Estos son otros Bucks: Giannis sonr¨ªe en una paliza hist¨®rica
Los Bucks dominan a Miami de principio a fin con una exhibici¨®n f¨ªsica espectacular. Giannis, con 31 puntos, 13 rebotes y 6 asistencias, pone el 2-0 y genera esperanzas.
Lo venimos diciendo todo el a?o: los Bucks est¨¢n probando cosas nuevas. Mike Budenholzer, sabedor de que tiene una vida extra por obra y gracia de Giannis Anntetokounmpo, decidi¨® a principios de curso que algo ten¨ªa que cambiar. El ¨²nico plan del que hac¨ªa gala para encarar eliminatorias complejas era un arma de doble filo que acababa mostrando unas limitaciones muy obvias. Desde hace meses, el t¨¦cnico se ha dejado de obsesionar con el r¨¦cord de la regular season (el mejor de la NBA las dos ¨²ltimas temporadas, algo que ya consigui¨® en otra ocasi¨®n cuando dirig¨ªa a los Hawks) para centrarse en mantener a todo el mundo involucrado. Prueba quintetos distintos, busca la mejor manera de rodear a Giannis y se aprovecha de una plantilla visiblemente mejorada, principalmente por el fichaje de un Jrue Holiday que da una multitud de nuevas posibilidades a la ofensiva de un equipo que ya no depende tanto de Antetokounmpo. O que se sigue aprovechando mucho de ¨¦l, pero tira tambi¨¦n de todos los dem¨¢s y no se queda en la superficie, en el poder¨ªo exclusivo de su estrella. Los Bucks ya no son solo Giannis: ahora son mucho m¨¢s.
Los dos partidos de la serie han sido la noche y el d¨ªa, pero han tenido un denominador com¨²n: la victoria de los Bucks. En el inaugural, fue un ejercicio de supervivencia impresionante, con Jimmy Butler forzando la pr¨®rroga y Khris Middleton sentenciando en la misma con un tiro ganador incre¨ªble. Giannis supo ceder el protagonismo en los ¨²ltimos minutos a un hombre m¨¢s clutch que ¨¦l y Milwaukee se adelant¨®, llev¨¢ndose un partido que en otra temporada, quiz¨¢ hubiesen perdido. Esta vez, la balanza se inclin¨® para su lado por el buen hacer t¨¢ctico de su t¨¦cnico y el aguante psicol¨®gico, resistiendo el impulso del sexto clasificado, el mismo equipo que les gan¨® el a?o pasado en una lecci¨®n deportiva de pocos precedentes (4-1) y con los Bucks atesorando el mejor r¨¦cord de la NBA. En este segundo asalto, las energ¨ªas de los Heat parecen haberse diluido; el equipo de Erik Spoelstra rema peor contracorriente y sufre si no puede marcar el ritmo de un partido o de una serie. Y est¨¢ a a?os luz, claro, de ese grupo de jugadores que se colaron en las ¨²ltimas Finales de forma tan inopinada como merecida. Son los mismos, s¨ª; pero a la vez, son muy distintos. Y sin la ausencia de ventaja de campo ni la presencia de la burbuja, sus carencias son m¨¢s obvias y su vulnerabilidad aumenta.
Los Bucks sentenciaron nada m¨¢s empezar: 46 puntos y 10 triples en un primer cuarto para la historia, con r¨¦cord de triples incluido y un poder¨ªo f¨ªsico que apabull¨® a un rival imberbe que solo pudo participar en lo que pasaba como mero espectador. No hubo ni siquiera un momento en el que los Heat consiguieran empatar el duelo o ponerse por delante; y por si fuera poco, perdieron tambi¨¦n los tres cuartos siguientes, sin que los Bucks, incansables, dejaran de martillear el aro rival y de mostrar un nivel defensivo superlativo, dejando a un equipo que ha promediado 108 puntos por noche en temporada regular en tan solo 98. Los Bucks anotaron 22 triples en 53 intentos (por encima del 40%), atraparon 61 rebotes (21 ofensivos), repartieron 34 asistencias (14 m¨¢s que Miami), provocaron 11 p¨¦rdidas en sus rivales e hicieron 25 faltas, un buen ejemplo de la cantidad de f¨ªsico con la que impregnaron un enfrentamiento que dominaron desde el primer minuto y del que los Heat salieron escaldados.
Giannis lidera la paliza
El mejor del partido fue, claro, Giannis Antetokounmpo. La estrella griega acab¨® con 31 puntos, 13 rebotes, 6 asistencias, 3 robos y 1 tap¨®n para un +19 con ¨¦l en pista, n¨²meros tremendos que quedaron patentes desde el inicio: en la primera jugada, la defensa de los Heat le flot¨® y anot¨® un triple sin dudar (luego fall¨® los seis siguientes), sentando las bases de lo que iba a ser el encuentro. Adem¨¢s, Middleton tuvo un encuentro muy seguro (17 puntos, con 4 de 5 en tiros de campo, 3 de 3 en triples y 6 de 6 en tiros libres) y Jrue Holdiay dio un cl¨ªnic en la distribuci¨®n y jug¨® un partido incre¨ªblemente completo: 11 tantos, 7 rebotes y 15 asistencias, un esc¨¢ndalo en apenas 30 minutos de juego. El elemento diferencial de los Bucks, eso s¨ª, fue Bryan Forbes: 14 puntos en el primer cuarto (con 4 de 5 en triples), 22 al final con 6 de 9 desde el exterior. PJ Tucker volvi¨® a ser un fil¨®n defensivo, Bobby Portis aport¨® 11 puntos, Pat Connaughton 15, y todos los jugadores locales acabaron con +/- positivo. En otras palabras: exhibici¨®n.
En los Heat no funcion¨® absolutamente nada. En el primer cuarto, solo Dewayne Dedmon aport¨® algo de luz (9 puntos con 4 de 4 en tiros), pero en el resto del partido, la apat¨ªa se apoder¨® del equipo de Erik Spoelstra, el hombre de las eternas soluciones que se qued¨® sin ellas demasiado pronto. Al final, Butler aport¨® 10 puntos, pero los Heat acabaron con un ignominioso -34 con ¨¦l en pista; Trevor Ariza intent¨® tres triples sin suerte en 19 minutos, Adebayo se fue a 16+3+4 y fue apabullado en todo momento por el poder¨ªo zonal de los Bucks y Duncan Robinson aport¨® 10 est¨¦riles tantos. Los mejores, Goran Dragic con 18 puntos (pero con 1 de 5 en triples) y el ya mencionado Dedmon, que acab¨® con 19+9 y fue el ¨²nico que tuvo una serie de tiro (8 de 11) ligeramente aceptable. Por ah¨ª, por cierto, pululaba un tal Tyler Herro, una sombra de lo que fue en la burbuja de Florida: 4 puntos y 1 de 5 en tiros en 18 minutos. Los Heat ponen ahora rumbo a Miami con la intenci¨®n de encauzar una eliminatoria que tienen muy complicada, m¨¢s por sensaciones que por resultados (2-0 ya para los Bucks). Giannis y compa?¨ªa ganaron un primer duelo igualado y han apalizado a sus rivales en el segundo. Y parecen m¨¢s fuertes que nunca. Veremos si eso les vale para optar definitivamente al anillo o se queda todo en un mero espejismo. De momento, van por el buen camino.
