Espa?a fue una aut¨¦ntica pi?a que se form¨® en Sierra Nevada

Risas, cava, bromas, y muchos en la piscina a pesar de estar entre monta?as y ser medianoche. As¨ª fue la fiesta que todos los miembros de la Selecci¨®n, desde los corredores al cuerpo t¨¦cnico y asistentes, protagonizaron ayer en el hotel del Tirol austriaco y que puso fin a un Mundial donde no todo fue de cara para los espa?oles. Tras acabar la Vuelta, donde estuvieron presentes siete de los ocho corredores, la idea de concentrarse antes en Sierra Nevada no fue bien acogida. La idea de Javier M¨ªnguez, seleccionador experimentado, era que aquello se convirtiera en un retiro para entrenar... y descansar. ¡°Algunos llegaron cruzados, otros directamente muertos, pero a los varios d¨ªas se les cambi¨® la cara por completo¡±.

Aquella concentraci¨®n tambi¨¦n sirvi¨® para que los integrantes del equipo, tras ser rivales en la ronda espa?ola, se empezaran a ver como compa?eros. ¡°Ha habido muy buen ambiente, con bromas y nos lo hemos pasado genial¡±, coincid¨ªan ciclistas como Enric Mas.

Sin embargo, esa idea se torci¨® el jueves 27 por culpa del retraso en un avi¨®n, concretamente el que les llevaba desde Granada a Madrid, donde tuvieron que quedarse a dormir y posponer un d¨ªa su llegada a Innsbruck. No s¨®lo eso, sino que al d¨ªa siguiente se tuvieron que levantar antes de las 7:00, viajar en avi¨®n a M¨²nich, y de ah¨ª coger un autob¨²s hasta Austria, donde entrenar¨ªan sin pasar por el hotel. Fueron directamente a reconocer la ascensi¨®n a Gramartboden, donde ayer se decidi¨® la carrera. Curiosamente, en aquel entrenamiento se cruzaron con varios campeones del mundo como Musseuw, Freire o Cipollini, quienes compartieron con ellos algunos kil¨®metros.

Un buen augurio para una Selecci¨®n donde todos se volcaron para lograr el objetivo: que Valverde al fin fuese campe¨®n del mundo.