-Espera lo inesperado de la NBA : ya sab¨ªamos que en los ¨²ltimos a?os han cambiado las reglas del juego y que la liga es cada vez m¨¢s vol¨¢til y los proyectos m¨¢s arriesgados sin m¨¢s idea que huir de una clase media que se ha convertido en el lugar en el que nadie quiere estar. Salvo, tal vez, Detroit Pistons: en un a?o natural (desde el 30 de enero de 2017) han cambiado de equipo DeMarcus Cousins, Kyrie Irving, Paul George, Jimmy Butler, Gordon Hayward, Chirs Paul, Blake Griffin...
-Ning¨²n contrato es imposible de traspasar en el momento adecuado y las circunstancias oportunas . Salvo, seguramente, el de Luol Deng en los Lakers. Las franquicias siguen jugando con red en muchas de sus decisiones m¨¢s comprometidas.
-Los jugadores firman por todo el dinero que pueden . Y a veces se les critica de forma muy poco comprensible. El pasado verano y como agente libre, Blake Griffin decidi¨® seguir en los Clippers porque estos le agasajaron con una presentaci¨®n exageradamente recargada y emotiva en la que vendieron su vida como algo unido por el destino a la franquicia (pr¨¢cticamente). Tambi¨¦n porque le dieron 173 millones de d¨®lares por cinco a?os . Solo una de esas dos cosas se va ahora con ¨¦l de Los Angeles a Detroit. Y no es el romanticismo un poco cutre de aquel cartel que le se?alaba como pionero junto a Lincoln, Gandhi, Einstein, Luther KIng, Kennedy...
-Los Clippers vuelven a intentarlo : DeAndre Jordan iba a firmar en julio de 2015 por los Mavericks cuando los Clippers iniciaron una ins¨®lita operaci¨®n de rescate para no que se rompiera el n¨²cleo de un proyecto que podr¨ªa haber sido ganador aunque nunca estuvo demasiado cerca de serlo (?semifinales de aquel mismo 2015, tal vez?). Dos a?os y medio despu¨¦s solo queda ¨¦l de aquel supuesto big three. Y est¨¢ en el mercado, igual que Lou Williams. Los Clippers se han cansado de ser clase media con aspiraciones, o clase alta venida a menos demasiado r¨¢pido, y han puesto la vista en las dos pr¨®ximas ventanas de mercado . Tienen en contra la historia, como siempre. Tienen a favor que, ahora, cuentan con Jerry West como ide¨®logo y padrino. Y con Jerry West, siempre te pueden pasar cosas muy buenas.
-El equipo que no quiere tankear : Los Pistons son una tozuda resistencia a los m¨¦todos de cada vez m¨¢s equipos. Se resisten a tocar fondo para coger impulso aunque a veces, como ahora, sea con movimientos muy cuestionables. Y muy peligrosos: en la temporada 2019-20 su nueva pareja interior, Andre Drummond y Blake Griffin, tienen garantizados m¨¢s de 61 millones de d¨®lares. Blake Griffin cumple 29 a?os en marzo y tiene un peligroso historial con las lesiones, una explosividad f¨ªsica que ya ha dado un paso atr¨¢s y enormes problemas para trasladar sus virtudes a los momentos calientes de los partidos calientes. Su tiro exterior, nada est¨¦tico, no es una garant¨ªa y solo ha sido fiable despu¨¦s de a?os de trabajo y evoluci¨®n. Defensivamente es atroz cerca del aro, y deja a DeAndre para reunirse con un Drummond que en eso tambi¨¦n es notablemente peor que su excompa?ero. En una primera cuenta r¨¢pida, es dif¨ªcil imaginar que esta combinaci¨®n pueda ser ganadora, ni siquiera con Stan Van Gundy a los mandos. Y m¨¢s si apenas queda tiro exterior porque lo acabas de enviar a L.A. en la misma operaci¨®n. Pero Bradley acababa contrato este verano (y no ha sido todo lo que se esperaba despu¨¦s de un buen inicio en la MoTown) y Tobias Harris quedaba libre en 2019. En una ciudad en apuros y con las gradas pocas veces llenas, los Pistons siguen jugando a los dados desde la clase media que la mayor¨ªa detestan. Es de agradecer, pero este traspaso puede acabar siendo un desastre. En un primer momento lo parece, y creo que es a Zach Lowe al que le acabo de leer que pueden acabar replicando el modelo Clippers... con Reggie Jackson en el lugar de Chris Paul . Mala cosa, aunque much¨ªsimas veces tambi¨¦n lo es tankear sin ton ni son.
-Nos esperan fuegos artificiales : el 8 de febrero se cierra el mercado. Los Cavaliers necesitan un electroshock que pasa por m¨¢s de un traspaso. Los Thunder tienen que cubrir la ausencia de Roberson , los Rockets no dejan ni una opci¨®n sin tantear, los Lakers descubren que su vecino pobre da pasos en la misma direcci¨®n que ellos, los Celtics no har¨ªan ascos a un pu?ado m¨¢s de puntos... en una NBA en la que los Warriors han puesto un list¨®n hist¨®ricamente alto y en la que se avecina lluvia de estrellas en los pr¨®ximos mercados, todo puede suceder justo antes o justo despu¨¦s del All Star Weekend de Los Angeles. Volviendo al principio: espera lo inesperado.