?Son los Mavs el peor equipo de la NBA en finales apretados?
Doncic y compa?¨ªa han vuelto a perder un encuentro al que llegaron con opciones de ganar. En el clutch time pasan de tener el mejor rating ofensivo al pen¨²ltimo.


La derrota de los Dallas Mavericks ante los Phoenix Suns por dos puntos ha vuelto a revelar una verdad casi invariable en lo que va de a?o: los texanos no saben ganar partidos con marcadores apretados en los ¨²ltimos minutos. Es un problema evidente que comenz¨® como un peque?o rumor y que ahora ya conoce hasta la ¨²ltima persona que siga un poco la NBA. Es casi matem¨¢tico. Si los Mavs llegan con opciones al clutch time (¨²ltimos cinco minutos de partido con una diferencia de 5 puntos o menos en el marcador), lo normal es que fallen m¨¢s que el rival y acaben cayendo. El de esta noche es su d¨¦cimo partido de doce con diferencia final de menos de tres puntos en el que pierden. Y lo que llama poderosamente la atenci¨®n de todo esto es que, al mismo tiempo que no parecen cansarse de fallar en los instantes finales, siguen siendo el equipo con el mejor rating ofensivo de la historia (116,7 actualmente). La transformaci¨®n ya habitual del equipo no se puede explicar de forma m¨¢s gr¨¢fica que como lo hace este usuario de Twitter:
?Qu¨¦ nos dice la estad¨ªstica sobre el problema de los Mavs? El titular principal es que el 116,7 de rating ofensivo se convierte en un 93,7 en el clutch, pasando de ser el mejor equipo en t¨¦rminos generales al pen¨²ltimo, s¨®lo por delante de los Pistons. Si comparamos el ofensivo con el defensivo para ver el net rating (la diferencia de puntos) en esos instantes tan decisivos, la suma da como resultado -17,6, la cuarta peor de la liga. El ¨²nico equipo de playoffs que se les acerca son los Memphis Grizzlies (14,8). Si todo esto les est¨¢ haciendo perder partidos en liga regular, ?qu¨¦ ocurrir¨¢ cu¨¢ndo lleguen a playoffs? La cosa no pinta bien.
Hay otra cosa que es evidente y es que los de Dallas no son capaces de mantener grandes ventajas. Esta noche han desperdiciado su 13? ventaja con dobles d¨ªgitos en lo que va de temporada y est¨¢n en lo m¨¢s bajo de la liga tambi¨¦n en este aspecto empatados con otros cinco equipos. Por supuesto, las miradas se dirigen a Luka Doncic, como no pod¨ªa ser de otra manera. Ser la estrella de un equipo tiene cosas buenas y malas y cuando las cosas no funcionan la gente te busca. El esloveno lleva un 0/10 en lanzamientos para empatar o ganar en el ¨²ltimo minuto del cuarto final y la pr¨®rroga. A pesar de la fama que tiene en estas situaciones, Doncic est¨¢ muy lejos este a?o de ser un jugador eficiente en situaciones l¨ªmite. Sus pocentajes en el clutch son los siguientes: 34,2% en tiros de campo, 15,8% en triples y 66,7% en tiros libres.
Pero por mucho que sea la estrella y por mucho que el bal¨®n est¨¦ en sus manos, la cuesta abajo que sufren los Mavs en muchos finales no se explica s¨®lo por ¨¦l. Cinco de los seis peores jugadores de la plantilla en el clutch time son los cinco titulares y los otros dos principales referentes ofensivos (Porzingis y Hardaway Jr.) acompa?an a Doncic en lo m¨¢s bajo de la lista. El p¨ªvot let¨®n mete un 31,1% de los tiros de campo, un 11,1% de los triples y un 78,3% de los tiros libres, mientras que el escolta acierta el 29,4%-20,8%-70,6%. Entre Doncic y Porzingis han metido s¨®lo 8 de los 56 triples que han intentado. Una calamidad se mire por donde se mire para dos jugadores que est¨¢n por encima del 30% durante la temporada. En el clutch, el esloveno baja su rendimiento a la mitad y el let¨®n mete un tercio de los triples habituales.
Rick Carlisle tiene trabajo por delante y no parece que vaya a llegar a tiempo para este curso. La eficiencia personificada en ataque que son los Mavs se desmorona a la hora de jugarse las victorias. El bal¨®n deja de circular con fluidez, los jugadores comienzan a fallar y el sistema salta por los aires. Malas noticias para un equipo que vuelve a los playoffs tres a?os despu¨¦s y que lo har¨¢ sin Dirk Nowitzki por primera vez en tres d¨¦cadas. Seguro que echan de menos al alem¨¢n, un especialista en esas situaciones donde a los dem¨¢s les tiembla la mano. Pero si quieren hacerse mayores, Doncic y compa?¨ªa tendr¨¢n que resolver este problema ellos solos.