La leyenda contra el lujo
El Madrid se juega la continuidad en su torneo favorito ante la plantilla m¨¢s cara del mundo y un rival familiar: Guardiola. Bale (tres goles en once meses) o Vinicius, duda blanca.
Primero fue el dinero y luego el modelo. Hace doce a?os Mansour bin Zayed, quinto hijo del emir Zayed bin Sultan Al Nahyad, primer presidente emirat¨ª, le compr¨® el Manchester City al exprimer ministro tailand¨¦s Thaksin Shinawatra. El jeque, ministro de Asuntos Presidenciales de los Emiratos ?rabes, presidente de la Autoridad de Carreras de Caballos del pa¨ªs, marido de dos jequesas, propietario del yate de mayor tama?o del planeta y amigo personal de Barak Obama, pag¨® 360 millones por el 90% de las acciones de la entidad. Aquel desembolso, que cambiaba la vida a un club que hasta entonces s¨®lo hab¨ªa ganado dos ligas, cuatro copas y una Recopa, fue el aperitivo.
Desde entonces Mansour bin Zayed ha gastado 1.687 millones en fichajes, a raz¨®n de 153 al a?o, y ha ido replantando, a su manera, la f¨®rmula ganadora del Bar?a. As¨ª, fueron llegando Ferran Soriano, exvicepresidente cul¨¦ con Laporta; Txiki Begiristain, exdirector deportivo, y finalmente, Pep Guardiola, con el que ha ganado las dos ¨²ltimas ligas. Un crecimiento impensable para un club que hace solo 22 a?os estaba en tercera divisi¨®n. Pero a la vez un crecimiento artificial, alimentado por un dinero fuera de la industria contra el que la industria se vacun¨® (el fair play financiero de la UEFA) para evitar que se extiendan casos como del M¨¢laga, v¨ªctima de un jeque de ida y vuelta.
A la eliminatoria (sigue el partido en directo en As.com) llega con una sanci¨®n terrible a cuestas (dos a?os fuera de Europa) por inflar los ingresos por patrocinio en el lustro 2012-2016 y por obstruir la investigaci¨®n de la UEFA. La aerol¨ªnea emirat¨ª Etihad paga por aparecer en su camiseta 80 millones al a?o, por encima de lo que perciben Madrid (70) o Bar?a (55), clubes con un m¨¢rketing infinitamente superior. Uli Hoeness, entonces presidente del Bayern, afirm¨® hace dos a?os: "Si Guardiola quiere un jugador de 100 millones, el jeque sube el gas y lo tiene".
Pero detr¨¢s de esa oscura arquitectura de club queda un entrenador de ¨¦xito y un equipo estupendo, lujos¨ªsimo, valorado en 1.290 millones de euros, m¨¢s que ning¨²n otro en el mundo. Por los once que jugaron de inicio contra el Leicester el s¨¢bado pag¨® 546 millones en traspasos. La alineaci¨®n del Madrid, que tampoco es precisamente modelo de ahorro, ante el Levante era 237 m¨¢s barata.
El City est¨¢, quiz¨¢, ante su ¨²ltima gran oportunidad en tiempo de conquistar la Champions, el agujero negro que se lo ha tragado en estos a?os de vino y rosas. S¨®lo una vez lleg¨® a semifinales, en 2016, y lo despach¨® el Madrid. En las dos ¨²ltimas ediciones cay¨® en cuartos. Ahora, adem¨¢s, no tiene el burladero de la Premier, pues est¨¢ a 22 puntos del Liverpool.
A Madrid llega de gala, tras recuperar a Sterling, baja en los dos ¨²ltimos partidos, y autor de 20 goles en el curso, s¨®lo uno menos que el pichichi Ag¨¹ero. Ellos dos m¨¢s De Bruyne, ocho tantos y 19 asistencias, forman el tri¨¢ngulo m¨¢gico del equipo, con Rodri como eje de rotaci¨®n y Fernandinho felizmente reciclado como central.
Mendy y Valverde
M¨¢s puestos bailan en un Madrid al que regresa Mendy, salvada su amenaza de suspensi¨®n para el Cl¨¢sico. Ha jugado todos los partidos importantes del curso por delante de Marcelo y con una justificaci¨®n estad¨ªstica: con ¨¦l, el equipo encaja la mitad de goles. En realidad, Zidane agita al equipo durante el curso para llegar con su guardia pretoriana a los encuentros de la verdad. Por eso se espera hoy a Valverde, titular en el Cl¨¢sico, en los dos duelos ante el Atl¨¦tico, en la Supercopa ante el Valencia y en todos los compromisos de gran tama?o a partir de octubre, cuando adquiri¨® rango, a excepci¨®n del que el Madrid jug¨® ante el Sevilla en el Bernab¨¦u. Estaba sancionado. As¨ª que, ca¨ªdo Hazard, quedan tres plazas libres, dos centrocampistas y un atacante, con Modric, Kroos e Isco para la primera vacante, y Bale y Vinicius para la segunda. El brasile?o s¨®lo ha sido titular diez veces pero vuelve a ser el extremo burbujeante de la temporada pasada. Bale, en cambio, anda en paradero desconocido. Ha metido tres goles en el Madrid en los ¨²ltimos once meses, pero Zidane a¨²n espera que vuelva, m¨¢s aferrado a su curr¨ªculum que a su figura.
El City, que acab¨® l¨ªder en un grupo sencillo (Shakhtar, Dinamo Zagreb y Atalanta), juega bajo el molde de Guardiola, pero sin el bot¨®n nuclear de Messi (la ¨²nica vez que perdi¨® en el Bernab¨¦u en ocho visitas, con el Bayern, fue la ¨²nica vez que vino sin el argentino). Est¨¢ cinco puntos por delante del Madrid en posesi¨®n, pero dispara cinco veces menos por partido. A cambio, ha conseguido que le lleguen menos que a nadie en la competici¨®n. Eso era el Madrid hasta hace dos semanas, un equipo que se proteg¨ªa con la falta de gol ajena de la carest¨ªa propia (en Champions a¨²n no han marcado Jovic, Hazard, Bale, Lucas, Isco, James¡). La Real rompi¨® aquel subid¨®n de confianza, que exige una recomposici¨®n expr¨¦s, porque la Champions no recoge el derecho de rectificaci¨®n.