?A qu¨¦ esperan los Colts para renovar a Andrew Luck?
Los quarterbacks son la piedra filosofal de cualquier equipo en la NFL. Si hay un mantra repetido hasta la saciedad en la liga y sus alrededores es que, al menos con las reglas actualmente en vigor, es imposible ganar un anillo si no tienes un buen quarterback dirigiendo el ataque. Los Colts tienen a uno de los mejores, Andrew Luck. Y adem¨¢s es joven. As¨ª que, ?a qu¨¦ demonios esperan para atarlo a largo plazo?
Los Miami Dolphins ya lo hicieron con el suyo, Ryan Tannehill, hace unas semanas. Y los Carolina Panthers siguieron recientemente sus pasos y renovaron a Cam Newton con un contrato de m¨¢s de 100 millones (de los cuales 60 est¨¢n garantizados, y esta es la cifra que realmente importa). Seattle lleva meses negociando con su propio quarterback estrella, Russell Wilson, y si no hay renovaci¨®n es porque no se ponen de acuerdo en las cifras.
?Y los Colts? ?Cu¨¢les son las noticias que llegan desde Indianapolis sobre un posible nuevo contrato para Luck? La respuesta es sencilla: ninguna. Y el general manager del equipo ya dej¨® entrever hace no demasiado tiempo que el nuevo contrato deber¨¢ esperar al menos hasta la primavera de 2016.
Pero que ning¨²n fan de los Colts se asuste. No hay diferencias entre el jugador y el equipo. Se da por hecho que Luck ser¨¢ el quarterback titular en Indianapolis la pr¨®xima d¨¦cada, como poco. Si no hay renovaci¨®n por ahora es porque, sencillamente, no tiene sentido. O al menos no lo tiene para el equipo. Vayamos por partes.
Para Miami y Carolina, renovar a sus j¨®venes quarterbacks ahora ten¨ªa todo el sentido del mundo. En el primer caso, porque todav¨ªa es un jugador en crecimiento y la factura puede subir si progresa todo lo que se espera de ¨¦l. Y en el segundo, porque para retener a Newton en 2016 los Panthers ya s¨®lo pod¨ªan utilizar la franchise tag. En 2015 el precio habr¨ªa sido de casi 19 millones de d¨®lares. En 2016, muy probablemente habr¨ªa rebasado los 20 millones. Muy parecido al coste anual del nuevo contrato. Los dos equipos, adem¨¢s, se arriesgaban a que un nuevo contrato de Andrew Luck o Russell Wilson, que muy probablemente se mover¨¢n por encima de esas cifras, inflase las expectativas de sus jugadores.
Con Andrew Luck la situaci¨®n es exactamente la contraria. Los Colts saben que pueden retener al jugador hasta el final de la temporada 2017 sin ni siquiera sentarse a negociar con ¨¦l. Simplemente haciendo uso del quinto a?o opcional que se incluye en cualquier contrato rookie, Luck no ir¨¢ a ninguna parte en 2016. Ese a?o opcional s¨®lo est¨¢ garantizado en caso de lesiones. Si a Luck de repente se le olvidase c¨®mo se juega al football (no ocurrir¨¢), los Colts pueden librarse de ¨¦l sin pensarlo dos veces. Y lo mejor es su precio: 16,5 millones de d¨®lares. ?Qui¨¦n no querr¨ªa a Andrew Luck por 16,5 millones de d¨®lares?
Si los Colts decidieran no renovar a Luck tampoco en 2016, tendr¨ªan derecho a hacer uso del franchise tag para la temporada 2017. Analizando la evoluci¨®n de las ¨²ltimas temporadas, el precio de la misma podr¨ªa rondar los 22 millones de d¨®lares. De nuevo, ?qui¨¦n no querr¨ªa a Andrew Luck por 22 millones de d¨®lares, y sin ataduras a largo plazo en caso de imprevistos?
Es m¨¢s: los Colts todav¨ªa tendr¨ªan la posibilidad de utilizar la misma designaci¨®n para la temporada 2018. Para entonces se aplicar¨ªa una subida del 20% sobre el salario del a?o anterior: alrededor de los 26,5 millones de d¨®lares. ?Alguien piensa que eso es demasiado dinero para un QB como Andrew Luck en su plenitud?
En resumen: los Colts no tienen ninguna prisa por renovar a Luck. No van a ahorrar dinero haci¨¦ndolo. Que nadie piense que llegar¨¢n hasta el punto de hacer uso de la franchise tags. A los jugadores no suele gustarle, y nadie quiere a su quarterback estrella enfadado con el front office. Pero no hay ning¨²n otro incentivo para que los Colts firmen un nuevo contrato antes del verano de 2016.