Peligro, bulos
Las noticias falsas se propagan por las redes tan r¨¢pido como el COVID-19. Gobierno, tecnol¨®gicas y asociaciones combaten la desinformaci¨®n.
Atento cuando lea esto. "Las empresas del sector de la hosteler¨ªa podr¨¢n reabrir y reanudar su actividad a partir del 1 de junio". Pero no se apresure a reservar mesa en su restaurante favorito. Es uno de los bulos que corren por las redes sociales. El texto pertenece a una supuesta p¨¢gina del BOE (falsa, por supuesto) con fecha de hoy en la que supuestamente se anuncia el calendario de fin de restricciones por un decreto del Ministerio de la Presidencia. Se trata de un bulo difundido por WhatsApp. Una m¨¢s de la ingente cantidad de noticias falsas que circulan por las redes sociales y que se propagan a una velocidad superior a la del coronavirus.
La comentada al principio no ha sido la ¨²nica falsificaci¨®n que se ha hecho del Bolet¨ªn Oficial del Estado en los ¨²ltimos d¨ªas. Otra p¨¢gina manipulada 'informaba' de que el Gobierno conced¨ªa la autorizaci¨®n para salir a correr. Un v¨ªdeo localizaba en distintos hospitales espa?oles (seg¨²n la versi¨®n) una sala con varias bolsas de cad¨¢veres hacinados, cuando en realidad correspond¨ªa a Ecuador.
Hay bulos para todos los gustos: teor¨ªas conspirativas sobre el origen de la enfermedad, curas milagrosas con todo tipo de sustancias, mentiras sobre detalles de las medidas de confinamiento... "Una de las falsas creencias que m¨¢s se ha difundido asegura que espa?oles e italianos hemos respondido peor al virus porque tenemos la misma gen¨¦tica. Nuestras semejanzas son m¨¢s culturales que gen¨¦ticas", se?ala el doctor Alfredo Corell, vocal de la Sociedad Espa?ola de Inmunolog¨ªa (SEI), a Europa Press.
Su asociaci¨®n ha firmado un acuerdo con el instituto #SaludsinBulos para combatir los bulos que se difunden por Internet. Entre las iniciativas, tambi¨¦n han elaborado un listado de divulgadores sanitarios que informan en Twitter de manera veraz sobre el COVID-19 y han promulgado un dec¨¢logo de principios de principios ¨¦ticos en la informaci¨®n de salud sobre el coronavirus. "La facilidad para crear cuentas en redes sociales y las lagunas legislativas propician este tipo de delitos inform¨¢ticos, por lo que los usuarios deben estar alerta cuando naveguen por la red", explican en la web de #SaludsinBulos.
"El bulo, en t¨¦rminos generales, no es un delito", explica a Efe la fiscal de Sala coordinadora en materia de criminalidad inform¨¢tica, Elvira Tejada. La jurista se?ala que para poder encajar un bulo en el C¨®digo Penal hay que analizar si puede derivar en un delito de odio, una injuria o una calumnia.
Para frenar la difusi¨®n de mensajes, Facebook, propietaria de la popular aplicaci¨®n de mensajer¨ªa, ha introducido en WhatsApp un l¨ªmite en el reenv¨ªo de mensajes. Los usuarios s¨®lo podr¨¢n compartir a un contacto o grupo cada vez (en lugar de hacer un reenv¨ªo m¨²ltiple) aquellos mensajes "altamente reenviados". YouTube ha limitado la monetizaci¨®n de v¨ªdeos con contenidos sobre el COVID-19 y ha retirado v¨ªdeos con "informaci¨®n m¨¦dica err¨®nea". Y Twitter ha eliminado m¨¢s de un millar de mensajes con contenido enga?oso y potencialmente da?ino.
"La incertidumbre se combate con confianza e informaci¨®n adecuada. La maldad en las redes se combate con una ciudadan¨ªa capaz de contrarrestar esa informaci¨®n", dec¨ªa el ministro de Universidades, Manuel Castells. Los bulos altamente sofisticados pueden inducir a los ciudadanos al error al otorgarles oficialidad y "generar situaciones de alarma social o contra el orden p¨²blico", advert¨ªa esta pasada semana el director log¨ªstico y comisario principal de la Polic¨ªa Nacional, Jos¨¦ Garc¨ªa Molina, uno de los habituales participantes en las ruedas de prensa diarias del comit¨¦ t¨¦cnico. El Gobierno ha incluido un apartado sobre bulos en el chat operado por inteligencia artificial que ha habilitado por WhatsApp (+34600802802) para atender consultas de los ciudadanos.