El hijo de Van der Vaart despunta

Damian van der Vaart, hijo de Rafael, vestir¨¢ por primera vez la camiseta de la selecci¨®n de Pa¨ªses Bajos. A sus 15 a?os, vive junto a su padre en Dinamarca, lo que dificulta su convocatoria con el equipo nacional, debido a que est¨¢ m¨¢s alejado del foco que los futbolistas que contin¨²an en su pa¨ªs natal. Sin embargo, su gran rendimiento le ha llevado a portar la el¨¢stica 'oranje' a partir del pr¨®ximo 7 de marzo.

Lo har¨¢ con la selecci¨®n Sub-16, en la que podr¨ªa compartir vestuario con Shaqueel van Persie, hijo de Robin, exdelantero del Arsenal. Y es que Damian van der Vaart es un adelantado a su tiempo y su padre es su principal valedor. Recientemente, debut¨® en un partido amistoso con el primer equipo del Esbjerg. All¨ª, Rafa es entrenador asistente desde hace unos meses tras, precisamente, concluir su carrera deportiva en ese club.

Queda por ver el techo de Damian. Dif¨ªcil tendr¨¢ igualar al exmadridista, que lleg¨® a enfundarse un total de 109 veces la camiseta de la selecci¨®n. Por el momento, su nombre no se relaciona todav¨ªa con ning¨²n grande europeo y prefiere apostar por un proceso. Entrena de vez en cuando con los mayores, que est¨¢n en el octavo puesto de la clasificaci¨®n de la primera divisi¨®n danesa. Puede estar tranquilo: desde luego, su club apuesta por la juventud. La mayor¨ªa de futbolistas de la primera plantilla son menores de 25 a?os e, incluso, hay varios que tienen un hueco sin alcanzar la veintena.

Un fuerte apego a Espa?a

Quien sabe si, siguiendo la estela de su padre, Damian acaba defendiendo la camiseta de un equipo espa?ol en el futuro. Rafael no solo jug¨® bajo nuestras fronteras para el Real Madrid. Tambi¨¦n visti¨® los colores del Betis, aunque fue una etapa desafortunada, en la que sum¨® m¨¢s cr¨ªticas que buenas actuaciones. Despu¨¦s ya se march¨® a Dinamarca, al Midtjylland y el mencionado Esbjerg, donde se retir¨® en 2018. Al menos, del f¨²tbol de ¨¦lite, ya que despu¨¦s prob¨® suerte en el Chiclana Industrial, donde disput¨® un partido en Primera Divisi¨®n Andaluza.

Fue a modo de homenaje, ya que solo lleg¨® a jugar ese encuentro. No fue fruto de la casualidad ni de su buena experiencia en Espa?a tiempo atr¨¢s. En el pueblo viv¨ªan sus abuelos y ten¨ªa un gran v¨ªnculo emocional con ¨¦l. Su hijo, no obstante, est¨¢ centrado en el f¨²tbol dan¨¦s y esperando, sin presi¨®n, lo que le depare el futuro. Desde luego, hay talento en la casa Van der Vaart.