Los Lakers se hartan de LeBron

Por algo dec¨ªamos que los Lakers todav¨ªa no hab¨ªan tocado fondo. Y ahora se ha visto m¨¢s claro, aunque ser¨ªa atrevido pensar que esto es lo peor que vamos a ver de aqu¨ª a final de temporada. Sin sentido ni direcci¨®n, el equipo de la verg¨¹enza no tiene ni sentido del honor. Deambulan por la pista dejando pasar los minutos, deseando que se acabe el partido para hacer cosas que, en estos momentos, consideran m¨¢s importantes, pasan la tarjeta por la entrada para fichar como qui¨¦n va al trabajo solo por cumplir y se deja llevar hasta que suena la bocina que indica el final del partido. Ni pueden, ni quieren, ni nada. El equipo de veteranos sabios nunca fue tal y r¨¢pidamente se transform¨® en uno de gente mayor, vanidosa sin motivo, que ahora no habla ni de su pasado, algo que s¨ª hac¨ªa antes para evitar la conversaci¨®n sobre el bochorno del presente.

Los Lakers perdieron de 28 puntos ante los Pelicans, ese equipo que no val¨ªa para nada el curso pasado ni a inicios de este pero que est¨¢ a 2,5 victorias de los angelinos, novenos pero con posibilidades reales, ahora s¨ª, de quedarse tambi¨¦n sin play-in. Algo que ser¨ªa casi una bendici¨®n, ya que nadie se cree que este equipo pueda ganar a nadie en los playoffs, o ni siquiera recuperar esa previa inventada por la NBA en el coronavirus y que nadie quiere jugar. Ahora tampoco los angelinos, en una sensaci¨®n que no est¨¢ motivada por el cansancio acumulado de cara a la fase final, y s¨ª por no alargar una tortura eterna, una crisis monumental que pondr¨¢ patas arriba a la entidad este verano y ya ni hablamos de 2023, a?o en el que LeBron James ser¨¢ agente libre.

El Rey ha vuelto a ser uno de los protagonistas de la noche, pero esta vez por nada que tenga que ver con el rendimiento deportivo. El alero, en un mal pase realizado en el tercer periodo, fue abucheado por la afici¨®n de los Lakers, que ya se ha hartado de su figura, sus controversias y, sobre todo, las palabras que dirigi¨® a la franquicia en el All Star, con las que pon¨ªa en duda a Jeannie Buss, Rob Pelinka (sin mencionarles directamente, claro) y dejaba abierto su futuro. Demasiado ya para una afici¨®n, la angelina, que entiende el baloncesto desde su parafernalia habitual y que est¨¢ cansada de un jugador absolutamente generacional que, sin embargo, tambi¨¦n fue el que pidi¨® a Russell Westbrook y ahora reniega de ¨¦l. LeBron, que dio la espalda de mala manera a su equipo en el Fin de Semana de las Estrellas, sufre ahora las consecuencias de sus actos en una temporada in¨¦dita para ¨¦l (por mala), en la que est¨¢ mostrando un genial nivel individual pero no ha conseguido hace funcionar la maquinaria. Ante los Pelicans, 33 puntos, 6 rebotes, 3 asistencias, 2 robos y 2 tapones, pero 7 p¨¦rdidas y un -22 con ¨¦l en pista.

Los Lakers perd¨ªan de 7 al descanso (40-47) antes del desastre total: 25-44 en el tercer cuarto, en el que permitieron a sus rivales lanzar por encima del 60% en tiros de campo qued¨¢ndose los angelinos en 8 de 24 en tiros y, atenci¨®n, 0 de 9 en triples. El equipo de Frank Vogel, que saldr¨¢ seguro en verano con un anillo bajo el brazo (el de 2020) pero carencias obvias para hacerse con una situaci¨®n incontrolable y jugadores que ¨¦l, de perfil defensivo, jam¨¢s quiso ni solicit¨®, sum¨® hasta 23 p¨¦rdidas y un ignominioso 7 de 24 en triples. Y perdieron la batalla por el rebote (51-38), de las asistencias (29-15) y de la actitud, claro. LeBron sum¨® m¨¢s de 35 minutos para nada, Russell Westbrook hizo su insulso partido habitual (16+6 con 5 de 15 en tiros, 1 asistencias y 7 p¨¦rdidas)), Malik Monk sum¨® 0 puntos en 24 minutos y Carmelo Anthony 13 desde el banquillo sin pena ni gloria. Otra vez, el desastre total.

En los Pelicans, las cosas funcionaron bien y sumaron una nueva victoria, bastante gratuita, que les acerca al objetivo del play-in. Los cinco titulares superaron la decena de puntos, algo que tambi¨¦n hizo Devonte' Graham desde el banquillo (12), CJ McCollum fue el m¨¢ximo anotador con 22 puntos y Jonas Valanciunas consigui¨® un doble-doble (19+10). Muy buena actitud, una ventaja que fue creciendo de forma paulatina hasta explotar en el tercer periodo y un calendario dispar, pero eminentemente favorable de aqu¨ª a final de curso. De los partidos que les quedan a los Lakers no vamos a hablar (para qu¨¦) y todo se queda en la nada sin nadie que sea capaz de levantar una situaci¨®n escandalosamente mala. Ni siquiera LeBron, que adem¨¢s tuvo sus roces con el periodista Bill Oram en Twitter al finalizar el choque en un mensaje posteriormente borrado y ya no se ha disculpado de la afici¨®n tras el duelo. La estrella piensa ya en que esto se acabe. La afici¨®n, harta del equipo y del propio LeBron, tambi¨¦n. El en¨¦simo desastre angelino confirma lo que ya sab¨ªamos: que los Lakers no est¨¢n para nada. Lo bueno, es que ya nadie les espera.