Beal, m¨¢ximo anotador de la NBA, ?tras los pasos de Harden?
El escolta ofrece su mejor momento en unos Wizards insuficientes. Los general manager, sacudidos por el terremoto Harden, est¨¢n al acecho.
Si el tiempo no espera a nadie, la NBA todav¨ªa menos. Perder los mejores a?os de carrera en una franquicia sin aspiraciones aparece como martillo pil¨®n en los pensamientos de muchos jugadores. Una de esas voces que, en ciertos momentos de la vida, acompa?an sin descanso. Una pesadilla, pero peor: se presentan de d¨ªa y de noche. Muchos las han padecido. Kevin Durant, tras nueve temporadas en Oklahoma, se uni¨® a su principal verdugo, Golden State, para tocar la gloria. Y lo hizo. Anthony Davis, tras siete cursos, cambi¨® New Orleans por Los ?ngeles, y repiti¨® la suerte del anterior. Este a?o, Giannis Antetokounmpo demor¨® hasta el ¨²ltimo momento su decisi¨®n, y eso que ten¨ªa sobre la mesa el mayor contrato de la historia de la liga. Como para pens¨¢rselo. El de los Bucks describi¨® como nadie el sentimiento de cualquier jugador ambicioso, con condiciones para estar entre los mejores, pero constre?ido por el colectivo: "No me interesa si soy el primer, el segundo o el tercer nombre del equipo, porque quiero ganar. Cuando te retiras, eso es lo ¨²nico que recuerda la gente". Sabe que las agujas del reloj no paran y, con ellas, las oportunidades de lucir un anillo en el dedo.
A sus 27 a?os, Bradley Beal est¨¢ empezando a notar el fr¨ªo detr¨¢s de la oreja. Como se dir¨ªa coloquialmente, se le pasa el arroz. Est¨¢ en su plenitud baloncest¨ªstica, pero noche tras noche sus n¨²meros quedan en nada: 34,5 puntos por partido, 5,5 rebotes y 4,9 asistencias para estar abonado a la parte baja del Este. En otro contexto, y con estos registros, ser¨ªa un jugador considerado en la terna por el MVP y generar¨ªa pocas dudas, o ninguna, su condici¨®n de All-NBA. Ahora, sus aspiraciones se ven sustancialmente reducidas. Sobre todo, la principal: luchar, aunque sea m¨ªnimamente, por el Larry O'Brien. "Honestamente, no lo s¨¦. Quiero decir, lo s¨¦, es nuestra defensa. Pero no s¨¦ por qu¨¦ es nuestra defensa. Estamos en un punto en el que no podr¨ªamos defender ni a un coche estacionado", declar¨® tras perder por 116 a 107 frente a los Celtics. Es el m¨¢ximo anotador de la competici¨®n, pero sus partidos tienen una constante tan il¨®gica como frustrante: exhibici¨®n tras exhibici¨®n y ca¨ªda tras ca¨ªda. Con o sin Westbrook, los Wizards no arrancan. Para colmo, son el equipo m¨¢s azotado por la pandemia: llevaban sin jugar desde el 11 de enero y, con seis, son la franquicia con m¨¢s partidos aplazados. Antes de que todo esto ocurriera, sin Bradley en pista, el rating ofensivo de la franquicia pasaba de ser el segundo de la NBA (116,1) al ¨²ltimo (100). Tras volver, d¨¦j¨¤ v¨²: 31 puntos y 7 asistencias para caer frente a los Spurs (121-101). O cambia la situaci¨®n Washington, o Washington ser¨¢ lo que cambie Beal.
?El pr¨®ximo terremoto en la NBA?
En Estados Unidos, los rumores empiezan a asomar.?"?Cu¨¢nto tiempo m¨¢s puede pasar hasta que Beal quiera salir y un intercambio se convierta en la mejor opci¨®n para la franquicia?", se pregunta Kevin O'Conner, en The Ringer. "Por qu¨¦ es el momento para que Washington traspase a Bradley Beal", plantea John Hollinger, en The Athletic. Todos apuntan en la misma direcci¨®n: la carretera en sentido contrario a Washington. Un trayecto que, como recientemente se ha visto, cambia de marchas sin avisar.?"Cuando recientemente le pregunt¨¦ a una fuente de confianza sobre las posibilidades comerciales de James Harden, redirigi¨® la conversaci¨®n a Beal", escrib¨ªa el periodista Kurt Helin, de la NBC, un par de d¨ªas antes del movimiento de "La Barba". El resto es historia.?
Esta es la novena temporada de Bradley en los Wizards (como Durant, curiosamente) y, despu¨¦s de la extensi¨®n de contrato firmada en marzo del a?o pasado, tiene por delante dos m¨¢s. La ¨²ltima (2022-23), con una opci¨®n de jugador de 37,3 millones de d¨®lares. "No ir¨¢ a ninguna parte", asegur¨® en noviembre el general manager de los Wizards, Tommy Sheppard. "Si Giannis Antetokounmpo firma una extensi¨®n m¨¢xima con los Bucks, Bradley Beal se convierte en el objetivo n¨²mero uno de Heat. El inter¨¦s de la franquicia sigue siendo muy alto, seg¨²n me asegura una fuente cercana al equipo", desvelaba en diciembre el periodista Barry Jackson, del Miami Herald. Una posici¨®n d¨¦bil para negociar y frentes abiertos en franquicias de mercados grandes. El mayor miedo de cualquier general manager.
A todo esto, el devenir de los ¨²ltimos meses no ha ayudado. La esperada agencia libre de 2021, que pod¨ªa desviar la atenci¨®n, se ha quedado en casi nada. Kawhi Leonard es el solitario nombre de una lista que contaba con el propio Giannis, adem¨¢s de LeBron James, Paul George, Rudy Gobert o Jayson Tatum. Junto a Beal, James Harden (tambi¨¦n en la maldita novena temporada) era el otro dedo que pod¨ªa empujar el domin¨® de la mejor liga del mundo. Y lo ha hecho.?"No somos lo suficientemente buenos. Yo adoro esta ciudad y literalmente hago todo lo que puedo, pero esta situaci¨®n es una locura y no creo que se pueda arreglar", soltaba Harden tras perder, de forma consecutiva, contra los Lakers. Horas despu¨¦s, el Big Three?Harden-Durant-Irving era una realidad. Y?muchas. Cuando cae una pieza, suele caer la siguiente, y la siguiente... y hasta cuarto franquicias se vieron involucradas en la operaci¨®n. As¨ª es la NBA. Como se dec¨ªa en una cuantas l¨ªneas m¨¢s arriba, no espera a nadie. En¨¦sima lecci¨®n.
Alerta roja en Washington
De todo lo acaecido, Bradley habr¨¢ cogido apuntes (m¨¢s le vale) y?Tommy Sheppard tambi¨¦n (a¨²n m¨¢s).?Seg¨²n se?alan fuentes conocedoras de la liga al periodista Kevin O'Conner, los mismos Sixers y Nets que estaban interesados en el jugador de los Rockets, tambi¨¦n lo estaban en el de los Wizards. Unos ya tienen premio, pero los otros no, lo que les hace a¨²n m¨¢s peligrosos.?Las vertiginosas horas de negociaci¨®n tambi¨¦n?quitaron muchas caretas. Entre?ellas, la colocada sobre la dupla?Ben Simmons - Joel Embiid. Al parecer, no es tan irrompible como se predicaba. Por Harden, llegaron a aparecer ofertas desde Philadelphia que inclu¨ªan?a Simmons, junto al rookie Tyrese Maxey o?Matisse Thybulle. Un as mal jugado que les dej¨® al descubierto. Pero los pretendientes no se quedan ah¨ª. Pelicans, Dallas o los mencionados Heat son otros equipos que podr¨ªan mirar con deseo la capacidad anotadora de Bradley.?
A los ojos de los general manager, en este momento, la opci¨®n Beal se presenta como una de las opciones m¨¢s atractivas de la liga para dar un salto cualitativo. Se encuentra en un estado floral, pero sigue progresando. Ha pasado de promediar 13,9 puntos en su temporada de rookie a 23,1 en la 2016-17 y 30,5 en la ¨²ltima. Sigue hacia arriba, aunque como si lo hiciera hacia abajo y sin frenos, direcci¨®n a un empache de puntos. As¨ª mismo, es una opci¨®n m¨¢s econ¨®mica que la de muchas otras estrellas. Por poner el ejemplo m¨¢s reciente, hasta el a?o 2023, Harden ingresar¨¢ 132,9 millones de d¨®lares y Beal 100,5.?A pesar de todo (el contexto, siempre el contexto), a¨²n no es considerado como una de las grandes estrellas de la liga, lo que le pone en una posici¨®n perfecta para las franquicias quieran sacar ventaja salarial sobre el resto. Es un jugador maleable en los quintetos y con un car¨¢cter de los que gustan a los entrenadores. Mete mucho, mete bien (49,4% de acierto en tiros de campo) y, para colmo, aporta en defensa: es el jugador de los Wizards con m¨¢s robos por partido (1,3), el segundo en tapones (0,6, por detr¨¢s del lesionado Thomas Bryant) y el tercero en rebotes (5,5). Muchas razones para que unos (muchos) se ilusionen y otros (Washington) se preocupen.?