L.A. Lakers 1972, OKC Thunder 2024
En una regular season hist¨®rica, los Thunder han pulverizado uno de los r¨¦cords m¨¢s longevos de la NBA. Uno que pertenec¨ªa a los Lakers de West, Chamberlain...


Ahora empieza el verdadero reto para Oklahoma City Thunder, desde luego. La pasada temporada, 2023-24, fue el mejor equipo del Oeste (57-25) pero no pas¨® de segunda ronda en playoffs, fulminado por Luka Doncic y sus Mavericks despu¨¦s de una serie inicial que fue poco m¨¢s que un aperitivo contra unos Pelicans que estaban, c¨®mo no, minimizado por las lesiones. Ahora han dado un paso m¨¢s, y en la temporada 2024-25 han sido el mejor equipo en total, con un aplastante 68-14 que ha dejado lo suficientemente atr¨¢s a otros dos equipos, pocas bromas, con m¨¢s de sesenta victorias, Cleveland Cavaliers (64-18) y Boston Celtics (61-21).
Han sido casi seis meses de pura dominaci¨®n, una de las mejores regular season de toda la historia de la NBA. Y ni siquiera se puede argumentar, para aguarles la fiesta, que los de OKC han tenido uno de esos a?os en los que parecen tocados por una varita m¨¢gica en lo f¨ªsico: Shai Gilgeous-Alexander, que va a ganar su primer MVP, ha jugado 76 partidos, pero Jalen Williams se ha perdido 13 (acab¨® con 69), Chet Holmgren 50 (32), Isaiah Hartenstein 25 (57), Alex Caruso 28 (54)¡
Despu¨¦s de esa temporada pasada fabulosa, en la que dieron el salto definitivo en la reconstrucci¨®n post Russell Westbrook y se establecieron como uno de los mejores equipos de la NBA, los Thunder han cogido todav¨ªa m¨¢s impulso y han subido en once su n¨²mero de victorias. Se han convertido, al hacerlo, en el primer equipo de la historia que mejora su balance en diez o m¨¢s triunfo durante tres temporadas seguidas; De los p¨ªrricos 24 de la 2021-22 a los 40 de la 2022-23, los 57 de la 2023-24 y, ahora, los 68 de la 2024-25.
No es un dato que haya que tomarse a la ligera: los Thunder son la quinta franquicia que llega a esas 68 victorias, que es la cuarta mejor marca de toda la historia. Por delante, los Warriors de 2016 (73-9), dos versiones de los Bulls de Michael Jordan (72-10 en la temporada 1995-96 y 69-13 en la siguiente, 1996-97), los Lakers de 1972 (69-13) y los Sixers de 1967, que acabaron con 68 pero jugaron un partido menos (68-13), as¨ª que su porcentaje de triunfos (84%) es un poco m¨¢s alto que de estos Thunder (82,9) y el de los Celtics de 1973, que tambi¨¦n terminaron en 68-14. De esos seis equipos que hab¨ªan llegado antes a un m¨ªnimo de 68 triunfos, cuatro fueron campeones. No lo lograron esos Celtics de los setenta (perdieron en la final del Este) y, claro, los Warriors 2015-16, el equipo de los r¨¦cords que no pudo defender, ya en las Finales, una ventaja de 3-1 contra los Cavaliers de LeBron James y Kyrie Irving.
Los hitos no acaban ah¨ª. Los Thunder 2024-25 han tumbado otras marcas hist¨®ricas, verdaderamente importantes. Han terminado, por ejemplo, con la mejor diferencia de puntos de la historia: +12,87 de media y 1.055 en el total de los 82 partidos. Un r¨¦cord que pertenec¨ªa a los m¨ªticos Lakers de la temporada 1971-72, los que rompieron una maldici¨®n y ganaron el primer t¨ªtulo en Los ?ngeles para la franquicia, doce a?os despu¨¦s del traslado desde Minneapolis. Los cinco equipos que estaban, hasta ahora, primeros en ese ranking de diferencia de puntos acabaron siendo campeones, todos: esos Lakers de 1972 (+12,28 y 1.007 total), los Bucks de 1971 (12,26 y 1.005), los Bulls de 1996 (+12,24 y 1.004), los Warriors de 2017 (el primer a?o de Kevin Durant: +11,63) y los Celtics de la pasada temporada (+11,34).
Adem¨¢s, los Thunder han terminado con el segundo mejor net rating de siempre (+12,7) solo por detr¨¢s de una constante en estas listas, los Bulls de 1996 (+13,4). Esta temporada, Celtics (9,4) y Cavaliers (9,1) han llegado a la meta a una distancia respetable, porque el cuarto est¨¢ ya lej¨ªsimos (+5, Minnesota Timberwolves) de los de Oklahoma City, que tambi¨¦n le han quitado a los Lakers de 1972 (apilaron 51) el r¨¦cord de m¨¢s victorias por al menos diez puntos: han sido finalmente 54. Es decir, si se a¨ªslan solo esos triunfos en dobles d¨ªgitos, los Thunder habr¨ªan sumado m¨¢s que el n¨²mero total de 27 de las 30 franquicias.
Por primera vez, un equipo ha firmado un 29-1 contra la Conferencia contraria. La mejor marca hasta ahora estaba en 27-3, conseguido por los Warriors de 2006, los Mavericks de 2007 y los Lakers de 2000. Los Thunder, como los tres que ten¨ªan el r¨¦cord hasta ahora, son equipos del Oeste, casi siempre m¨¢s fuerte que el Este desde que Michael Jordan dej¨® Chicago en 1998. Adem¨¢s, los Thunder han conseguido tambi¨¦n la mayor diferencia de la historia con respecto al segundo de Conferencia, un descomunal +16 (68 victorias por 52 de Houston Rockets). La suya ha sido la mejor defensa por rating (106,6) y el tercer mejor ataque (119,2). Uno de los cuatro equipos que est¨¢ en el top 10 en ambos apartados. Los otros, Cavaliers (primero en ataque, octavo en defensa), Celtics (segundo y cuarto) y Wolves (octavo y sexto). Y Shai Gilgeous-Alexander, a d¨ªas de ser nombrado MVP, ha promediado 32,7 puntos, el m¨¢ximo en un equipo de al menos 68 triunfos.
Los Thunder 2024-25 han arrebatado dos r¨¦cords, el hist¨®rico de la diferencia de puntos y el m¨¢s underground de las victorias en dobles d¨ªgitos, a los inolvidables Lakers 1971-72, el equipo que firm¨® en su tiempo la mejor temporada de siempre (69-13) y al que, 53 a?os despu¨¦s, todav¨ªa le queda una marca trascendental, muy importante y que sigue pareciendo inalcanzable: 33 victorias consecutivas. Por detr¨¢s, 28 a caballo entre dos temporadas (Warriors 2014-16) y 27 en la misma (Miami Heat 2013). Un equipo muy poco conocido entre los aficionados m¨¢s j¨®venes de los Lakers pero uno de leyenda, con uno de los picos m¨¢s altos que ha visto la NBA y, tambi¨¦n, una historia fascinante.
West, Chamberlain y la ¡®chispa celtic¡¯
Los Lakers son el Showtime, Hollywood y anillos ba?ados en grandes estrellas, batallas de leyenda con los Celtics (a lo largo de las ¨¦pocas), pases sin mirar de Magic Johnson, ganchos de Kareem Abdul-Jabbar y alley-oops de Kobe Bryant a Shaquille O¡¯Neal. Para muchos, una tradici¨®n forjada en los a?os ochenta, con el Doctor Jerry Buss como propietario y una visi¨®n que se materializ¨® en el viejo Forum: forjar celebrities en la pista a base de acumularlas en las gradas, capitalizar la vida social de L.A., jugar al baloncesto mejor de lo que nadie hab¨ªa jugado nunca. Abrir bocas de par en par: el Showtime. Desde el traslado de Mine¨¢polis, en 1960 y ya con seis a?os (de ah¨ª el nombre: en el Sur de Cafifornia no hay lagos) hasta la llegada de Magic para unirse con Jabbar y, despu¨¦s, la de Kobe para unirse a Shaq.
De carrerilla, los mejores equipos de los Lakers son los de los 80: Magic y Kareem, primero con Norm Nixon y Jamaal Wilkes, despu¨¦s con Byron Scott, James Worthy o AC Green. O el de hace dos d¨¦cadas, con Kobe, O¡¯Neal, Fisher, Horry... el de un threepeat expresado por la dominaci¨®n absoluta de los playoffs 2001, 15-1 con un net rating de +13,6, lo nunca visto hasta el 16-1 con un +16 de los Warriors 2017. Pero hay otro equipo, uno que no se suele recordar porque se nos hace lejano, porque no lo vimos y porque gan¨® despu¨¦s de perder mucho. Pero uno que fue esencial en la historia de la franquicia y que, de hecho, firm¨® la que sigue siendo una de las mejores temporadas de la historia de la NBA: los campeones de 1972.
Nadie ha perdido m¨¢s Finales que Jerry West en la NBA: ocho de nueve jugadas. El ¨²nico con siete en Elgin Baylor, que adem¨¢s no gan¨® ninguna. No hay nada igual porque despu¨¦s asoman ya las seis derrotas de LeBron James. West, el logo de la NBA, es uno de los mejores escoltas de siempre. Baylor, el precursor del juego a¨¦reo de Julius Erving (primero) y Michael Jordan (despu¨¦s y para siempre), se consider¨® el mejor alero que hab¨ªa pisado una pista de baloncesto hasta que llegaron el Dr J y Larry Bird. Seguramente, los dos pasan m¨¢s desapercibidos en los rankings hist¨®ricos por esa avalancha de derrotas, casi todas contra los Celtics de Bill Russell. Por eso Jerry West es el ¨²nico jugador con el MVP de unas Finales perdidas por su equipo (1969). Y por eso acab¨® odiando el verde, que le recordaba a sus derrotas en tantas luchas por el anillo. Algunas inexplicables: siete hasta 1970, seis de ellas contra esos odiosos Celtics (en ocho a?os) y la ¨²ltima ante los Knicks. Esa pareci¨® dejar herido de muerte a un equipo que ten¨ªa a West, a Baylor... y desde 1968 a Wilt Chamberlain, una de las armas de destrucci¨®n masiva m¨¢s inmensas que han pisado las canchas de baloncesto. Si cuando ya no estaban los Celtics tampoco hab¨ªan ganado, nunca iban a hacerlo. A esa conclusi¨®n, que de hecho parec¨ªa l¨®gica, llegaron muchos.
En el verano de 1971, West ten¨ªa 33 a?os, Chamberlain 35 y Baylor 37. Los tres hab¨ªan tenido lesiones serias en las dos temporadas anteriores. Y ni Butch van Breda Kolff ni Joe Mullaney hab¨ªan conseguido que ese big three, explosivo, se expresara de verdad de forma colectiva, jugar¨¢ unido cuando ven¨ªan mal dadas. Una ¨¦poca se iba consumida por los a?os y las derrotas y sin ning¨²n anillo, todav¨ªa y por incre¨ªble que pareciera, en L.A. Pero lleg¨® Bill Sharman, el entrenador que lo cambi¨® todo, el que abri¨® las puertas a lo que vendr¨ªa una d¨¦cada despu¨¦s y el que crey¨® que a ese equipo le quedaba al menos un ¨²ltimo asalto en las piernas. Ser¨ªa, o no ser¨ªa en absoluto, con una preparaci¨®n f¨ªsica impecable y un ritmo de juego fren¨¦tico que desmadejara a los rivales. Defensa y transiciones r¨¢pidas, una evoluci¨®n de la reci¨¦n clausurada dinast¨ªa de los Celtics de Red Auerbach: Wilt Chamberlain reconvertido en especialista defensivo, intimidador, reboteador y generador de contras disparadas por un Jerry West reubicado definitivamente como base y que recib¨ªa los pases del gigante, ya cuesta abajo, como antes Bob Cousy hab¨ªa recibido los de Bill Russell.
Sharman, no por casualidad, hab¨ªa sido cuatro veces campe¨®n con los Celtics. Y, tampoco por casualidad, fich¨® como asistente a KC Jones, otra leyenda celtic que gan¨® ocho anillos seguidos como jugador (1959-66) y dos como head coach (1984, 1986), ya al frente del equipo comandado por Larry Bird y en segundo (86) tras sellar otra de las mejores temporadas de siempre en la historia de la NBA. As¨ª que esa es la gran paradoja olvidada: la primera piedra de la dorada historia de los Lakers en L.A. la puso la llegada (Sharman, Jones) de algo m¨¢s que una pizca de la ¨¦tica de trabajo y el estilo de juego de los Celtics que hab¨ªan sido, y desde luego seguir¨ªan siendo y son, odiada n¨¦mesis.
Aquellos Lakers, que parec¨ªan amortizados en verano, consiguieron que sus tremendas armas de ataque (West y Gail Goodrich formaron un backcourt espectacular) compartieran la bola y el protagonismo, que Chamberlain aceptara feliz ejercer de ancla y que los demonios se quedaran por una vez encerrados en el armario. No todos: con las rodillas hechas polvo e incapaz ya de seguir el ritmo de Sharman, Baylor se retir¨® el 4 de noviembre de 1971, despu¨¦s de jugar solo nueve partidos. Por eso, y aunque los Lakers le dieron despu¨¦s un anillo, no figura como campe¨®n en los libros de historia. Parad¨®jicamente, un d¨ªa despu¨¦s (5 de noviembre) empez¨® (acab¨® el 9 de enero de 1972) la mejor racha de victorias que ha visto la NBA: 33 seguidas. Lo m¨¢s parecido son las 28 de unos Warriors que, adem¨¢s, lo hicieron a caballo entre dos temporadas (2014-15 y 15-16, la del 73-9). Las rachas de ambos, Lakers y Warriors, acabaron en Milwuakee. Esos Lakers 1971-72 ganaron 69 partidos (69-13). Por entonces tambi¨¦n la mejor Regular Season de siempre. Un hito que despu¨¦s superaron los Bulls del 72-10 y, otra vez, esos Warriors del 73-9. Nadie m¨¢s ha llegado a tantos triunfos (los Bulls ganaron tambi¨¦n 69 en 1997). Un equipo, por lo tanto, de leyenda, en el que Sharman fue Entrenador del A?o y West, Chamberlain y Goodrich all stars. El primero entr¨® en el Mejor Quinteto y, junto a Chamberlain, en el Mejor Quinteto Defensivo.
Chamberlain promedi¨® solo 14,8 puntos pero 19,2 rebotes y 4 asistencias. West se fue a 25,8 puntos y 9,7 asistencias. Goodrich, extraordinario, a 25,9 y 4,5. El hueco de Baylor lo ocup¨® un Jim McMillan que roz¨® el nivel all star (18,8 puntos y 6,5 rebotes como pegamento del equipo: defensa, velocidad, juego al poste, tiro...). Happy Hairston era un ala-p¨ªvot feroz (13 puntos y 13 rebotes de media, el ¨²nico jugador que cogi¨® 1.000 rebotes en una temporada al lado de Chamberlain) y uno de los obreros del banquillo era... Pat Riley, que se empapaba del estilo Sharman para empezar a pensar en el baloncesto total del Showtime, con el que gan¨® cuatro anillos como entrenador en los a?os 80.
Por entonces tambi¨¦n fueron un r¨¦cord (despu¨¦s superado) las 81 victorias que lograron esos Lakers entre regular season y unos playoffs en los que les sonri¨® todo lo que otras veces les hab¨ªa salido mal, todo lo que parec¨ªa haber sepultado aquel proyecto definitivamente con la eliminaci¨®n de 1971 (sin el lesionado Jerry West) ante los Bucks de Kareem Abdul-Jabbar y Oscar Robertson, a la postre campeones. En playoffs, los Lakers superaron a Chicago Bulls (4-0) y a sus dos verdugos de los dos a?os anteriores, Milwaukee Bucks (4-2) y New York Knicks (4-1). Los dos campeones anteriores. Contra los primeros remontaron la paliza encajada en el primer partido (72-93) gracias en parte a la lesi¨®n de Oscar Robertson, mermado y fuera de juego en la segunda parte del sexto partido. En las Finales, los Knicks no ten¨ªan a Willis Reed (Jerry Lucas, un 2,03, tuvo que marcar a Chamberlain) y se quedaron sin Dave DeBusschere. Con todo de cara, los Lakers se sobrepusieron con cuatro triunfos seguidos a otro desastre inicial (92-114) en el Forum.
Wilt Chamberlain fue MVP de las Finales con sus 24 puntos y 29 rebotes del quinto partido. Su segundo anillo lleg¨® tarde y despu¨¦s de entender qu¨¦ era lo que le hab¨ªa faltado en lo colectivo durante sus a?os de guerras perdidas con Bill Russell despu¨¦s de ganar tantas batallas. Esos Lakers, con algo m¨¢s que una pizca celtic, cambiaron la historia de la franquicia y la del baloncesto en L.A. (y la de Jerry West, el logo) y jugaron, cuando les asaltaban los achaques y muchos desconfiaban de ellos, una de las mejores temporadas que cualquier equipo haya firmado en la historia de la liga: 69 victorias, 33 seguidas y el primer t¨ªtulo desde la mudanza. Despu¨¦s llegaron Kareem; y Magic y Worthy y Shaquille y Kobe y todo lo dem¨¢s. Llegaron el Showtime y la gloria pero los Lakers, gracias a aquel equipo de la temporada 1971-72, ya estaba definitivamente all¨ª.
?Tus opiniones importan! Comenta en los art¨ªculos y suscr¨ªbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ?Buscas licenciar contenido? Haz clic aqu¨ª
Rellene su nombre y apellidos para comentar
Tu opini¨®n se publicar¨¢ con nombres y apellidos