El club milagro del ciudadano honor¨ªfico de Nebraska
Amante del f¨²tbol espa?ol, el presidente Domuschiev compr¨® el club en 2011 y desde entonces impera en la liga b¨²lgara y obtiene siempre beneficios.


Desde la m¨¢gica generaci¨®n de futbolistas b¨²lgaros que maravill¨® en los 90 y que llev¨® a su pa¨ªs a la cuarta plaza en el Mundial de Estados Unidos (1994), Bulgaria no hab¨ªa tenido un equipo tan impactante como el Ludogorets, dominador durante ocho a?os seguidos de los torneos nacionales y un asiduo a competiciones europeas, incluida la Champions. Una excepci¨®n en el decadente deporte de un pa¨ªs oxidado despu¨¦s de la ca¨ªda del tel¨®n de Acero que intenta recuperar su brillo.
El milagro de la ciudad de Razgrad, de apenas 33.000 habitantes, tiene nombre y apellidos: Kiril Domuschiev. Para entender la importancia de este magnate b¨²lgaro, uno de los m¨¢s ricos de su pa¨ªs con una fortuna que supera los 500 millones, hay que poner el foco en su trascendencia internacional. Con la Perestroika, a comienzos de los 90, fund¨® junto a su hermano una macroempresa llamada Advance Properties. Y, dentro del sector farmac¨¦utico, cre¨® Huvepharma, especializada en medicamentos para animales y en biotecnolog¨ªa, entre las diez m¨¢s importantes del mundo en su sector. Cuenta entre sus accionistas con City Bank, un respaldo financiero importante.
Su carisma se resume en su expansi¨®n y reconocimiento. Tiene instalaciones en B¨¦lgica, Italia y Estados Unidos, donde fue nombrado el a?o pasado ciudadano honor¨ªfico de Nebraska. Incluso, su empresa, que cuenta con filiales en Minnesota o Arkansas, fue nombrada empresa del a?o en Saint Louis. Si eso no fuera poco, este a?o ha comprado el importante grupo medi¨¢tico b¨²lgaro Nova Broadcasting Group, que posee siete canales de televisi¨®n, dos radios y numerosas webs. Domuschiev no solo controla el mejor club de f¨²tbol sino los derechos televisivos del pa¨ªs.
La compra de un club modesto que convirti¨® en gigante
Pero antes de eso, este apasionado del f¨²tbol quiso convertir su hobby en una pata m¨¢s de su negocio. Prob¨® suerte en el CSKA Sofia, pero se top¨® con un club hist¨®rico, con amplia masa social y con otras presiones en la capital. Por eso en 2011 decidi¨® comprar e invertir en el Ludogorets. En un a?o, ascendieron a Primera. Y, desde entonces, lo han ganado todo.
Domuschiev ha invertido ya alrededor de 100 millones y ha recuperado casi toda la inversi¨®n con un modelo de ventas de jugadores al que se le unen otras ingresos como los del fondo de solidaridad de ayudas europeas o las participaciones en las competiciones continentales. Se ha instalado en Razgrad (el Ludogorets lleg¨® a jugar sus primeros partidos en Sofia ante la hostilidad de la ciudad), ha remodelado el estadio, ha construido una ciudad deportiva y ha puesto en marcha un modelo exitoso con el espejo siempre del f¨²tbol espa?ol.
El presidente del club estudiaba espa?ol de ni?o y siempre se mostr¨® un apasionado por la cultura de este pa¨ªs. Ya en sus inicios contrat¨® a Sergi Mart¨ªn, del Villarreal, para que ordenara la metodolog¨ªa del f¨²tbol base y del primer equipo, amante del juego del Barcelona y de la Espa?a que alz¨® dos Eurocopas y un Mundial. Y ahora cuenta con Iv¨¢n D¨ªaz para proseguir con este trabajo.

El Ludogorets impera en un f¨²tbol b¨²lgaro que sigue a¨²n adormecido. El Estado ya no invierte en deporte y solo la inversi¨®n privada puede devolver al mapa a un pa¨ªs que, 25 a?os despu¨¦s de su mayor ¨¦xito deportivo, encuentra consuelo en el artificial pero original Ludogorets, el club milagro de Domuschiev.