En octubre de 2020, la tristeza inund¨® el barrio madrile?o de Lavapi¨¦s tras quedarse sin uno de sus bares m¨¢s ic¨®nicos: el Melo¡¯s. Sus due?os, Jos¨¦ Ram¨®n y Encarni, hab¨ªan llegado a la edad de jubilarse y ten¨ªan algunos problemas de salud, por lo que decidieron cerrarlo. A lo largo de sus m¨¢s de 40 a?os, este caf¨¦ bar adquiri¨® una gran fama por sus croquetas y sus ¡®zapatillas¡¯, unos s¨¢ndwiches de 1 kilo de pan gallego rellenos de lac¨®n y queso de tetilla. Una popularidad que ayud¨® a la venta del local.

¡°Aprovechando que era un sitio conocido llam¨¦ a la redacci¨®n de El Pa¨ªs, que sac¨® un art¨ªculo. Pusimos la pancarta y la gente empez¨® a colocar carteles de despedida a los antiguos due?os. Hubo mucho inter¨¦s por el local¡±, revela en La Raz¨®n Carlos Garc¨ªa Calvo, de Inmorest Consultores, la inmobiliaria que gestion¨® el traspaso. Finalmente, dos j¨®venes del barrio, Rafa Riqueni e Ignacio Revuelta, adquirieron este establecimiento de 96 metros cuadrados. Riqueni, que ya emprendi¨® un bar de copas en Malasa?a, viv¨ªa en la misma calle y era cliente habitual del Melo¡¯s. Revuelta, por su parte, vivi¨® a pocos metros, en Argumosa. Su familia era due?a de Casa Revuelta, otro bar cl¨¢sico del centro.

¡°Nos hemos adelantado a grupos de inversi¨®n porque hemos ofrecido dinero por las dos cosas [local y carta]. Hab¨ªa gente que solo estaba interesada en el local, otros solo en el traspaso, y nosotros creemos que si un negocio es rentable lo l¨®gico es que se quede¡±, cuenta Riqueni a El Pa¨ªs. As¨ª, los dos amigos se pusieron a trabajar para reabrir el bar con la misma esencia. Fue el pasado 24 de febrero cuando el Melo¡¯s volvi¨® a recibir clientes y los nuevos propietarios no pueden estar m¨¢s satisfechos con la acogida que ha tenido. ¡°Estamos flipando con la bienvenida que nos hab¨¦is dado. A¨²n no nos lo creemos¡±, escribieron en su cuenta de Instagram.

Misma ubicaci¨®n, misma carta

El bar contin¨²a situado en el n¨²mero 44 de la calle Ave Mar¨ªa y mantendr¨¢ la misma carta, ya que la familia fundadora le ha facilitado todas las recetas. De hecho, en la barra, ya se pueden observar los ocho platos que sirven: morcilla, empanadillas, la famosa zapatilla, pimientos, queso, lac¨®n a la plancha, croquetas y queso con membrillo. Sin embargo, de momento no ponen caf¨¦s. ¡°Cuando abramos todo el d¨ªa, es una posibilidad¡±, comenta Riqueni. Por ahora, su idea es ¡°abrir a partir de mediod¨ªa y quiz¨¢ en alg¨²n momento probemos a dar desayunos¡±.

La ¨²nica receta Jos¨¦ Ram¨®n y Encarni no le han dado es la de las croquetas, cuyo secreto de su cremosa bechamel ten¨ªan que descubrirlo por su cuenta. Tarea del cocinero de 27 a?os Alejandro Mart¨ªnez, que tiene una amplia formaci¨®n. ¡°Toma las decisiones como nosotros y de hecho es el que m¨¢s sabe llevar un sitio con comida y nos est¨¢ orientando¡±, aclara Riqueni. Tras cuatro a?os estudiando en el Basque Culinary Center, la prestigiosa escuela gastron¨®mica promovida por Juan Mar¨ªa Arzak o Mart¨ªn Berasategui, tambi¨¦n ha vivido tambi¨¦n en Nueva York y ha sido jefe de cocina en Murcia.

Por otra parte, aunque la carta no variar¨¢, s¨ª se incorporar¨¢ una novedad: el bacalao. Revuelta quiere as¨ª sacarse la espinita por el traspaso del bar que regentaba su familia: ¡°Queremos hacer el bacalao lo m¨¢s parecido posible, aunque eso es dif¨ªcil. Mi abuela lo hac¨ªa en casa y no le sal¨ªa igual que en el bar, ser¨¢ diferente pero bueno, seguro. He dejado mi trabajo como profesor para dedicarme entero a esto¡±.

Para facilitarles las cosas, Jos¨¦ Ram¨®n llam¨® a todos los proveedores para asegurarse que trataban igual de bien a sus sucesores que a ¨¦l. ¡°Todos son s¨²per majos y est¨¢n contentos de que esto siga. El chico del lac¨®n nos ha dado miles de facilidades, nos lo van a cortar porque en el Melo¡¯s lo hac¨ªan a mano alzada. Queremos optimizar los tiempos y vamos a ser uno m¨¢s en barra para compensar que no somos tan m¨¢quinas como ellos. Es que era un nivel al que nadie puede llegar, son de otra pasta¡±, se?ala Riqueni.