Marcus Smart, a lo Gary Payton: Mejor Defensor de la NBA

1996. Fue el ¨²ltimo a?o en el que un base o un escolta ganaron el premio a Mejor Defensor de la NBA. Desde entonces, una ristra incontenible de jugadores interiores, ya sean p¨ªvots, ala-p¨ªvots o aleros se han hecho con el trofeo sin excepci¨®n. Dikembe Mutombo (4 premios), Alonzo Mourning (2) o Ben Wallace inauguraban esa tradici¨®n de premiar a grandes intimidadores, fant¨¢sticos protectores de la zona en una ¨¦poca en la que se jugaba un baloncesto muy distinto al de ahora (bal¨®n dentro-fuera) y en el que los centers no sal¨ªan de la zona para lanzar, en general, desde posiciones exteriores. Dwight Howard se lleg¨® a hacer con tres entorchados antes de una d¨¦cada, la segunda del siglo XXI, en la que algunos aleros se hicieron con ¨¦l. Y ahora, m¨¢s de un cuarto de siglo despu¨¦s, un bajito se hace con el galard¨®n.

En los ¨²ltimos 12 a?os hemos visto a Kawhi Leonard (2 veces) o Giannis Antetokounmpo hacerse con el trofeo, pero se segu¨ªa ignorando a los bases y escoltas. Grandes especialistas o jugadores absolutamente generacionales se han quedado sin el mismo: Tony Allen nunca lo gan¨®, como s¨ª lo hizo un experto como Ron Artest, otro alero. Y Kobe Bryant, un defensor exterior hist¨®ricamente bueno, tampoco se hizo con el trofeo, igual que le pas¨® aTim Duncan, tambi¨¦n interior. M¨¢s recientemente, Klay Thompson no ha sido tenido en cuenta. Y hay que remontarse a inicios del trofeo para ver a Sydney Moncrief, estupendo base de los Bucks (lo gan¨® en dos ocasiones) para ver a un base ganarlo. Entre los escoltas destaca, claro, Michael Jordan, que junt¨® el premio con el MVP en 1988, algo que posteriormente lograron Hakeem Olajuwon (1994) y el ya mencionado Giannis (2020). David Robinson y Kevin Garnett, en a?os distintos, tambi¨¦n han ganado ambos trofeos.

Para los Celtics es el segundo premio a Mejor Defensor de la historia tras el conquistado por Kevin Garnett en 2008, un a?o en el que, por cierto, ganaron su ¨²ltimo anillo de campe¨®n. Una recompensa tambi¨¦n a la que ha sido la mejor defensa de toda la NBA, una tela de ara?a llena de cuerpos f¨ªsicos y voluminosos que ahogaba a sus rivales. Smart, un defensor experimentado que llevaba varios a?os demostrando un gran nivel en ese lado de la pista, ha sido el l¨ªder junto a Robert Williams (otro que ha sonado para el premio) de ese esfuerzo defensivo que ha llevado al equipo de Ime Udoka a ser el mejor de 2022 y de mejorar hasta el 51-31 un r¨¦cord que se tambaleaba el pasado 7 de enero, cuando las cosas iban de mal en peor en Boston. Un gran logro, por lo tanto, para un equipo que va ganando a los Nets en primera ronda de playoffs (1-0) tras una canasta de Jayson Tatum sobre la bocina tras un gran pase de, vaya, Marcus Smart.

El base de los Celtics, que adem¨¢s de su eterna presencia defensiva ha mejorado en producci¨®n y paciencia en ataque, ha promediado 12,1 puntos, 3,8 rebotes y 5,9 asistencias por partido. Adem¨¢s, ha sido s¨¦ptimo de la NBA en robos (1,7), cuarto en balones recuperados, s¨¦ptimo en deflections y d¨¦cimo en faltas en ataque provocadas. M¨¢s all¨¢ de los n¨²meros, insistimos, Smart ha sido el alma de los Celtics, el puntal de su defensa y la base sobre la que se sostiene el sistema de Ime Udoka. Y gana un merecido premio que ha recibido, al final del entreno de los Celtics, de manos de, claro. Gary Payton. Esa estrella que marc¨® una ¨¦poca en los Sonics, disput¨® las Finales con unos Lakers en destrucci¨®n (los de la 2003-04) y gan¨® el anillo con los Heat en 2006. El base premia al base. Payton pasa el testigo a Smar. No pod¨ªa ser de otra manera.