Xander Bogaerts est¨¢ jugando en plan MVP

En los ¨²ltimos tiempos, Ruben Amaro Jr., entrenador de primera base de los Boston Red Sox y hasta el a?o pasado el GM de los Philadelphia Phillies, recordaba que muchos de los j¨®venes y numerosos talentos que hay en la plantilla de los Red Sox le preguntaban cu¨¢l le parec¨ªa el mejor. Esto es casi como la pregunta de a qui¨¦n quieres m¨¢s, a pap¨¢ o mam¨¢.

Diplom¨¢ticamente, Amaro dijo que a todos ellos, pero hubo una ¨¦poca en la que tuvo claro que sus predilecciones iban por cierto jugador que es en la actualidad el shortstop de los de Beantown, un tal Xander Bogaerts.

Cuando los Phillies estuvieron escuchando ofertas (o haci¨¦ndolas) en 2013 sobre posibles destinos de Cole Hamels y Cliff Lee, ante la certeza de que lo que mejor pod¨ªa hacer el equipo era traspasar a sus mejores activos y reconstruirse, el nombre de Bogaerts sali¨® cuando se habl¨® sobre el antiguo ganador del Cy Young, Cliff Lee. La conversaci¨®n termin¨® ah¨ª.

Definitivamente, hay ocasiones en las que los mejores traspasos son aquellos que no terminas haciendo.

Y aqu¨ª estamos casi a mediados del mes de junio y Xander Bogaerts no es que se haya asentado en las Grandes Ligas, que no es poca cosa, sino que est¨¢ convirti¨¦ndose en uno de sus mejores jugadores y no s¨®lo en su posici¨®n.

Oye, que no est¨¢ mal si tienes en cuenta que en los Boston Red Sox hay un Mookie Betts que va en ritmo de conseguir 84 hits de bases extra (37 de ellos home runs), 123 carreras impulsadas y 155 anotadas con 29 robos de base o un Jackie Bradley Jr. que terminar¨ªa la campa?a si mantiene su tendencia actual con 81 hits de bases extra y 112 carreras impulsadas.

?Si hasta David Ortiz parece rejuvenecido y va lanzado a por 71 dobles, 42 home runs y 144 carreras impulsadas mientras promedia un .340 y lidera su liga tanto en slugging (.708) como en OPS (.1131)!

Gran parte de estas sensaciones las tiene un muchacho como Xander Bogaerts, al que se le notaba comod¨ªsimo en las Series Mundiales de 2013 cuando apenas contaba con 21 a?itos, final en la que se hizo con su primer anillo.

Con el dorsal n¨²mero dos en honor de su ¨ªdolo de la infancia y capit¨¢n del eterno rival de los Yankees, Derek Jeter, el joven de Aruba, no ha dejado de mejorar con cada a?o que pasa y durante el 2015 demostr¨® una innata capacidad para hacer contacto con la bola, de ah¨ª su .320 de bateo (s¨®lo por detr¨¢s del gran Miguel Cabrera) y sus 196 hits que fueron la segunda marca del a?o.

El club no pod¨ªa estar m¨¢s contento con su rendimiento y la clave estaba en ver si Bogaerts no iba a sacrificar capacidad para hacer contacto en pos de mejorar sus guarismos en t¨¦rminos de potencia, en esta ¨¦poca tan seducida por el home run como en cualquier otra anterior.

El a?o pasado Boagerts logr¨® s¨®lo siete home runs, pero es que en 2016 ya ha superado esa marca mientras ha sido capaz de dar un salto cualitativo en todas las ¨¢reas de su juego, con una marca de bateo de .358 con la que lidera la Liga Americana y con 44 carreras impulsadas desde la tercera plaza del turno.

Xander no muestra tener alg¨²n punto d¨¦bil, una kriptonita a la que se puedan agarrar sus rivales y es por ello que su impacto global, cuando se cuenta ataque y defensa, hace que ya tenga un WAR de 3.6 seg¨²n Baseball Reference, por delante del 3.4 de Altuve o 3.3 de Machado.

Si adem¨¢s de todo lo anterior, se juega en una posici¨®n tan importante en defensa como la de shortstop, ah¨ª ten¨¦is las caracter¨ªsticas de un futuro MVP, empezando por este mismo a?o.

La lucha va a ser encarnizada, pero si algo demuestra Bogaerts es que la presi¨®n no va con ¨¦l, casi ni cuando tuvo esa fant¨¢stica racha de 26 partidos con un hit. Al igual que su ¨ªdolo Derek Jeter, Xander Bogaerts est¨¢ hecho para ganar¡­ y mucho.