Iberostar Tenerife conquista el mundo del baloncesto otra vez

Iberostar Tenerife se sit¨²a en la cima del mundo. Se ha acomodado a ella porque no es la primera vez: segunda en un lapso de tres a?os. Supera, por ejemplo, al Bar?a en el palmar¨¦s. Para una localidad que ni siquiera es la capital de su isla significa ponerles en el mapa del baloncesto a un nivel que nunca imaginaron pero al que se han merecido llegar.

El Santiago Mart¨ªn acogi¨® de nuevo una Final Four de la FIBA y el equipo no decepcion¨® a sus fieles, que apoyaron como si fuera la primera vez y celebraron como si fuera la ¨²ltima. Sin Dani D¨ªez por lesi¨®n y sin Tomasz Gielo por los cupos permitidos, contra todo un cl¨¢sico que est¨¢ m¨¢s vivo que nunca -la Virtus de Bolonia- pero saboreando las mieles del ¨¦xito siendo fieles al 'estilo Vidorreta': defensa, pocos riesgos y eficiencia.

Una corona de flores frescas

Los nervios jugaron una mala pasada a los dos equipos, pero sobre todo al Canarias, en el inicio. Esos primeros minutos eran como el que clava sus u?as en una pizarra, dentera y de la brusca. Salin inaugur¨® el marcador tras 3:48 minutos, pero fueron cinco puntos en siete minutos para el cuadro aurinegro. ?La buena noticia para ellos? Que el rival tampoco estaba muy fino. Marcelinho Huertas fue un buen term¨®metro de lo que acab¨® pasando: empez¨® horrible con una serie de 0/6 en tiros de campo y acab¨® con 23 puntos como m¨¢ximo anotador del encuentro.

Txus Vidorreta quiso que Giorgi Shermadini no saliera de inicio para as¨ª protegerle de posibles faltas y buscar el contraste con la segunda unidad. Qu¨¦ bien hizo porque en cuanto sali¨® cambi¨® el signo. "Balones a Will", que dec¨ªan en El Pr¨ªncipe de Bel Air. El georgiano est¨¢ fin¨ªsimo esta temporada en la que tanto se habla de Nikola Mirotic. El p¨ªvot absorb¨ªa los ataques en est¨¢tico y eso calmaba un poco la premura inicial. El elemento perturbador con el que el t¨¦cnico vasco quer¨ªa hacer la vida imposible a Sasha Djordjevic se llamaba Lahaou Konat¨¦, un jugador que juega a mil revoluciones y pone el contraste necesario en los esquemas del Canarias. Con eso levantaron la fortaleza los aqu¨ª locales, con dosis de brega y embarr¨¢ndose m¨¢s que su rival.

Teodosic y Markovic, los dos motores de la renovada Virtus, estaban tremendamente imprecisos no s¨®lo en los lanzamientos sino a la hora de encauzar los ataques para que hubiera posiciones claras de tiro. Eran otros, como el interior Julian Gamble, los que tomaban algo m¨¢s de responsabilidad para no despegarse.

La distancia de diez puntos se cuadr¨® al descanso y acompas¨® el electr¨®nico durante buena parte del encuentro. Los ojos de los espectadores empezaron a ver algo entre tanta espesura y se abri¨® la luz. El duelo que muchos quer¨ªan ver por fin tomaba calor: Marcelinho Huertas contra Milos Teodosic. Pasado en la NBA, muchas horas a las espaldas y calidad a raudales. El brasile?o est¨¢ en una gran forma este a?o, formando una pareja que asusta junto al mencionado Shermadini, y el momento para poner la guinda era ¨¦ste. Y lo hizo. Triples si no encontraba otra opci¨®n, alguna carambola de las de estar tocado por la varita m¨¢gica y dejando con poco efecto la exhibici¨®n de Santi Yusta en la semifinal para llevarse ¨¦l el MVP.?

Dentro de la mole de trabas en la que se mov¨ªa el partido por momentos, un perro viejo como Djordjevic vio que pod¨ªa hacer algo por remediar la situaci¨®n. Algo de magia de Teodosic mediante, subir la intensidad en los contactos fue el ant¨ªdoto contra el veneno paulista.?Giampaolo Ricci aun¨® eso y el acierto para poner en serios aprietos al Canarias. Pero un clavo saca a otro clavo. La introducci¨®n de Bogris en los minutos finales dio un par de balones extra que fueron como agua en el desierto para el conjunto de La Laguna. Y se hizo, de nuevo, la magia. ?Campeones del mundo!?

Con un 72-80 se llev¨® Iberostar Tenerife este t¨ªtulo para sus vitrinas por 2? vez.