la bienvenida a todos sus visitantes. Un club, el del Mediterr¨¢neo, que le ha visto crecer. Pero literalmente. All¨ª lleg¨® su padre a principios de los 80, cuando lo inauguraron. Ven¨ªa de La Manga y sus buenas dotes con los palos le llevaron a Borriol para convertirse en el Cady Master, que viene a ser como el responsable de los entrenadores. El encargado de coger a aquellos que despuntaran o pensaran en llegar a ser profesionales. Entre pr¨¢ctica y pr¨¢ctica naci¨® Sergio, que ¡°antes de andar ya iba con un palo en las manos¡±, como cuenta Fernando Rodr¨ªguez, actual gerente de las instalaciones. ¡°Desde bien peque?o se le notaba una competitividad por encima de lo normal¡±, sigue, lo que deja a las claras el porqu¨¦ de su estatus actual en el mundo del golf, donde ya est¨¢ entre los grandes de toda la historia. Se dice pronto. Solo hay que imaginar c¨®mo est¨¢ ese pueblo. C¨®mo est¨¢ ese club.

Su padre, mentor. Cuando Sergio se li¨® con los palos fue su padre quien le fue ense?ando todo. Hasta hace pocos a?os ha sido su entrenador. Ahora le sigue dando consejos, pero desde fuera. Un padre, V¨ªctor Garc¨ªa, actual propietario del club, que adquiri¨® hace unos a?os despu¨¦s de que entrara en quiebra con una importante deuda. Ahora ya ha dejado la docencia. Solo si hay alg¨²n socio que quiera dedicarse profesionalmente al golf y este le ve posibilidades retoma los entrenamientos. As¨ª prefiere disfrutar de los ¨¦xitos de su hijo Sergio. As¨ª presenci¨® en directo su gran victoria en el Masters. Lo dicho: todo trabajo tiene su recompensa. Y Borriol as¨ª lo disfruta.