Festival de Big Ben que sali¨® desde el banquillo para arrasar

La pregunta que todos nos hacemos es por qu¨¦ inici¨® el partido Landry Jones. El quarterback suplente/titular de los Steelers se lesion¨® el tobillo izquierdo con el choque reci¨¦n comenzado y Big Ben, el quarterback titular/suplente, sali¨® al campo para que el Steelers-Browns se convirtiera en un duelo a¨¦reo en el que Roethlisberger no solo sali¨® victorioso, sino que se dio un aut¨¦ntico fest¨ªn.

Las dos defensas quedaron retratadas contra el pase, pero fueron muros frenando la carrera. Los Browns llegaron al descanso con 6 yardas negativas por tierra (15 totales al final), pero los Steelers no fueron mucho m¨¢s efectivos: DeAngelo Williams solo sum¨® 3 yardas en siete carreras antes del medio tiempo (60 terrestres de Pittsburgh en todo el choque).

Quien crece partido a partido es Johnny Manziel. En su primera jugada se le escurri¨® el bal¨®n de las manos y sus rivales recuperaron la posesi¨®n en la yarda doce de Cleveland, pero a partir de ese momento se convirti¨® casi en infalible. Con su movilidad, y su facilidad para arrancar a correr fuera del pocket, volvi¨® loca a la defensa de los Steelers, que ve¨ªa c¨®mo sus pases a media distancia eran letales casi siempre.

Sin embargo, el encuentro comenz¨® con un cruce de field goals con el que los se?ores del Acero se adelantaron 6-3.

En el siguiente ataque de los Browns, Hawkins sufri¨® un fumble a las primeras de cambio que devolvi¨® la pelota a los Se?ores del Acero en la yarda 36 rival. ?stos se quedaron en la yarda 1 en cuarto down, pero Manziel no fue capaz de sacar a los suyos de la encerrona, los Steelers recuperaron el bal¨®n, y Big Ben conect¨® con Bryant con un pase de 32 yardas para touchdown (21-3). El partido, convertido en duelo de pistoleros, era dominado por un Big Ben en su salsa que lanzaba a placer a Antonio Brown y Martavis Bryant.

En la segunda mitad los Steelers consiguieron anotar un field goal en su primera posesi¨®n. Y de inmediato comenz¨® una serie interminable de los Browns, que durante casi 10 minutos se atravesaron el campo, se quedaron a una yarda del touchdown tras una jugada de Manziel ¡®marca de la casa¡¯, casi salieron de distancia de filed goal por culpa de las penalizaciones (los Browns sufrieron 188 yardas de penalizaci¨®n totales en 12 faltas) y terminaron entregando el bal¨®n con una intercepci¨®n de Mitchell a Johnny Football. Pero Big Ben devolvi¨® el favor de inmediato lanzando otra intercepci¨®n a Poyer. Johnny Football no reaprovech¨® esa segunda oportunidad y conect¨® un pase de touchdown de7 yardascon Barnidge que dejaba el marcador 24-9 despu¨¦s de que Coons fallara el extra point.

Quedaba casi todo el ¨²ltimo cuarto y los Steelers decidieron dormir el partido, correr con DeAngelo Williams, y dejar que el reloj volara. El jugador, que hasta entonces hab¨ªa sido un espectador de lujo del partido, con yardas de carrera negativa, se convirti¨® en un bulldozer que cerr¨® a la defensa rival para que Big Ben aprovechara el desconcierto para volver a conectar con Antonio Brown, que anot¨® su segundo touchdown, de 56 yardas, colof¨®n de un nuevo partido monstruoso del receptor.

Manziel, que acab¨® el partido con 33 completos de 45 intentos, 371 yardas, un touchdown de pase y una intercepci¨®n, intent¨® lo imposible en una ¨²ltima serie a la desesperada, que fracas¨® con un cuarto down en la yarda 5 de Pittsburg.

Roethlisberger, que cerr¨® su festival con 22 de 33, 379 yardas, tres touchdowns y una intercepci¨®n, pudo inflar m¨¢s el resultado despu¨¦s de llegar hasta la yarda 1 rival y arrodillarse para cerrar el encuentro.

Los Steelers siguen confirmando que su ataque es una m¨¢quina imparable cuando Big Ben est¨¢ sano y, para cerrar con un toque espa?ol, Alejandro Villanueva, pese a una salida falsa, tuvo una actuaci¨®n perfecta y durante todo el encuentro control¨® perfectamente a Desmond Bryant, su duelo individual, que qued¨® casi in¨¦dito.