inglaterra 1 - espa?a 0 seleccion
Espa?a muere en accidente
Un gol de Lampard castiga injustamente a Espa?a, que fue superior pero no tuvo suerte ni remate. Buena primera parte, apag車n tras el 1-0 y gol fallado por Cesc en el arre車n final.
Por la misma raz車n que nacen albinos en el ?frica negra, serpientes de dos cabezas y japoneses de m芍s de dos metros, Inglaterra le gan車 a Espa?a en Wembley. Fue una anomal赤a, un capricho del destino dif赤cilmente explicable, aunque Espa?a se empe?ara en cantar una nana en la que acab車 durmi谷ndose, aunque anduviese perdida en la confusi車n del 1-0 durante un rato, aunque Cesc derramase la mejor oportunidad que tendr芍 en a?os. Pero antes de morir en el accidente del que Lampard levant車 acta, y despu谷s tambi谷n, fue infinitamente mejor. A Capello le qued車 un triunfo desvestido de gloria y a Del Bosque, la inquietud de una nueva derrota ante una superpotencia, la cuarta despu谷s del Mundial, aunque con mejores vibraciones que en las anteriores
No dej車 noticias en el marcador la primera mitad, pero la Espa?a campeona someti車 exageradamente a la Inglaterra que viene. Capello se encontr車 con muchos lesionados y algunos episodios de 'S芍lvame' (Terry, Rooney...), tan habituales entre sus futbolistas, que recortaron su margen de maniobra. Una excusa que no explica del todo la escandalosa inferioridad de su selecci車n, sobreprotegida con una defensa de cuatro, tres centrocampistas sin salida y dos extremos, Milner y Walcott, que resultaron m芍s galgos que liebres. A Bent, el aburrido punta ingl谷s, se le hel車 el 芍nimo como al recordman Casillas las manos.
Inglaterra se trag車 el orgullo del pionero en el emotivo minuto de silencio por sus ca赤dos. A partir de ah赤, once amapolas persiguieron sombras. Espa?a manose車 el partido sin agarrarlo de verdad, se recre車 en exceso en la elaboraci車n, emple車 demasiados medios sin empe?arse en el fin. La trashumancia de Iniesta, Villa y Silva no result車 suficiente como maniobra de distracci車n. Demasiados nueves ocasionales y ninguno con verdadera vocaci車n de 芍rea. Esa falta de porter赤a en el horizonte mantuvo el equilibrio en el tanteo, que no en el juego.
Porque Espa?a entendi車 que los partidos en Wembley son para la eternidad, dejen algo en caja o no. Sirven para presumir con el paso de los a?os, para dejar un mensaje de autoridad y de elegancia, para quedar realmente bien ante el mundo. Por eso salieron los mejores y marearon a Inglaterra, que considera este juego como propio, en un recinto sagrado. Silva anda ya, en creaci車n y jerarqu赤a, a la altura de Xavi e Iniesta, sino por encima, y ni siquiera es censurable el conservante del doble pivote que Del Bosque ha a?adido al tiqui-taca, porque Xabi Alonso est芍 de punta en blanco. Le regal車 un gol a Busquets, cuya acrobacia en el remate no result車. Tambi谷n asoma, al fin, un lateral izquierdo, Jordi Alba, que ha visto hueco por el que colarse en esta fiesta. Anduvo atrevido y aplicado, dos virtudes que dan recorrido a un lateral.
Sin embargo, Espa?a tom車 mal una curva y se vio en otro partido. Nada m芍s regresar del descanso, Bent super車 por una vez a los centrales espa?oles, cabece車 al palo un centro desde la izquierda y el bal車n muerto le llovi車 a Lampard sobre la l赤nea. Un gol de esos que los equipos de Capello exprimen hasta la 迆ltima gota. Un gol que devolvi車 la fe, que no la brillantez, a Inglaterra y 'empan車' a Espa?a. De Bosque fue recapitalizando el ataque sin 谷xito. Primero con Mata y Cesc, luego retirando un mediocentro, Busquets, para afilar al equipo con un nueve, Torres, y finalmente provocando con Cazorla el arre車n final.
Con menos juego Espa?a pis車 m芍s 芍rea. Villa estrell車 un remate en el lateral de la red, tras sacarle ventaja a Hart, y otro en el palo. Fueron los preparativos de la carga final, en la que particip車 hasta Piqu谷, con los ingleses sin asomar la cabeza entre las murallas. En los 迆ltimos cinco minutos, Cesc se nubl車 dos veces ante Hart. En la segunda llegando de atr芍s, sin oposici車n, sin obst芍culos que explicaran su remate pifiado. Fue la 迆ltima rareza de un partido con resultado ins車lito.