Nueva York, el nuevo campo de batalla contra el coronavirus
El estado hom¨®nimo en el que se ubica la Gran Manzana acumula cerca de la mitad de los m¨¢s de 60.000 contagios de Estados Unidos. Los hospitales, desbordados.
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Nueva York ha entrado en barrena a causa del coronavirus. La urbe estadounidense por antonomasia, la Capital del Mundo, amaneci¨® este jueves con m¨¢s de 20.000 casos de coronavirus y su sistema sanitario desbordado. En el estado hom¨®nimo los contagios ascend¨ªan en el ¨²ltimo dato del mi¨¦rcoles a 30.811, cerca de la mitad del total del pa¨ªs, con un incremento de 5.146 de un d¨ªa a otro y 285 muertos de los 804 registrados en la superpotencia mundial.?Solo en el hospital de Queens, 13 personas han muerto en las ¨²ltimas 24 horas tras contraer el pat¨®geno.?
Mientras el alcalde, Bill de Blasio, y el gobernador, Andrew Cuomo, lanzan sendos SOS al Gobierno federal ante la escasez de medios para combatir el brote, en sus calles y centros hospitalarios se palpa el drama. "La propagaci¨®n va a un ritmo de tren bala", ha asegurado Cuomo, cifr¨¢ndola en una duplicaci¨®n de los casos "cada tres d¨ªas". El miedo al contagio ha llevado a la sede de la bolsa, en Wall Street, a cerrar temporalmente por primera vez en 228 a?os y la mayor¨ªa de los caracter¨ªsticos taxis amarillos han dejado de prestar servicio.?
El ej¨¦rcito ya est¨¢ presente en las calles para montar hospitales de campa?a y hay un plan para reconvertir hasta 10.000 plazas hoteleras en camas hospitalarias. Pero el porcentaje que se dedicar¨¢ a este estado del hist¨®rico rescate de dos billones de d¨®lares que ha anunciado el Gobierno de Donald Trump para hacer frente a la crisis, un 1,9% (3.800 millones para la zona, de los que 1.300 ser¨ªan para la Gran Manzana), parece insuficiente. As¨ª lo ha manifestado Dani Leve, el responsable de comunicaci¨®n del gabinete de Cuomo, que atribuye esa decisi¨®n al hecho de que tanto la ciudad como la regi¨®n est¨¦n gobernados por dem¨®cratas y no por republicanos del partido de Trump.?

Sea como sea, el panorama en algunos hospitales ya es dantesco. Lo describen de forma desgarradora en el New York Times la doctora Sylvie De Souza, que presta servicio en el Brooklyn Hospital Center, y Garry G. Terrinoni, su presidente y director ejecutivo. El centro ("en el que Walt Whitman confortaba con poemas a los heridos durante la Guerra Civil y en el que naci¨® el asesor de la Casa Blanca y m¨¦dico m¨¢s famoso del pa¨ªs en estos momentos, Anthony Fauci" recuerda la autora del reportaje, Sheri Fink) est¨¢ pensado para acoger a un m¨¢ximo de 464 pacientes, pero actualmente tiene recursos para atender a entre 250 y 300 y seguramente necesite doblar esa capacidad en los pr¨®ximos d¨ªas.
"Estamos en modo desastre", asegura Terrinoni. El cuadro se completa con desabastecimiento y trabas burocr¨¢ticas, como con un env¨ªo de pruebas de detecci¨®n que no se pudo utilizar porque las autoridades federales pretend¨ªan dar los resultados directamente al paciente y no al hospital. "?C¨®mo va a ponerse una persona entubada al tel¨¦fono para recibir los resultados?", se preguntaba De Souza.?
"El miedo se siente en varias formas"
En Nueva York y su ¨¢rea metropolitana viven m¨¢s de 22 millones de personas y actualmente hay 53.000 camas hospitalarias disponibles. 40.000 voluntarios entre el personal m¨¦dico retirado o con experiencia previa han respondido a la llamada de las autoridades y est¨¢n comprometidos 15.000 sistemas de respiraci¨®n asistida de los 30.000 que el gobernador estima que har¨¢n falta, seg¨²n datos del corresponsal de La Vanguardia en la ciudad, Francesc Peir¨®n.
As¨ª las cosas, los profesionales del hospital de Brooklyn se encomiendan a ellos mismos y a De Souza solo le queda plantear lo que parece casi una plegaria. "Todo lo que podemos hacer es rezar, mantenernos unidos, animarnos los unos a los otros y no quedarnos paralizados por el miedo". Un miedo que, asegura "se siente en varias formas".