Rompiendo una lanza en favor de Buck Showalter
Mucho se est¨¢ hablando sobre la decisi¨®n de Buck Showalter de no utilizar a Zach Britton en el partido comod¨ªn que puso fin a la temporada de los Orioles.

Todos sabemos lo dif¨ªcil que es el deporte del b¨¦isbol. La estrategia lo es todo y m¨¢s en un encuentro que llega igualado a la und¨¦cima entrada y en el que una mala decisi¨®n puede dar al traste con la temporada de tu equipo. Eso, al parecer, es lo que hizo Buck Showalter al no dar entrada a su mejor lanzador, Zach Britton, en ning¨²n momento del partido y as¨ª se lo est¨¢n haciendo saber todos los medios estadounidenses en sus ediciones digitales. Quiz¨¢s porque siempre me ha gustado eso de ser el verso suelto de la canci¨®n, me voy a permitir defender la actuaci¨®n del manager del equipo de Baltimore.
Que Zach Britton es uno de los mejores lanzadores de la liga americana no lo pone en duda nadie. Es m¨¢s, ya he comentado en una ocasi¨®n que para mi es el m¨¢s firme candidato a llevarse el Cy Young de este a?o por encima de otros grandes lanzadores como Rick Porcello o Corey Kluber. Ha conseguido cerrar su partido en 47 ocasiones, sin fallar una sola vez en toda la temporada, y sus registros en ERA y WHIP son estratosf¨¦ricos, con s¨®lo 0.54 y 0.84 respectivamente. Sin duda un pitcher en el que confiar cuando necesitas cerrar un partido.
El problema para los Orioles es que el partido no estaba para cerrarse ni mucho menos. En un encuentro entre dos de los equipos m¨¢s ca?oneros de las Grandes Ligas, los lanzadores hab¨ªan dominado el encuentro y no parec¨ªa que eso fuera a cambiar. El bullpen de ambos conjuntos se mostraba s¨®lido y parec¨ªa que s¨®lo un homerun solitario en alg¨²n momento pod¨ªa cambiar el signo del encuentro, como al final as¨ª fue. Y con un cuarteto de bateadores de lujo como Jones, Davis, Machado y Trumbo las posibilidades de que la balanza se inclinara hacia el lado de los de Maryland no era descabellada ni mucho menos.
Tampoco los Blue Jays andan mancos en esto de machacar con el bate a sus rivales. Jugadores como Bautista, Encarnaci¨®n, Martin o Tulowitzki te pueden hacer un traje en un momento determinado. Pero por suerte para ellos el jugar en casa les permit¨ªa batear en la parte baja de la entrada y, por lo tanto, una vez superada la novena ya no ten¨ªan que guardar ninguna posible ventaja porque en el momento en que la consiguieran el partido ser¨ªa suyo. As¨ª pudieron poner en liza a su cerrador, el mexicano Roberto Osuna, para lanzar la novena y el inicio de la d¨¦cima entrada, cuando unas peque?as molestias en el hombro le hicieron solicitar el cambio por Francisco Liriano, un lanzador acostumbrado a estar durante varias entradas consecutivas sobre el mont¨ªculo. Creo que a todos nos pareci¨® un sistema de juego perfecto y que segu¨ªa el gui¨®n habitual.
Lo que a muchos les ha extra?ado ha sido la salida en la und¨¦cima entrada de Ubaldo Jim¨¦nez en lugar de Britton para enfrentarse a los bates m¨¢s potentes de Toronto. S¨ª, podr¨ªa ser as¨ª, pero no debemos olvidar que Jim¨¦nez es, al igual que Liriano, un pitcher titular y que est¨¢ acostumbrado a lidiar con los mejores lanzadores de cualquier equipo. Incluso se habl¨® de ¨¦l como posible lanzador inicial en lugar de Chris Tillman. Adem¨¢s si miramos las estad¨ªsticas veremos que el dominicano no hab¨ªa concedido ninguna carrera en los dos ¨²ltimos partidos que hab¨ªa lanzado, uno de ellos precisamente frente a los Blue Jays. Estaba claro que sab¨ªa c¨®mo dominar el ataque de los canadienses y Showalter confi¨® en ¨¦l. Estoy seguro de que su idea era que Jim¨¦nez mantuviera a raya a Toronto hasta que sus chicos consiguieran ponerse por delante en el marcador, momento en el que sacar¨ªa a Britton para cerrar el partido y sellar el pase a las series de divisi¨®n.
Pero claro, el deporte no siempre sale como uno planea y Jim¨¦nez entreg¨® la victoria a Toronto permitiendo tres hits (uno de ellos un homerun) en tan s¨®lo cinco lanzamientos, lo que ech¨® por tierra la estrategia del bueno de Buck, una estrategia que yo sigo defendiendo como buena o al menos tan buena como cualquier otra. Porque la pregunta que yo planteo es ?qu¨¦ hubiera pasado si sale Britton en esa und¨¦cima entrada? S¨ª, puede que hubiese salvado la situaci¨®n e incluso puede que hubiese lanzado una hipot¨¦tica duod¨¦cima entrada. Pero no hubiera podido ir m¨¢s all¨¢ en caso de que siguiera el empate y entonces s¨ª que hubiera tenido que entrar Jim¨¦nez a pitchear, probablemente con el mismo resultado que ayer. E incluso si los Orioles en esa 12? ¨® 13? entrada hubieran conseguido una m¨ªnima ventaja, ?ser¨ªa Jim¨¦nez el hombre adecuado para cerrar un partido o criticar¨ªamos entonces el hecho de haber usado antes a Britton y haberle quemado antes de tiempo?
Claro, empezar a elucubrar con el famoso ¡°y si...¡± no es m¨¢s que hacer b¨¦isbol-ficci¨®n. El hecho es que los Blue Jays siguen adelante y que los Orioles, que han realizado una temporada soberbia y a los que nadie (yo el primero) d¨¢bamos ninguna posibilidad de acceder a los playoff, se van de vacaciones con la siempre razonable duda de saber si la estrategia seguida fue la correcta. Y yo, desde este humilde rinconcito de la lejana Espa?a, rompo una lanza en favor de las decisiones de Buck Showalter y de todo su equipo t¨¦cnico.