Sin gol ni liderato
El Madrid fracasa en el Ciutat de Valencia por falta de pegada y un enorme desorden final. Hazard se lesion¨®. Decidi¨® un golazo de Morales.
Se acab¨® la ventaja del Madrid, que llegar¨¢ al Cl¨¢sico con el agua al cuello y sin liderato que amortig¨¹e su ca¨ªda. Fue tras un hora de dominio sin balas y una recta final donde asomaron todos los fantasmas del pasado: una alarmante falta de remate, un equipo extremadamente largo y un Courtois excesivamente confiado. El Levante gan¨® la batalla de la resistencia hasta que lleg¨® el golazo de Morales, tantas veces ¨¢ngel de la guarda.
Aun enca?onado por el liderato provisional del Bar?a, aun vestido con una alineaci¨®n repleta de honores, aun convicto del doloroso empate ante el Celta, no tuvo el Madrid la salida explosiva que merec¨ªa el caso. El Levante de Paco L¨®pez es un equipo m¨¢s aventurero de lo que dicen su clasificaci¨®n y su presupuesto y no se sinti¨® impresionado por el Madrid ni por las necesidades propias y ajenas. L¨®pez meti¨® dos puntas, Roger Mart¨ª y Mayoral, y las dos alas con m¨¢s vuelo de la plantilla, Bardhi y Morales. El plan era un careo con el Madrid desde el principio.
Zidane tampoco se dej¨® nada en la despensa con las excepciones de Valverde y Mendy, amenazado de suspensi¨®n. Eso le permiti¨® repetir a Marcelo, que hace m¨¢s el¨¢stica y menos resistente su banda, y le dio otra oportunidad a Isco, ese viol¨ªn que tan pronto suena como calla. Los otros nueve, salvo percance, estar¨¢n en ese doble paseo entre cocodrilos de la pr¨®xima semana.
Con unos y con otros poco precavidos qued¨® un partido a campo abierto, presuntamente m¨¢s inclinado al Madrid, superior en la pegada, aunque en los ¨²ltimos tiempos el consumo de goles haya ca¨ªdo en picado. En cinco minutos concentr¨® su fuego sobre el ¨¢rea de Aitor. El meta le detuvo dos remates a Benzema y Modric y luego fue a meter los pu?os y acab¨® metiendo la pata en un despeje que pudo acabar en su puerta si Casemiro tiene m¨¢s tino en su cabezazo bombeado. Al otro lado, todo qued¨® en un casi, en env¨ªos bienintencionados de Bardhi y Morales a los que no atendi¨® nadie. Qued¨® la sensaci¨®n que hab¨ªa m¨¢s energ¨ªa que resultados en el juego granota, equipo en el que Campa?a pone toda la m¨²sica. Ah¨ª se juega a lo que ¨¦l decide. Un futbolista que no suelta la batuta.
Sin embargo, su buen manejo de la situaci¨®n no evit¨® que el partido derivase hacia el ¨¢rea de Aitor, asediado en los ¨²ltimos minutos de la primera mitad. A Benzema se le fue un gol porque, ante el meta, ni tir¨® ni pas¨®. Y sin respiro, Aitor sac¨® un misil de Modric. El Levante lleg¨® a gatas al intermedio.
De m¨¢s a menos
Y as¨ª sigui¨® en la segunda mitad. El cuadro grantoa qued¨® arropado en el ¨²ltimo cuarto de campo, confiado en su fortaleza defensiva y la baj¨ªsima definici¨®n del Madrid, una noche m¨¢s con m¨¢s juego que colmillo. Isco abri¨® todas las l¨ªneas de investigaci¨®n entre la zaga granota sin encontrar un solo espacio. Y cuando apareci¨®, no hubo acierto en los rematadores. Marcelo le meti¨® a Hazard un pase de primeras que el belga no pudo domar en su galopada en solitario ante Aitor y acab¨® rematando desastrosamente. Casi de inmediato tuvo que marcharse, lesionado. Tambi¨¦n reclam¨® el Madrid un penalti por mano de Campa?a, uno de esos que se pitan o no seg¨²n lo que hayan merendado ¨¢rbitro y VAR. El empate fue acabando con la cautela del Madrid, que empez¨® a hacerse peligrosamente largo y vulnerable.
Zidane busc¨® por fuera lo que por dentro se hab¨ªa apagado, con Lucas V¨¢zquez por un costado y un enorme Vinicius por el otro. Pero entonces el equipo ya era otro, menos dominante y m¨¢s expuesto. Y en esas, Morales agarr¨® un zurdazo impresionante, lejano y con no demasiado ¨¢ngulo, por el primer palo que pill¨® en Babia a Courtois. Fue el fin del Madrid, de su liderato y de esa sensaci¨®n de seguridad con la que hab¨ªa caminado en los ¨²ltimos meses. El Cl¨¢sico ya es a vida o muerte.