Giannis tambi¨¦n quiere a Davis y se lo ha dicho cara a cara
Es la fotograf¨ªa de la noche. Despu¨¦s del partido el cracks de los Bucks se acerc¨® al de los Pelicans y le dijo: "Ven a los Bucks, hombre".


La imagen graciosa, amable, divertida de la noche. Pero tal como est¨¢n las cosas con Anthony Davis cualquier gesto hacia su futuro hay que tom¨¢rselo como algo m¨¢s que una broma. La situaci¨®n es la siguiente. Con el partido ya finalizado y los jugadores con ropa de calle Davis espera para marcharse en el interior del Fiserv Forum. Giannis Antetokounmpo va andando y le ve, se acerca y sonriendo le dice: "Ven a los Bucks, hombre". Anthony Davis no puede contener la risa, el gesto del que hab¨ªa sido su rival hac¨ªa uno rato le hab¨ªa gustado. Una an¨¦cdota entre dos jugadores que tienen buena relaci¨®n, aunque seguro que Giannis no lo dec¨ªa del todo en broma.
Antes de eso, Davis habl¨® con los periodistas sobre los ¨²ltimos rumores que le colocaban la pr¨®xima temporada fuera de Nueva Orleans, m¨¢s concretamente en Los ?ngeles, tras los elogios de LeBron James: "Obviamente es bonito escuchar a un jugador de su calibre decir que quiere jugar contigo, pero mi trabajo es dar la vuelta a la situaci¨®n del equipo. Si estamos 15-17 significa que no estoy haciendo mi trabajo".
El pr¨®ximo verano Davis a¨²n no saldr¨¢ a la agencia libre. Eso suceder¨ªa en 2020. Lo que s¨ª puede hacer al final de esta temporada es renovar con los Pelicans por un contrato s¨²per m¨¢ximo de 5 a?os y 239 millones de d¨®lares, algo que s¨®lo le puede ofrecer su actual franquicia. "Cuando llegue el momento veremos qu¨¦ pasa. Me encantas mis compa?eros, me encanta Nueva Orleans, me encantan los aficionados, hablo su idioma, me encanta su comida", dijo el p¨ªvot, que parece muy contento con su actual vida en la ciudad del sur de Estados Unidos.
En otros casos en los que hab¨ªa opci¨®n de ofrecer un s¨²per m¨¢ximo no siempre ha surtido efecto como raz¨®n para retener a las estrellas. S¨ª que paso en los Warriors con Curry, en los Thunder con Westbrook y en los Rockets con Harden, pero en ninguno de los tres casos se lleg¨® a dudar de que el final pudiese ser otro. Con Davis parece que estamos en una situaci¨®n bien distinta, con una franquicia que en este momento no da s¨ªntomas claros de poder ofrecerle lo que un jugador de su talla puede demandar. Y cuando eso ha pasado los jugadores no han aceptado el s¨²per m¨¢ximo. No lo hizo Paul George en Indiana, ni Jimmy Butler en Chicago, ni DeMarcus Cousins en Sacramento.