Los bateadores desaparecen durante estos playoffs
Los problemas de los bates de los Azulejos no ha sido exclusivo de ellos, sino que los pegadores est¨¢n sufriendo much¨ªsimo en esta postemporada.
Anoche se concluy¨® el periplo de los Azulejos. Perdieron el quinto partido de la serie contra los Indians que han podido festejar el primer t¨ªtulo de la Liga Americana tras casi 20 a?os. La horrible actuaci¨®n de los bateadores canadienses resume perfectamente lo que est¨¢ pasando en esta postemporada en la cual los ataques est¨¢n sufriendo enormemente. Es normal que en los playoffs los se registren promedios m¨¢s bajos, simplemente por el hecho que cada equipo tiene que enfrentarse a los mejores lanzadores y a las mejores defensas. Pero este a?o estamos asistiendo a algo muy curioso. En el curso regular m¨¢s que la mitad de las 30 organizaciones ha tenido un promedio de bateo por encima de .250. Los 10 conjuntos que han disputado o est¨¢n disputando los playoffs est¨¢n todos por debajo de esta marca, excepto los Nacionales de Washington que, ya eliminados, promediaron .251.
Por absurdo que lo parezca el conjunto canadiense hab¨ªa protagonizado contra los Vigilantes de Texas una serie divisional en la cual hab¨ªa aplastado el contrincante gracias a apabullantes n¨²meros ofensivos. Fue una excepci¨®n. Contra los Indians, en los cuatros encuentros perdidos, los Blue Jays han marcado solamente 3 carreras, en la mitad de estos encuentros no han sido capaz de marcar ni una sola vez. Incluso anoche, cuando a lo largo de m¨¢s de cuatro entradas han sido azotados por un novato que solamente por segunda vez en su carrera ejerc¨ªa como abridor. S¨ªmbolos de esta sequia son Jos¨¦ Bautista, que en 33 turnos en la caja de bateo ha producido un promedio de .182 y el c¨¢tcher Russell Martin, muchas veces decisivo en la temporada regular, que en 33 apariciones al plato ha tenido un average de .091.
El hecho m¨¢s curioso es que los Azulejos que han sido literalmente aplastados por los lanzadores del conjunto de Terry Francona, se mantienen con los mejores n¨²meros ofensivos de los playoffs, considerando a todos los equipos de la Liga Americana, con un average de .230 y un OPS de 692. Los Indians que hab¨ªan sido el segundo mejor ataque de la American League, solo por detr¨¢s de los Red Sox, mantienen n¨²meros inferiores a Boston y Toronto. Sin embargo, sus lanzadores, incluyendo abridores y relevos, han hecho un trabajo tan descomunal que, en Ohio, tras a?os de decepciones, est¨¢n vislumbrando la posibilidad de asistir a la segunda parada en homenaje a un campe¨®n en el espacio de pocos meses. Tras los Cavaliers de LeBron, podr¨ªa llegar el anillo de los Indios, que no festejan desde el lejano 1948.
El caso de los Cubs de Chicago es incre¨ªble. Tras haber ganado de forma arrolladora la temporada regular, se han apoyado en sus lanzadores y en una milagrosa novena entrada, en la cuales han destruido los relevos de los Gigantes, para ganarse el boleto a la final de la Liga Nacional. Aqu¨ª han pasado a trav¨¦s de una pesadilla de la cual parecen haberse levantado anoche. En el cuarto partido contra los Dodgers, por delante 2-1 en la serie y 1-0 en el encuentro, los Cachorros han reaccionado por todo lo alto. Han acabado con una hambruna de 21 entradas consecutivas en la cuales no han podido marcar ni una carrera.
Por si fuera poco, Addison Russell y Anthony Rizzo, que han representado la Nacional League en el Juego de las Estrellas hab¨ªan sumado una alucinante estad¨ªstica en estos playoffs. Ninguna carrera remolcada y solamente 3 imparables en 52 turnos de bateo. Simplemente horrible, casi irreal. A partir de all¨ª han sumado 6 imparables y 5 carreras remolcadas, los dos han golpeado un latigazo, y de esta forma han brindado a los suyos el empate en la serie. Pese a esta grand¨ªsima reacci¨®n, los Cachorros mantienen una OPS muy por debajo de los Dodgers y obviamente muy por debajo de su temporada regular. La mejor caracter¨ªstica de los Cubs hab¨ªa sido el saber subir sus prestaciones contra lanzadores de gran nivel. En este aspecto hab¨ªan sido muy superiores a todos sus contrincantes, completando un curso estrepitoso. Pero en la postemporada est¨¢n asom¨¢ndose dificultades muy por encima de los esperado. Est¨¢n todav¨ªa en tiempo para acabar con la maldici¨®n de la cabra y las Series Mundiales est¨¢n a 2 partidos, pero habr¨¢ que mejorar unos n¨²meros ofensivos, muy impropios de un equipo que lo quiere ganar todo.