Siempre Mireia: oro ol¨ªmpico

Mireia Belmonte toc¨® la pared, se gir¨® y el coraz¨®n se le sali¨® del cuerpo. Es indescriptible lo que sinti¨® la nadadora despu¨¦s de atrapar un sue?o que llevaba persiguiendo desde que se lanz¨® a una piscina con apenas seis a?os y llor¨® porque no le dieron la medalla que merec¨ªa al haber ganado su prueba. Esas l¨¢grimas derramadas portaban su gen competitivo, el que le ha llevado a luchar por ser campeona ol¨ªmpica hasta la extenuaci¨®n. ?nicamente su entrenador, su familia, amigos y el equipo de trabajo que la rodea saben el esfuerzo y la pasi¨®n que le pone Mireia a cada ejercicio y que le ha llevado hasta ese hist¨®rico oro, su cuarta medalla ol¨ªmpica. Una proeza para la nataci¨®n y el deporte espa?ol.?

Gracias a esa fuerza de voluntad ha construido una m¨¢quina perfecta para una prueba como el 200 mariposa, tan exigente que solo es apta para cuerpos y mentes preparados. Mireia cumpli¨® a rajatabla el plan. En Londres, sali¨® demasiado fuerte y perdi¨® el oro en los ¨²ltimos 20 metros, donde lleg¨® sin gasolina. La idea en esta final era salir m¨¢s comedida, y dar el estacazo a partir del 100. Y sali¨® tan ajustado el plan que si la carrera dura cinco metros m¨¢s, la australiana le hubiera superado. La nadadora de la UCAM sali¨® segunda, a rebufo de Madeline Groves. Sus 28.48 eran un paso r¨¢pido para la badalonesa. Prosigui¨® a la caza de Groves en el 100, aumentando la velocidad (1:00.00), para atacar en el 150 (1:32.17), cuando toc¨® primera. Mireia fue la ¨²ltima en asomar del subacu¨¢tico, una de las claves. Eso le permiti¨® desgastarse menos y poder llegar al final con la energ¨ªa suficiente para agarrar ese oro con la misma fuerza que emplea en cada sesi¨®n de entrenamiento.?

Mireia tuvo que apretar ante el acoso de la japonesa (2:05.20) y la australiana (2:04.88). Como hizo en la primera jornada cuando obtuvo el bronce en los 400 estilos, la badalonesa nad¨® los ¨²ltimos metros con una energ¨ªa que le sal¨ªa de su coraz¨®n, de sus ganas por querer ser campeona ol¨ªmpica. Venci¨® por apenas tres cent¨¦simas.?

Sus 2:04.85 no simbolizan su mejor marca, pero no hizo falta. Pocas nadadoras son capaces de bajar de 2:05 en una prueba de este nivel, y Mireia, a sus casi 26 a?os, ha conseguido limar las arrugas del tiempo, le ha puesto m¨¢s gimnasio para que su cuerpo siga siendo igual de competitivo y no ha bajado la exigencia aunque le siguieran lloviendo ¨¦xitos. A ese trabajo se le une la seguridad mental que le permite evadirse de la presi¨®n y de los pormenores de la carrera.?

El himno de Espa?a son¨® en una Piscina Ol¨ªmpica de R¨ªo que ser¨¢ inolvidable para Mireia, que subi¨® al podio emocionada, en una imagen que ha so?ado tantas veces como metros ha nadado en su vida. Hace 10 a?os, en R¨ªo de Janeiro, una joven Mireia se proclamaba doble campeona del mundo j¨²nior. En 2016 es ya campeona ol¨ªmpica.