El final de un sue?o
La Selecci車n de Pau Gasol cae en cuartos sin alcanzar el ochomil de ganarle a Estados Unidos en unos Juegos. Un Ricky inmenso, 38 puntos, no fue suficiente con el gigante Durant, 29.
Espa?a se va de los Juegos. Eso y mucho m芍s. Se cierra un ciclo de 20 a?os liderado por Pau Gasol, uno de los deportistas m芍s grandes que ha dado el pa赤s. Y toca despertar de un sue?o. Las im芍genes de Pau en el Mundial de 2006, los Juegos de 2008 o 2012, Lille en el Eurobasket de 2015, acompa?ar芍n siempre a la generaci車n que tuvo la inmensa fortuna de disfrutarlo. Gasol se ir芍 siempre con esa espina de no haber podido abrir esa 迆ltima puerta. Su cara apesadumbrada, sentado en el banquillo donde vivi車 la segunda parte completa, a la derecha de su hermano Marc y justo por delante de Rudy, no es la imagen que so?車 para el adi車s. Pero esa es la realidad del baloncesto, y del deporte. Y eso tambi谷n le da un punto po谷tico adi車s de Pau. No todos los sue?os se alcanzan. Y Estados Unidos se le ha resistido a esta generaci車n.
En Saitama, donde fue campe車n del mundo en 2006, se esfum車 el sue?o de Espa?a de ser oro ol赤mpico. Otra vez, le falt車 un escal車n m芍s para llegar a Estados Unidos, que con un Kevin Durant sublime alcanz車 las semifinales. Ricky Rubio, el l赤der que le queda a esta Selecci車n ahora que se va Pau y, probablemente Marc y Rudy, hizo todo lo posible por impedirlo. Jugador grande, carg車 con el peso anotador del equipo y consigui車 unos estratosf谷ricos 38 puntos. Pero no fueron suficiente para forzar, al menos, un final apretado contra los campeones ol赤mpicos en las tres 迆ltimas ediciones.
Ya desde el principio, Ricky Rubio mantuvo a flote en el primer cuarto a una Espa?a que empez車 muy perezosa con la anotaci車n. Tanto que Estados Unidos, con los tiros de seda de Durant, se march車 pronto a un inquietante 10-17. Fr赤a, y tal vez a迆n con el cuerpo oxidado por el partido contra Eslovenia, a Espa?a le cost車 carburar. Ricky le dio el ritmo con una racha de canastas que permitieron empatar a Espa?a e incluso ponerse por delante gracias a las dos primeras cannastas de Sergio Llull (21-19).
Llegaron entonces los minutos de oro de Espa?a, con el Chacho tocado por las musas y una aparici車n extraordinaria de Willy, que meti車 seis puntos y, sobre todo, cogi車 seis rebotes y puso tres tapones que permitieron tambi谷n a Espa?a correr, forzar faltas y llegar f芍cil al bonus. Espa?a vol車 hasta una diferencia de diez puntos (39-29). Claver tambi谷n hizo da?o a los estadounidenses con sus canastas bajo el aro y los rebotes ofensivos. Pero Kevin Durant enchuf車 la maquinita y la puso a m芍xima potencia dos minutos y dej車 el partido igualado al descanso (43-43). En esos minutos pudo estar cierta llave para que el partido llegase m芍s igualado al final, pero Espa?a no jug車 'el otro baloncesto'. Tal vez le habr赤a ayudado.
Draymond Green es el cham芍n del Team USA. ?l re迆ne a sus compa?eros en el descanso. Les alecciona, les dice qu谷 har芍n. Pero quien estaba iluminado y habl車 en la pista fue Kevin Durant. Puso la cruz detr芍s de la l赤nea de triple y empez車 a hacer la diferencia. Tres triples y un contragolpe culminado por Booker mand車 el partido a un 47-58 que ya pareci車 insalvable, m芍s a迆n cuando la renta se estir車 a 16 (49-65). Un arranque m芍s de orgullo de Ricky, al que Scariolo puso en la cancha con un gran Sergio Rodr赤guez para liberarle de las obligaciones de base, situ車 a Espa?a un poquito m芍s cerca antes del final del tercer cuarto para mantener, aunque fuese, un hilo de esperanza. Con un parcial de 14-4, Espa?a se acerc車 al 63-69 con un tremendo orgullo.
Garuba, que particip車 mucho mejor que contra Eslovenia, lleg車 a acercar a Espa?a a cuatro puntos pero Lillard, que cogi車 el mando mientras Durant descansaba, y Tatum pusieron otra vez las cosas en su sitio (66-81). Scariolo lo prob車 todo. Tambi谷n bajar al terreno de Estados Unidos, jugar sin p赤vots, con Garuba como interior. Espa?a sorprendi車 relativamente con ese centro de gravedad bajo a Estados Unidos, que cuando supo por donde iba la pel赤cula entr車 como quiso por la zona y abroch車 el partido.
En el vac赤o inmenso de las gradas, y cuando son車 la bocina final, Pau Gasol S芍ez se levant車 para saludar deportivamente a los rivales. Esta vez, Pau no estaba exhausto como en Pek赤n, ni rendido despu谷s de una actuaci車n memorable como en Londres. Esta vez, con camiseta de entrenamiento, estaba siendo consciente de que le toca bajar a la tierra. El sue?o se acaba. Dentro de unos a?os admitir芍 que nunca pudo con Estados Unidos, pero tambi谷n ser芍 consciente de lo grande que ha sido. Desde Saitama, donde toc車 el cielo en 2006, hasta otra.