Muere Gento, ¡®La Galerna del Cant¨¢brico¡¯
El mejor extremo izquierdo de todos los tiempos ha fallecido en Madrid a los 88 a?os de edad. Era conocido popularmente como 'La Galerna del Cant¨¢brico'.
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Francisco Paco Gento L¨®pez, el mejor extremo izquierdo de todos los tiempos, ha fallecido en Madrid a los 88 a?os de edad. Conocido popularmente como ¡®La Galerna del Cant¨¢brico¡¯, Gento naci¨® en Guarnizo en octubre de 1933. Comenz¨® a despuntar en equipos santanderinos como La Monta?a y el Rayo Cantabria hasta que llega al Racing de Santander. Su debut en Primera Divisi¨®n ser¨ªa con dicho conjunto en febrero de 1953. Nada m¨¢s y nada menos que ante el Barcelona. Su velocidad, endiablada, su potencia y una cualidad formidable llaman la atenci¨®n de Bernab¨¦u: un regate seco, incapaz para los defensas de poder evitarlo m¨¢s la precisi¨®n de su pierna izquierda. Todo un compendio de virtudes para un extremo. El Madrid le ficha ese verano para reforzar su plantilla: pag¨® un mill¨®n y medio de pesetas adem¨¢s de ceder a dos jugadores, Espina y Urcelay. El bagaje con el que llegaba al conjunto blanco era de apenas 10 encuentros de Liga y otros cuatro de Copa. La suerte estaba echada.
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Sin embargo, sus inicios en el conjunto blanco no fueron muy alentadores. Hasta tal punto que Bernab¨¦u medit¨® seriamente devolverle al Racing a cambio de Espina, e incluso cederle a otro equipo tras la primera campa?a. Pero ah¨ª apareci¨® la figura de su gran amigo Alfredo Di St¨¦fano. Enterado de los planes del presidente, en una reuni¨®n entre La Saeta y Don Santiago, ¨¦ste le convenci¨®: ¡°No puede deshacerse de ¨¦l. Es un portento. No conozco a Espina, porque no lo he visto jugar, pero s¨ª a Gento, y no se puede desaprovechar a un muchacho que tiene 19 o 20 a?os. No se puede perder a un jugador de esa naturaleza¡±, le vino a decir. En esa reuni¨®n tambi¨¦n le explic¨® al presidente la conveniencia de fichar a un compatriota y gran amigo suyo, H¨¦ctor Rial. El Madrid victorioso de las Cinco Copas de Europa consecutivas comenzaba a modelarse.
La llegada de Rial supuso el estallido de Gento como extremo izquierdo. La depurada t¨¦cnica de Rial m¨¢s la velocidad de Gento era una de las bazas de aquel Madrid de mediados de los 50. Eso (¡°Yo le daba el bal¨®n y sal¨ªa corriendo, Rial me echaba la pelota y yo llegaba al sitio a la vez que ella. Todo el m¨¦rito era de H¨¦ctor¡±, explic¨® en alguna ocasi¨®n), y un consejo que le dio el argentino al c¨¢ntabro. Gento, amante de las gaseosas, sol¨ªa beberlas en las comidas y en las cenas. En una de ellas, Rial le aconsej¨® a Gento cambiar las gaseosas por agua. Lo que consigui¨® fue que el c¨¢ntabro volase a¨²n m¨¢s y aprovechase los pases filtrados y en profundidad que le met¨ªa el argentino. Fue una gran sociedad la que conformaron y de la que se aprovech¨® el Real Madrid.
Contrastado ya como una estrella del panorama futbol¨ªstico espa?ol, Europa tardar¨ªa poco en conocerle. En 1957 fue el encargado de asegurar el t¨ªtulo de los blancos al marcar el segundo gol de la final de la Copa de Europa. Curiosamente fue en el estadio Santiago Bernab¨¦u y ante la Fiorentina. Un a?o despu¨¦s, en Bruselas, ser¨ªa el gran protagonista de la final ante otro conjunto italiano, en este caso el Milan. Con empate a dos tantos tras los 90 minutos reglamentarios, Di St¨¦fano se acerc¨® al c¨¢ntabro y le hizo un aparte: ¡°Paquito, ?c¨®mo est¨¢s? Esto s¨®lo lo puedes arreglar t¨². S¨®lo t¨² tienes fuerza, as¨ª que te las vamos a echar todas. Si tu no nos sacas de esto, no ganamos¡±. Y Gento decidi¨® la final: retras¨® su posici¨®n para que Fontana, el defensor rossonero encargado de vigilarle le diera un poco m¨¢s de espacio, y a los dos minutos de comenzar la segunda parte de la pr¨®rroga sentenci¨® la final con un disparo cruzado que bati¨® a Soldan. Fue el 3-2 definitivo.
Ese verano de 1958, el Madrid incorporaba a Puskas. El Madrid formaba con la mejor delantera de la historia: la conformaban Kopa, Rial, Di St¨¦fano, Puskas y Gento. S¨®lo durar¨ªa una campa?a, ya que Kopa, aduciendo motivos personales, se marchar¨ªa del conjunto blanco en 1959, pero fue justamente la mejor campa?a de Gento: anot¨® 14 goles en Liga (dos al Barcelona en el Camp Nou en un encuentro que acab¨® 3-5 favorable a los blancos) y se proclamar¨ªa campe¨®n de Europa por quinta vez de manera consecutiva.
La d¨¦cada de los 60 fue una d¨¦cada agridulce para los blancos: se ganar¨ªan casi todas las Ligas, pero se perdieron dos finales de Copa de Europa. Adem¨¢s, el glorioso equipo de la d¨¦cada anterior comenzaba a perder a sus grandes protagonistas: Di St¨¦fano se march¨® en 1964, tras caer en la final de la Copa de Europa ante el Inter (3-1) y una discusi¨®n con Miguel Mu?oz. Puskas se marchar¨ªa dos a?os despu¨¦s, en 1966. Incluso ¨¦l pudo haberse marchado antes: sus actuaciones son tan brillantes que el Inter de Mil¨¢n de Moratti quiso ficharle para el conjunto interista. Corr¨ªa el a?o 1961, cuando el millonario presidente del conjunto neroazzurro se puso en contacto con Santiago Bernab¨¦u. El presidente interista quer¨ªa fichar a una gran estrella para intentar asaltar el trono europeo. Los blancos hab¨ªan ganado las cinco primeras ediciones, y quer¨ªa que su equipo fuese el siguiente conjunto en levantar el ansiado anfora que se?alaba al campe¨®n europeo. Pero Bernab¨¦u no lo vio claro, as¨ª que dijo que no estaba en venta. Poco tiempo despu¨¦s, Helenio Herrera le pidi¨® al presidente el fichaje de Luis Su¨¢rez, al que ya hab¨ªa dirigido en el Barcelona. El Inter pag¨® 25 millones de pesetas de la ¨¦poca por el gallego...
Pero Gento, el eterno capit¨¢n, segu¨ªa siendo importante. Es cierto que hab¨ªa perdido su punta de velocidad, pero era el l¨ªder en el que se apoyaban los j¨®venes jugadores blancos, que volver¨ªan a ganar la Copa de Europa en 1966, con un once formado completamente por jugadores espa?oles. Gento se convert¨ªa en el primer y ¨²nico jugador hasta ahora en poder hacerse una foto: la de su figura con seis Copas de Europa.
Pero todo tiene su final. En 1971, y tras caer el Madrid en la final de la Recopa, Bernab¨¦u decide remodelar la plantilla. Nadie le dice nada a Gento, hasta que Raimundo Saporta, a la saz¨®n vicepresidente del conjunto blanco, le llam¨® telef¨®nicamente a su casa: ¡°Yo pens¨¦ que, como era el capit¨¢n, me llamaba para pedir consejo sobre alg¨²n jugador, c¨®mo hab¨ªa sido su comportamiento a lo largo de la temporada, para luego coment¨¢rselo al presidente. Sin embargo, comenz¨® a hablar de mi trayectoria, que llevaba 18 a?os en el equipo, de mi futuro, de que pod¨ªa seguir vinculado al club de alguna manera. Seg¨²n me iba diciendo eso, yo me acordaba de Alfredo (por Di St¨¦fano)... Poco a poco me iba dando cuenta de que me estaba diciendo que no iba a seguir, pero no de manera directa, hasta que me ofreci¨® ser el entrenador del equipo juvenil, eso s¨ª, cobrando lo mismo que ganaba siendo jugador. El d¨ªa de la presentaci¨®n del equipo me desped¨ª, Ellos estaban de corto, y yo de traje. As¨ª me fui¡±.
Gento se hizo cargo del equipo filial blanco durante tres temporadas. Incluso pudo haber dirigido al primer equipo, pero¡ sucedi¨® en 1974. Miguel Mu?oz, entonces entrenador blanco, decidi¨® dimitir al frente del banquillo blanco. Reunido con Bernab¨¦u, fue el propio Mu?oz quien ¡®recomend¨®¡¯ que su sucesor fuese Luis Molowny. Fue su segunda gran decepci¨®n como jugador blanco. La primera fue su no presencia en la fase final de la Eurocopa de 1964, un torneo que acabar¨ªa ganando la Selecci¨®n espa?ola (jug¨® 43 partidos marcando cinco goles con la camiseta nacional) en el propio estadio Santiago Bernab¨¦u a la URSS (2-1).
As¨ª pues, en 1971, Gento colgar¨ªa las botas. Tendr¨ªa tres partidos homenaje debido a su trayectoria como madridista. El primero fue en 1965 ante River Plate (le fue impuesta la Medalla al M¨¦rito Deportivo por sus 12 a?os de permanencia en el club blanco). El segundo, en 1972, ante Os Belenenses (coincidiendo con el XXV aniversario de la inauguraci¨®n del Bernab¨¦u), y el tercero en 2007, ante el Partiz¨¢n de Belgrado, el equipo ante el que levant¨® su sexta Copa de Europa. Fue ante los portugueses cuando marcar¨ªa su ¨²ltimo gol como madridista: se lo marc¨® a F¨¦lix Mourinho, padre de Jos¨¦, actual entrenador del Roma y ext¨¦cnico blanco (desde 2010 a 2013). Fue en el minuto 15, y de penalti, otra de sus virtudes (¡°Miraba al centro, nunca al portero, ¨¦ste se va a tirar a un lado y te va a dejar espacio para poder marcar¡±, explic¨®). Luego fue sustituido entre una atronadora ovaci¨®n. En aquel partido se inaugur¨® el nuevo marcador electr¨®nico, de fabricaci¨®n h¨²ngara, donde se ilumin¨® y estamp¨® la imagen del definitivo adi¨®s a Paco Gento.
Siempre vinculado al conjunto blanco (tambi¨¦n entren¨® al Castell¨®n, al Palencia y al Granada), a comienzos del siglo XXI fue nombrado Embajador del club blanco, viajando por toda Europa representando al conjunto blanco. En 2016 fue elegido un¨¢nimemente Presidente de Honor del conjunto blanco, sucediendo a su gran amigo Alfredo Di St¨¦fano, fallecido en 2014. Ahora Gento deja para la historia 12 Ligas, seis Copas de Europa, dos Copas, dos Copas Latinas y una Copa Intercontinental am¨¦n de una larga ristra de trofeos individuales. T¨ªtulos, t¨ªtulos y m¨¢s t¨ªtulos. As¨ª se resume la trayectoria de ¡®La Galerna del Cant¨¢brico¡¯. El mejor extremo izquierda de todos los tiempos.