Mirotic, Higgins, Calathes... y Pau Gasol: un Bar?a de ensue?o
En dos a?os, el Bar?a ha pasado del averno a la luz. Un proyecto lleno de estrellas que ha ido del banquillo a la pista. De Mirotic a Pau, pasando por Jasikevicius.
Pau Gasol redondea el proyecto. Su llegada al Bar?a 20 a?os despu¨¦s no s¨®lo supone su retorno a las pistas de baloncesto tras casi dos temporadas parado. Tampoco que aumenten exponencialmente sus posibilidades de participar en los Juegos Ol¨ªmpicos de Tokio. Visto desde el otro prisma, el azulgrana, supone la culminaci¨®n en los despachos de una idea que empez¨® con la llegada de Nikola Mirotic y que acaba con la de un hombre que se form¨® en las filas blaugranas, triunf¨® en ellas antes de dar el salto a la NBA y es una referencia baloncest¨ªstica en el mundo en general y en la entidad catalana en particular. Pau, muy alejado de la forma f¨ªsica que ten¨ªa de 1999 a 2001 (sus a?os en el Bar?a) y de la que hizo gala despu¨¦s, en Estados Unidos, supone no s¨®lo un jugador m¨¢s para la rotaci¨®n, cada vez m¨¢s larga, de Sarunas Jasikevicius. Tambi¨¦n es una presencia tranquilizadora, la de una leyenda que es un l¨ªder en el vestuario y que podr¨¢ aportar a la qu¨ªmica grupal y a la identidad de un equipo que es candidato a todo y en el que quiere poner el broche de oro a su carrera con la mirada puesta en Tokio.
M¨¢s all¨¢ de lo que Pau pueda a portar a nivel deportivo (ya veremos c¨®mo est¨¢ f¨ªsicamente y hasta d¨®nde puede llegar), el equilibrio espiritual que puede dar a un grupo lleno de estrellas puede ser clave. El Bar?a es, ahora mismo, un equipo lleno de nombres respetados en toda Europa que, adem¨¢s, ha demostrado que puede ganar t¨ªtulos, como hizo en la reciente Copa del Rey ante el Real Madrid, con exhibici¨®n incluida en la primera parte. Y tambi¨¦n es uno de los favoritos (el principal, de hecho) para conquistar los t¨ªtulos que quedan por delante: la Liga Endesa y, sobre todo, la Euroliga, ese sue?o que no ven cumplido desde 2010, con otra plantilla de ensue?o liderada por Juan Carlos Navarro en pista y por Xavi Pascual en los banquillos. Pete Mickeal, Erazem Lorbek, Ricky Rubio, Boniface N'Dong... una plantilla llena de grandes figuras que no pudo reeditar el triplete de 2003 tras sufrir una derrota tan inopinada como merecida en la final de la ACB ante el Baskonia (0-3).
Reeditar ese ¨¦xito es el principal objetivo del Bar?a y por lo que lleva trabajando desde que, en 2019, perdiera la final de la Liga Endesa ante el Real Madrid (3-1). Nacho Rodr¨ªguez, responsable de la secci¨®n de baloncesto del club, ha hecho un gran esfuerzo en los despachos para hacer un proyecto competitivo a nivel continental y el club ha invertido una ingente cantidad de dinero para que el sue?o se haga posible. En 2019, llegaron al equipo ?lex Abrines, Brandon Davies y Cory Higgins. El primero, tras superar los problemas personales que le obligaron a despedirse de su aventura en la NBA y de su equipo all¨ª, los Thunder. El p¨ªvot, tras hacerse un nombre en el Zalgiris; y Higgins, tras conquistar la Euroliga con el CSKA. Junto a ellos lleg¨®, claro, Nikola Mirotic, la joya de la corona. En un bombazo de enormes dimensiones, el hispano-montenegrino rechazaba suculentas ofertas de la NBA (los Jazz le llegaron a ofrecer 45 millones en tres temporadas) para volver a Espa?a, concretamente al eterno rival, con el que libr¨® encarnizadas luchas cuando militaba en el Real Madrid (2010-2014). Y se convert¨ªa en una de las referencias del continente y en la estrella que el Bar?a necesitaba para apuntalar su proyecto y mirar hacia el gran objetivo: la Euroliga.
Jasikevicius, Calathes... y Pau
Los problemas internos con Svetislav Pesic y las derrotas a las primeras de cambio en la Copa del Rey y en la final de la ACB (otra vez ante el Baskonia), acabaron con el veterano entrenador, que pon¨ªa rumbo a la clandestinidad sin haber intentado el asalto a una Euroliga cancelada (como tantas otras cosas) por el coronavirus. En ese punto, el Bar?a hizo su apuesta definitiva: fich¨® a Nick Calathes, que militaba en el Panathinaikos desde 2015, y encontr¨® un revulsivo en el banquillo en la figura de Sarunas Jasikevicius, un hombre cuya ¨²nica experiencia como entrenador estaba en el Zalgiris y que conoc¨ªa perfectamente la casa: estuvo en dos etapas en el Bar?a (del 2000 al 2003 y en la 2012-13), coincidi¨® con Pau en el doblete de 2001 y fue uno de los protagonistas del triplete de 2003, junto a otras estrellas como Dejan Bodiroga, Juan Carlos Navarro (otra vez) o Gregor Fucka.?
Jasikevicius reorganiz¨® la plantilla, prescindi¨® de Thomas Heurtel (que firmara la temporada que viene con el Real Madrid) y cre¨® un equipo a su gusto: pocos egos, mucha garra, esfuerzo defensivo y un gran control del nivel grupal de un vestuario en el que todos est¨¢n comprometidos, desde el capit¨¢n Pierre Oriola hasta el joven Leandro Bolmaro. No pudo con el Real Madrid en la Supercopa, pero su cl¨ªnic en la Copa del Rey y sus victorias en enfrentamientos directos contra los de Pablo Laso han reforzado una posici¨®n que defiende con pu?o de hierro. Jasikevicius se ha ganado a la plantilla y ha superado los bajones puntuales del equipo para encontrar una regularidad que se ve en todas las competiciones: victoria en Copa tras sufrir contra el Unicaja en cuartos, segunda posici¨®n de la ACB (la ¨²nica derrota del Madrid, l¨ªder, fue contra el Bar?a) y liderato en la Euroliga, con un r¨¦cord de 18-7 y excelentes sensaciones, din¨¢mica ascendente y un compromiso de sobra demostrado por unos jugadores que tienen una fe ciega en su entrenador.
El t¨¦cnico cuenta con la mejor versi¨®n de Cory Higgins (MVP de la Copa del Rey), con una de las mayores estrellas de la competici¨®n (Mirotic) una versi¨®n abnegada de Calathes, un Davies comprometido con sus minutos y un equipo compensado en el que cuenta la garra de Oriola, la defensa de Leo Westermann (que vino para sustituir a Heurtel) y el buen hacer de Adam Hanga, el tirador Kyle Kuric o un Abrines que ha vuelto a disfrutar del baloncesto bajo su mando. Y ahora, deber¨¢ buscar un sitio en su esquema para Pau Gasol, ya sea en el poste o fuera de ¨¦l. El espa?ol necesita minutos de calidad antes de Tokio y Saras ser¨¢ el encargado de encontrar el equilibrio entre ganar t¨ªtulos (el principal objetivo) y tirar de un ala-p¨ªvot que cumplir¨¢ 41 a?os en plenos Juegos Ol¨ªmpicos (el 6 de julio), si finalmente los juega. Una nueva aventura con un ¨²ltimo fichaje, el de una leyenda del baloncesto con una reputaci¨®n intachable que se adaptar¨¢ a cualquier rol y aportar¨¢ en lo que pueda para encontrar el ¨¦xito. En definitiva: Pau cierra el c¨ªrculo de un Bar?a de ensue?o.