El confinamiento a causa del coronavirus ha provocado que muchos trabajadores se encuentren desarrollando su labor profesional desde su domicilio. Los derechos y deberes de estas personas no var¨ªan por no acudir f¨ªsicamente a una oficina y las empresas mantienen la obligatoriedad de registrar la jornada que desarrolla cada empleado, as¨ª como de respetar el tiempo de descanso de todos ellos.

Las compa?¨ªas adem¨¢s tienen el deber de fijar turnos y son ellas, y no el trabajador, quien debe encargarse de facilitar su registro. Existen varios m¨¦todos para que el individuo que realice su labor a distancia pueda fichar cuando inicie y acabe su desempe?o diario. As¨ª, hay aplicaciones web, apps espec¨ªficas para tel¨¦fonos m¨®viles y programas inform¨¢ticos para ordenadores que permiten dejar constancia de la jornada laboral de manera remota.

Estos sistemas salvaguardan el derecho del teletrabajador a la desconexi¨®n digital y a no prolongar su jornada m¨¢s all¨¢ de lo estipulado y permiten a las empresas mantener un control sobre el cumplimiento de las obligaciones profesionales de sus empleados.

Pr¨®rroga de dos meses m¨¢s

El Gobierno de Espa?a anunci¨® el pasado 21 de abril la pr¨®rroga durante dos meses del car¨¢cter preferente del teletrabajo. Se trata de una medida que ya fue impulsada por el Ejecutivo en el Real Decreto-ley de 17 de marzo de medidas urgentes extraordinarias para combatir las consecuencias sociales y econ¨®micas provocadas por el coronavirus.

La vicepresidenta de Asuntos Econ¨®micos y Transformaci¨®n Digital, Nadia Calvi?o, se refiri¨® a esta f¨®rmula laboral como un ¡°mecanismo tremendamente eficaz¡± para mantener la continuidad econ¨®mica del pa¨ªs. La prioridad de su mantenimiento, que permite evitar la cesaci¨®n temporal o la reducci¨®n de la actividad de muchas empresas, seguir¨¢ vigente, por tanto, hasta el pr¨®ximo mes de julio.