El baj車n de la Liga de Naciones le pone deberes a Luis Enrique
Debe resolver con urgencia varios problemas: las dudas de la porter赤a, el socio de Ramos, el baile de cromos (30 jugadores utilizados), la eficacia del 4-3-3#
La Selecci車n ha ampliado este domingo los cuatro a?os consecutivos que lleva de capa ca赤da (Brasil 2014, Euro 2016 y Rusia 2018) tras confirmar que no jugar芍 la Final a Cuatro de la Liga de Naciones que se disputar芍 en Portugal en 2019. La siguiente cita se?alada en rojo en el calendario para Espa?a, tras este cuarto fracaso seguido, es la Eurocopa de las multisedes de 2020, siempre y cuando se clasifique, as赤 que Luis Enrique tiene por delante mucho trabajo hasta entonces para solventar los deberes que se le han ido acumulado: desde el planteamiento, a sus dudas en convocatorias y alineaciones, pasando por el juego.
La porter赤a
Aunque Luis Enrique ha apoyado a De Gea p迆blicamente en esta 迆ltima semana, 谷sa es una de las demarcaciones que m芍s dudas est芍n generando. El portero del Manchester United hizo un Mundial para olvidar (ataj車 uno de 12 remates) y su vuelta a escena, con intermitencias, no ha servido para reforzar su debilitada figura. La afici車n incluso ya a?ora a Casillas, el 迆ltimo gran due?o de los tres palos, y ya hay otras voces que piden un cambio en la porter赤a. El segundo guardameta de la Selecci車n es Kepa y el tercero, Pau L車pez. Ambos se repartieron los minutos en el 迆ltimo amistoso en Las Palmas. Luis Enrique ya ha tomado decisiones m芍s importantes (Alba, Diego Costa#). Habr芍 que ver c車mo obra en marzo, cuando lleguen los siguientes partidos oficiales que se sortean el pr車ximo 2 de diciembre.
Un socio para Ramos
La retirada de Piqu谷 de la Selecci車n ha dejado un boquete en el centro de la defensa. M芍s grande incluso que el que provoc車 Puyol cuando decidi車 colgar las botas. Ramos sigue siendo fijo, pero Luis Enrique no termina de decidirse por un compa?ero fijo para el de Camas. Ah赤, en sus escasos cuatro meses al frente de la nave, ha probado ya a Albiol, Bartra, ??igo Mart赤nez, Nacho, Hermoso y Diego Llorente, al que lleg車 a llamar en la primera concentraci車n pese a estar lesionado para ir meti谷ndole su estilo en vena. Ninguno parece haberle convencido de momento. El resultado es que ha puesto seis defensas distintas en seis partidos, con ocho goles encajados en cuatro de ellos. Espa?a se desangra atr芍s y por ah赤 empiezan los problemas. Un dato lo corrobora: Croacia, con un 33% de posesi車n, consigui車 rematarle hace unos d赤as 15 veces, siendo m芍s imprecisa en el pase que los de Luis Enrique. Tambi谷n lanz車 m芍s saques de esquina. Algo est芍 cambiando.
1-4-3-3 sin bal車n
Luis Enrique, como todo t谷cnico que ha pasado por el Bar?a, es un fundamentalista del juego de ataque. Por eso, aunque a veces lo var赤a por las circunstancias, su dibujo preferido es el 1-4-3-3. Ese sistema, cuando la Selecci車n ten赤a o tiene el bal車n, es ideal para jugar por dentro, para tener extremos abiertos para entrar por fuera y para mantener siempre un hombre como referencia dentro del 芍rea. El problema es que Espa?a ya no domina los partidos y lo que deber赤a ser un equipo feliz con el bal車n se convierte en un verdadero sufrimiento en defensa con medio equipo partido y abierto en canal. Luis Enrique tendr芍 que analizar si el 1-4-3-3 es una fortaleza, una debilidad o utop赤a con los jugadores que cuenta y si ser赤a m芍s prudente reforzarse en medio campo (con dos pivotes) y a partir de ah赤 comenzar a crecer en seguridad, acierto, consistencia y equilibrio. Ya sea en 1-4-2-3-1 o en el cl芍sico 1-4-4-2.
Busquets o Rodrigo
Consultar con el div芍n la forma de jugar tendr赤a consecuencias importantes. Luis Enrique, como ya hizo en el Bar?a, ha querido adaptarse a lo que hay por las urgencias para luego ir introduciendo matices con el paso de los partidos. Por eso ha seguido contando con muchos pilares de la Selecci車n, obviando de d車nde viene este equipo y sin reconocer que muchos de esos futbolistas no atraviesan por su mejor momento. No puede trabajar d赤a a d赤a, si no una vez cada dos meses, y eso dificulta y ralentiza la ejecuci車n de sus planes. Busquets, con este equipo mucho m芍s desprotegido que no sabe defenderse con bal車n, sufre como pocos y ya planea en el ambiente si no es el momento de ir metiendo a su lado, o por 谷l, a Rodrigo 8como ante Bosnia); m芍s inexperto, pero tambi谷n con mejor f赤sico y poder赤o y mayor despliegue. Ahora mismo, prescindir del eje habitual parecer赤a una osad赤a. Pero viendo a Jordi Alba en casa durante cuatro partidos, cualquier cosa podr赤a suceder. Tras los 迆ltimos resultados, algo hay que hacer.
?Una Selecci車n o un club?
?sta es la primera vez que Luis Enrique se hace cargo de una Selecci車n tras dirigir siempre en clubes: Bar?a B, Celta, Roma y Bar?a. Y hay una gran diferencia de matices. Hasta ahora, y pese a que la evaluaci車n, direcci車n y gesti車n de una Selecci車n no tiene nada que ver con la de un club, Luis Enrique parece empe?ado en que haya m芍s similitudes que diferencias en esta mudanza. El problema es que a veces se queda a medio camino. Por un lado presume de no contar con los mejores futbolistas de Espa?a, sino con los que mejor est芍n en cada momento. Y eso parece una verdad a medias. Nacho, Asensio, Isco, ??igo Mart赤nez y Rodrigo siguen tirando del carro, sin tener en cuenta el mal momento que viven con sus respectivos equipos. As赤, Luis Enrique ya ha utilizado a 30 futbolistas diferentes en s車lo seis partidos, lo que le ha llevado (a veces tambi谷n por las lesiones) no 迆nicamente a no repetir once titular para poder consolidar su idea de juego, sino a no contar con una distinguible columna vertebral.
Qui谷n es el delantero
La Federaci車n movi車 en su d赤a Roma con Santiago para nacionalizar a Diego Costa porque parec赤a el 迆nico delantero capaz de intimidar de rojo a los defensas. Ya no est芍, no hay ni debate y parece que no se le espera. Ha habido lesiones de por medio, pero pocos ven la opci車n del hispano-brasile?o como imprescindible. Alc芍cer apareci車 por m谷ritos propios de repente tras dos a?os aciagos y ha desaparecido sin dejar de marcar goles y ser decisivo. Morata no va un d赤a a La Roja y aparece por sorpresa cuando menos te lo esperas. Hay m芍s mediapuntas que delanteros centros; justo ahora que parec赤a olvidada la f車rmula del falso nueve. No hay continuidad y hay demasiada confusi車n en ese puesto. Quitando a Iago Aspas (8 goles en Liga), que parece fijo, los m芍ximos goleadores en Espa?a son Borja Iglesias (7), Roger (6), Munian (4), Morales (4), Ra迆l de Tom芍s (4), Sarabia (4), Williams (4)# Ninguno de ellos est芍 siendo convocado, mientras que son habituales Rodrigo (1) y Asensio (1).