Los otros protegidos de Koeman
No s¨®lo Messi tiene privilegios. Los treinta?eros Alba, Piqu¨¦ y Busquets, se?alados en Lisboa, lo juegan casi todo cuando est¨¢n disponibles pese a haber tenido tambi¨¦n errores.

No s¨®lo Messi, que ha jugado todos los minutos oficiales de la temporada (con el Bar?a y con Argentina) tiene 'privilegios', si as¨ª se puede decir, con Ronald Koeman. Pese a terminar se?alados la temporada pasada por el 2-8 de Lisboa hasta el punto de que dos de ellos, Sergio Busquets y Jordi Alba, eran transferibles; y el otro, Gerard Piqu¨¦, se ofreci¨® como cabeza de turco, los treinta?eros y vacas sagradas del vestuario del Bar?a han jugado pr¨¢cticamente todo cuando han estado disponibles pese a que su rendimiento est¨¢ en cuesti¨®n. En cierto modo, tambi¨¦n est¨¢n protegidos por Koeman.
Lo de Sergio Busquets y Jordi Alba viene de atr¨¢s. Superados f¨ªsicamente en los grandes partidos europeos en temporadas anteriores, los dos empezaron relativamente bien, con buenas actuaciones ante Villarreal y Celta, pero su rendimiento ha empezado a caer en cuanto se han empezado a acumular los esfuerzos. A Busquets le pas¨® por encima el Cl¨¢sico y la semana con tres partidos que acab¨® en Vitoria. No tuvo demasiada explicaci¨®n que Koeman prescindiese de Pjanic despu¨¦s del partido que hab¨ªa firmado en Tur¨ªn, ya que el bosnio s¨ª est¨¢ f¨ªsicamente a buen nivel. Busquets ha jugado 523 minutos y s¨®lo ha sido dosificado en la Champions ante Ferencvaros (24') y Juventus (45'). En LaLiga hab¨ªa jugado todo menos ocho minutos hasta que Koeman detect¨® que en Vitoria no estaba sumando lo necesario y lo sustituy¨®. Le cuesta darle velocidad al juego. Veremos si como se?al. Alba, por su parte, jug¨® el Cl¨¢sico entre alfileres, despu¨¦s de haberse lesionado en el partido del Sevilla y de utilizar el par¨®n para recuperarse. J¨²nior contin¨²a en el ostracismo sea cual sea el rendimiento de un jugador que ahora, al menos, est¨¢ amenzado por Dest. Alba estuvo desconcentrado y, por primera vez, recibi¨® un toque de atenci¨®n con la sustituci¨®n,
Busquets y Alba charlaron a principio de temporada con Koeman. Los dos, que estaban en la lista negra despu¨¦s del 2-8 de Lisboa, est¨¢ atados al club por contratos largu¨ªsimos y alt¨ªsimas fichas en dos casos complicados de atacar en la adecuaci¨®n salarial. Koeman les expuso una situaci¨®n que ellos ya conoc¨ªan. Como su salida era imposible, iban a seguir. Contar¨ªan con ellos pero les ped¨ªa compromiso. Despu¨¦s de un buen inicio, su rendimiento empieza a ser de nuevo dubitativo, pero de momento nadie les tose y Koeman no les ha dado los mismos toques de atenci¨®n que a Griezmann, Demb¨¦l¨¦ o Ansu, por poner algunos ejemplos.
Piqu¨¦ tambi¨¦n ha jugado siempre que ha estado disponible. Pese a no ser de los peores la temporada pasada, el central levant¨® la mano despu¨¦s del desastre en Da Luz, pero finalmente no sali¨® del Bar?a y hasta ha ampliado su contrato hasta junio de 2024. Koeman le ha dado galones y lo ha jugado todo excepto el partido de Tur¨ªn, donde estaba sancionado. Despu¨¦s de un buen inicio, como el de Busquets y Alba, ha perdido la concentraci¨®n. El d¨ªa del Ferencvaros fue expulsado por enrocarse en una acci¨®n Nguen con 3-0; contra el Madrid perdi¨® junto a Lenglet la referencia en la acci¨®n del 0-1 de Valverde; y ha completado diez d¨ªas horribles con la acci¨®n con Neto en Mendizorroza. Aunque el brasile?o pudo haber despejado el bal¨®n antes, fue el central quien meti¨® al portero en un l¨ªo. Primero con un gesto que le confundi¨®. Luego, mand¨¢ndole un bal¨®n que se le ech¨® encima demasiado pronto. Sea por su estatus o por la ausencia de centrales en el Bar?a (Umtiti y Ara¨²jo est¨¢n sin el alta m¨¦dica), Piqu¨¦ tampoco est¨¢ amenazado.
Una de los cambios m¨¢s aplaudidos en este inicio de la era Koeman ha sido la recuperaci¨®n de ciertos valores: la profesionalidad en los horarios, la seriedad e intensidad en los entrenamientos y el regreso de cierta meritocracia que ha permitido que los cr¨ªos como Ansu o Pedri sean titulares en muchos partidos. Con las vacas sagradas, sin embargo, Koeman todav¨ªa no se ha atrevido. Ciertos privilegios siguen vivos en Can Bar?a.