Los Sixers quieren a Lue, pero ?qui¨¦n quiere a los Sixers?
El asistente principal de Doc Rivers en los Clippers suna con fuerza como pr¨®ximo entrenador de los Sixers junto a Jason Kidd. El puesto puede ser un caramelo envenenado.
La etapa de Brett Brown en los Philadelphia 76ers ha tocado a su fin. Desde los d¨ªas del tanking industrial hasta las eliminaciones en playoffs, siempre un poco antes de lo esperado, su andadura no se recordar¨¢ por los ¨¦xitos cosechados dentro de la pista y s¨ª por una ilusi¨®n constante que nunca lleg¨® a materializarse del todo y que ha acabado por desaparecer. Hoy por hoy los Sixers, uno de los equipos m¨¢s intrigantes para el p¨²blico durante los ¨²ltimos a?os, se ha convertido en algo espeso y sin mucho inter¨¦s. Siguen teniendo a Joel Embiid, s¨ª. Tambi¨¦n siguen teniendo a Ben Simmons, correcto. Pero ni siquiera esas dos cartas hacen que la jugada sea atractiva para el observador imparcial. Esta bajada de expectativas en un grupo que no hace tanto estaba destinado a comerse el cielo hay que apuntarlo en el debe de Brown, pero no ¨²nicamente en el suyo.
Parece evidente que el ya ex entrenador no ha sido capaz de sacar nunca el m¨¢ximo rendimiento a una plantilla con dos estrellas tremendas (son all star cada a?o de forma casi segura), especialemente en ataque, donde la teor¨ªa de que Simmons y Embiid no pueden jugar juntos por sus caracter¨ªsticas gana cada vez m¨¢s enteros. Los hechos aprueban esta l¨ªnea de pensamiento, pero el ¨²nico que ha tenido la opci¨®n de demostrar que no era cierto ha sido Brett Brown. ?Podr¨¢ un nuevo entrenador cambiar las cosas y hacer que las dos estrellas del equipo se complementen al 100% de una vez por todas? Una vez m¨¢s, como dec¨ªamos antes con la culpa de Brown, no va a depender solo de ¨¦l.
Los despachos de los Sixers han ido dando pasos estos a?os como si quisieran autoboicotear su propio equipo. Con la excusa de ganar ya, como si Embiid no tuviese todav¨ªa 26 a?os y Simmons 24, han tratado de subir los escalones de dos en dos. A veces de tres en tres. Y en esos saltos han ido perdiendo a los mejores tiradores que ten¨ªan en n¨®mina. Jugadores que cualquiera que vea los partidos de los Sixers sabr¨¢ que es justo lo que necesitan alrededor tanto Simmons como Embiid. Primero fueron Dario Saric y Robert Covington. Despu¨¦s J.J. Reedick. MIentras tanto, en su primer verano como general manager, Elton Brand le dio 180 millones a un Tobias Harris que de momento ha demostrado no merecerlos y se trajo de Boston a Al Horford, echando m¨¢s madera por dentro y estrangulando un poco m¨¢s el ataque.
Brand tiene este verano-oto?o la dif¨ªcil misi¨®n de dar una vuelta a la estructura de la plantilla, de buscar jugadores que abran m¨¢s la pista, tiradores y creadores de juego, y todo ello con poco margen de maniobra en lo econ¨®mico. Ya dijo que el pasado verano se dej¨® aconsejar m¨¢s de la cuenta por otras personas y que esta vez iba a tomar sus propias decisiones. SI es as¨ª podemos hablar de un todo o nada para manetner su puesto. Y la primera decisi¨®n de la que va a depender su ¨¦xito o fracaso es el nuevo entrenador.
Tyronn Lue, un campe¨®n que puede salir muy caro
Los Sixers a¨²n no han comenzado las entrevistas para elegir a su nuevo t¨¦cnico, as¨ª que todos los nombres que han salido hasta ahora son rumores. No hay nada oficial. Pero entre todos esos rumores el que suena m¨¢s fuerte es el de Tyronn Lue. Actual asistente principal de Doc Rivers en Los Angeles Cliipper, Lue sabe lo que es ganar un anillo (Cleveland 2016), sabe lo que es lidiar con estrellas (LeBron, Kyrie, Love) y sabe lo que es atacar con una pieza central con tendencia a jugar por dentro (LeBron). El problema es que los Brooklyn Nets (donde Kyrie apuesta por ¨¦l), llevan ya tiempo tante¨¢ndole. Y se dice que el t¨¦cnico est¨¢ pidiendo 7 millones anuales y un contrato de cinco a?os de duraci¨®n. ?Est¨¢n los Sixers en disposici¨®n de ofrecer eso? Tanto por poder como por querer, parece complicado que vayan a hacerlo.
Fuera de Lue se habla de Jason Kidd, asistente en los Lakers, que fue el encargado de dirigir los primeros pasos de Antetokounmpo en la liga y que es ampliamente respetado por los jugadores. No as¨ª por los directivos, que no le tienen en tan alta estima. Aparte de los problemas ofensivos que han demostrado sus equipos (una m¨²sica que ya suena en Filadelfia), tanto en Milwaukee como en Brooklyn intent¨® tener cada vez mas poder dentro de la organizaci¨®n. El otro nombre que suena es el de John Lucas, asistente en los Rockets. Ya fue entrenador de los Sixers a mediados de los 90 (con 24 y 18 victorias en sus dos temporadas al frente) y no dirige un equipo desde 2003 (Cleveland Cavaliers). Tiene mucha fama como mentor de jugadores j¨®venes, pero ese momento parece haber pasado ya en Filadelfia.
Sea como sea, los Sixers son ahora mismo un caramelo envenenado para cualquier t¨¦cnico. Un equipo con un potencial casi sin parang¨®n entre los que tienen el banquillo libre (quiz¨¢ Brooklyn dependiendo de c¨®mo est¨¦ Durant), con el que si das con la tecla puedes pelear por el anillo ma?ana mismo. Pero con la actual plantilla, ?qui¨¦n puede dar con esa tecla? Brett Brown ya hemos visto que no. Que pase el siguiente... si es que alguien se atreve.