Medio Madrid es suficiente
Benzema y Mendy pusieron acento franc¨¦s a la victoria de un Madrid que no acus¨® las bajas. Zidane puso a Marvin y Arribas por delante de Isco. Marcelo revive y el Getafe fracasa.
Primer apunte: la mitad del Madrid es mucho mejor que todo el Getafe. Segundo: Marcelo, con tres centrales, a¨²n est¨¢ en buen uso. Tercero: no hay peligro de cantericidio por darle cancha a los j¨®venes. Esas conclusiones quedaron en un partido en el que el equipo de Zidane se dio por aludido con el empate del Celta en el Wanda y teji¨® con paciencia e inteligencia su victoria. Este largometraje tuvo menos suspense de lo habitual por su trabajo y por el derrumbe del Getafe, hace tiempo dentista y hoy sin dientes.
Hubo un tiempo no tan lejano en que Isco fue alguien en la Selecci¨®n. Y en el Madrid lleg¨® sentar a Bale, esa cepa brit¨¢nica que mut¨® a inofensiva demasiado pronto, cuando Zidane a¨²n se atrev¨ªa a hablar de innegociables. Ahora es farolillo rojo. Con nueve ausentes y Odegaard en Londres, Zidane le puso por delante a Marvin, como le hab¨ªa puesto por delante a Arribas ante el M?nchengladbach o el Levante. Su suplencia de este martes le cuelga el cartel de caso perdido. Y es que para evitarle tuvo que dar un paso m¨¢s en su reciente papel de arreglista: Mendy de central izquierdo en una l¨ªnea de tres con Nacho y Varane; Marcelo, de carrilero; Modric, de pivote, Asensio, de mediapunta... Una sacudida en toda regla.
Un Getafe cl¨¢sico... y fallido
El Getafe, en cambio, regres¨® a su vieja f¨®rmula, ese 4-4-2 que tanto molestaba al de enfrente. Su partido es que el rival no tenga partido. Y ah¨ª sobraban Kubo y Ale?¨¢. As¨ª que el Getafe se volvi¨® cl¨¢sico sin conseguirlo. No le va hacerse el simp¨¢tico; presiona, incordia, aburre y en sus buenos d¨ªas mata con dos buenos puntas. Esta vez ni eso. Ese plan ha pinchado ante los grandes porque para escapar de ¨¦l se necesitan futbolistas de un pie muy fino y entre los equipos alfa abundan. Y tampoco ha colado esta temporada ante otros de menor tama?o porque falla el segundo acto: meter goles.
La conclusi¨®n es que ni Madrid ni Getafe est¨¢n a la altura de sus mejores d¨ªas. El equipo de Zidane huye de los espacios, se repite en el juego al pie, no le da marcha a los partidos. Queda la sensaci¨®n de que est¨¢ demasiado visto, de que a este ritmo su recorrido ser¨¢ corto. As¨ª que pone casi todo el foco en el bal¨®n parado. Ah¨ª encontr¨® sus dos primeras oportunidades: una pelota perdida en el ¨¢rea de esas que siempre buscan a Casemiro y un cabezazo de Benzema en un c¨®rner. El brasile?o desaprovech¨® su magnetismo en la zona con un disparo a la d¨¦cima fila de asientos y el franc¨¦s top¨® con el larguero, del que se ha hecho ¨ªntimo enemigo.
Y mientras, el Getafe, de salida, incumpli¨® sus dos grandes mandamientos: robar muy arriba y hacer de la segunda jugada su primera jugada. Pero sumando las imperfecciones de uno y otro estuvo muy por encima el Madrid. Marcelo, con gente a su espalda, vive m¨¢s tranquilo y se suelta. Y Modric no est¨¢ investigado en el proceso: sigue jugando como cuando levant¨® el Bal¨®n de Oro. Tambi¨¦n ¨¦l tuvo el gol, en un remate sin oposici¨®n desde el borde del ¨¢rea que rechaz¨®, en postura estrafalaria, David Soria con una rodilla.
A otros no les fue tan bien en la primera parte. Vinicius es tigre enjaulado, Benzema resulta demasiado espor¨¢dico y Asensio baja a menudo el volumen en muchas fases del partido.
El Getafe no pas¨® de bachear el encuentro en campo propio sin la agresividad de otros tiempos, se sinti¨® extra?o ante el cambio de dibujo del Madrid y no tuvo ninguna presencia ante Courtois en los primeros 45 minutos. Fue un equipo resistente en el peor sentido del t¨¦rmino: ultradefensivo y sin respuesta.
Lluvia y goles
El descanso cambi¨® el clima (llovi¨® con ganas) pero no el paisaje. El Madrid sigui¨® encogiendo al Getafe y perdiendo ocasiones. La primera de Benzema, cuyo remate sin oposici¨®n sac¨® con mano r¨¢pida David Soria. As¨ª, al equipo de Zidane no le conven¨ªa al resultado ni al de Bordal¨¢s la din¨¢mica. El Getafe carg¨® munici¨®n con Kubo, Ale?a y Mata, sus dos fichajes de invierno y su nueve de gala. El Madrid cambi¨® canterano por canterano, Arribas por Marvin, que no son lo mismo. Isco lo contempl¨® con el cuerpo y la moral congelados en la grada. M¨¢s fantas¨ªa, menos velocidad y un papel nuevo para Vinicius: carrilero derecho. Una decisi¨®n de riesgo m¨¢ximo con un buen principio. El primer centro del brasile?o desde su nueva finca lo mand¨® a la red Benzema con la cabeza, la mejor arma ahora mismo de un compositor concienciado como rematador. El chollo que se promet¨ªa Cucurella acababa siendo la llave maestra del Madrid.
A¨²n quedaban por ver m¨¢s fen¨®menos paranormales. Arribas, que lo primero que hizo en su debut europeo fue tirarle un ca?o a un defensa del Gladbach, abri¨® a Marcelo en la izquierda y su centro al primer palo lo remat¨® como un ariete... ?Mendy! Extra?an ya pocas cosas en un equipo tan golpeado por las lesiones que ha tenido cinco laterales en poco m¨¢s de cuatro meses. S¨®lo entonces, con el partido archivado, entr¨® Isco. Sus d¨ªas parecen contados. Tiene s¨®lo 28 a?os y su magia blanca se ha vuelto negra.