Mo Katir: de Mula a Tokio

Suena en el apartamento m¨²sica de La MODA, un grupo burgal¨¦s como Dani Arce. Pero el que baila sin camiseta es Mohamed Katir, tambi¨¦n conocido como Mo en su cuenta de Instagram. Es la sensaci¨®n del verano en el atletismo espa?ol. En poco m¨¢s de un mes fulmin¨® los r¨¦cords de Espa?a de 1.500 (3:28.76), 5.000 (12:50.79) y 3.000 (7:27.64). Se los arrebat¨® a Cacho, Bezabeh y Viciosa. Ya historia, ahora Mo s¨®lo piensa en el National Stadium, este martes arranca las eliminatorias de los 5.000 metros (13:00).

"Mi sue?o era ser ol¨ªmpico, ya lo soy. Tratar¨¦ de meterme en la final y ah¨ª a ver qu¨¦ pasa", repite varias veces Katir, de 23 a?os, feliz y sonriente en la Villa Ol¨ªmpica: "Me siento en Tokio como si estuviera en mi pueblo. Tengo ganas de que llegue la competici¨®n ya". Porque sus primeros Juegos son una prueba de fuego. Las quinielas le dan como favorito por sus registros, pero la duda es su falta de experiencia en grandes campeonatos. S¨®lo corri¨® en verano los Europeos bajo techo y fue cuarto. "Yo vengo con marcas muy buenas, pero eso no quiere decir que vaya a pillar chapa".

Katir, que naci¨® en Alcazarquivir (Marruecos) y vive en Mula desde muy ni?o, es un tipo muy querido en su pueblo, donde se le ve correr como un loco por las calles, por encima de 20 kil¨®metros por hora muchas veces. "?Donde vas Katir, tienes prisa?", le gritan los mule?os que han montado un dispositivo de apoyo a su nuevo ¨ªdolo. En el Ayuntamiento han puesto una pancarta en el balc¨®n principal: 'Mohamed Katir, orgullo mule?o'.

Porque Katir es, sobre todo, muy de su pueblo. All¨ª se entrena en un lago a las afueras de Mula, en solitario, con la compa?¨ªa de sus pensamientos y los kil¨®metros. Es un chico introvertido, pero risue?o, que se preocupa por sus compa?eros de equipo, que escribe poes¨ªa aunque le de verg¨¹enza ense?arla...

Cuando no est¨¢ en Mula, Katir sube a la altitud de Sierra Nevada, all¨ª devora kil¨®metros a 2.000 metros y hace series en la pista a ritmos alt¨ªsimos, igual que si fuera a nivel del mar. Eso le ha convertido en un superatleta que estall¨® este 2021. "Yo no guardo ning¨²n secreto, es trabajo duro y diario. Descanso y nutrici¨®n. La gente que me conoce sabe que entreno muy fuerte y con mucha intensidad y calidad. Secretos no tengo ninguno. Gracias a eso he conseguido mis marcas", explica Katir, que corre con unos clavos muy peculiares, de sierra.

En Tokio, donde s¨®lo se ha alineado en 5.000, le esperan rivales de una entidad alt¨ªsima. Los ugandeses Joshua Cheptegei y Jacob Kiplimo, el et¨ªope Wale que este lunes hizo los obst¨¢culos o el canadiense Mo Ahmed. Todos son peligrosos, pero ninguno corre los 1.500 tan r¨¢pido como Katir, el que lo hac¨ªa, Jakob Ingebrigtsen, se ha borrado. Las dudas son si ser¨¢ capaz de aguantar el nivel de forma que tuvo en las Diamond League y c¨®mo responder¨¢ ante la presi¨®n de unos Juegos.

Pero Katir parece tranquilo en la Villa, como en casa. Adaptado total: "No tengo problemas a la hora de dormir, a las 23:30 de la noche estoy acostado y si puedo me echo una siesta". De Mula a Tokio.