?Qu¨¦ fue de Thomas Gravesen?: de ¡®ogro¡¯ a millonario en Vegas
El excentrocampista del Real Madrid caus¨® sensaci¨®n en nuestro pa¨ªs por su peculiar forma de ser que le cost¨® m¨¢s de una pol¨¦mica y por su famosa ¡®gravesinha¡¯.
Patentar un regate casi de forma involuntaria es algo de lo que pocos jugadores pueden presumir. Y m¨¢s a¨²n si hablamos de una de las fintas m¨¢s extra?as de la historia del f¨²tbol: la 'gravesinha'. Tan estrafalaria como su creador Thomas Gravesen, se presenta como uno de los amagos m¨¢s bruscos que se recuerdan. En la jugada, el dan¨¦s clavaba su rodilla en el suelo poniendo en peligro ligamentos, r¨®tula¡ Pero, las rodillas de Gravesen eran tan o m¨¢s duras que ¨¦l.
El excentrocampista del Real Madrid es muy recordado por su intensidad en el juego, en el que destacaban algunas entradas pasadas de vuelta y su fuerte car¨¢cter. Tras tener que colgar las botas antes de tiempo por no encontrar equipo, el dan¨¦s supo gestionar sus ganancias como futbolista para aumentar su fortuna de la que disfruta a d¨ªa de hoy.
Thomas Gravesen (Velje, Dinamarca, 11 de marzo de 1976) debut¨® como futbolista profesional en el Velje en 1995. Durante dos a?os jug¨® en el equipo de su ciudad natal hasta fichar por el Hamburgo, donde estuvo durante tres temporadas. Fue en su paso por la liga alemana donde empez¨® a llamar la atenci¨®n recibiendo la llamada de uno de los grandes de la Premier League, el Everton.
En el equipo de Liverpool destac¨® por lo que los ingleses llaman ¡®box to box¡¯, un jugador de ¨¢rea a ¨¢rea, capaz de recuperar en su campo y conducir el bal¨®n al ¨¢rea rival. Un ¡®todocampista' como dir¨ªamos en Espa?a. Esta condici¨®n le sirvi¨® para que Arrigo Sacchi, entonces director deportivo del Real Madrid, concretase su fichaje por el club blanco, que necesitaba cubrir la posici¨®n de centrocampista defensivo tras la marcha de Makelele.
El dan¨¦s llegaba a Espa?a para cubrir las espaldas de los gal¨¢cticos en el cuadro merengue que pag¨® por ¨¦l en torno a 3,5 millones de euros en el mercado invernal del 2005. El centrocampista tambi¨¦n ven¨ªa de hacer una buena Eurocopa con su selecci¨®n, con la que lleg¨® a disputar un total de 66 partidos a lo largo de su carrera, marcando cinco goles.
Lo cierto es que Gravesen no era el centrocampista defensivo que buscaba el Madrid de Zidane, Figo, Ronaldo, Ra¨²l¡y pronto se empez¨® a notar en sus duras faltas y en su intensidad en el juego, lo que le hizo ganarse la fama de duro. El ¡®ogro¡¯ o ¡®Shrek¡¯ de los gal¨¢cticos le llamaban.
A pesar de no destacar por su buen juego o gran aportaci¨®n al equipo, Gravesen cal¨® hondo en el club blanco. Su fuerte car¨¢cter y extra?a forma de comportarse en el campo fueron protagonistas en muchos programas deportivos durante su estancia en Madrid, donde se populariz¨® la ya comentada ¡®gravesinha¡¯. El mediocentro pas¨® m¨¢s tiempo lesionado que jugando, ya que su postura de naturista le imped¨ªa tomar medicamentos. El dan¨¦s era sin duda un personaje sin cuidado.
Su salida del Real Madrid no estuvo exenta de pol¨¦mica. Una pelea con Robinho en la pretemporada de la 06-07 firm¨® su sentencia como madridista. Tras el incidente en un entrenamiento, Fabio Capello le puso la cruz y ese mismo verano fue traspasado al Celtic de Glasgow para un a?o m¨¢s tarde regresar en calidad de cedido al Everton por una temporada. Se convert¨ªa entonces en uno de los peores fichajes de la historia del Madrid que dirig¨ªa Florentino en su primera etapa como presidente blanco.
En 2009, tras varios meses sin encontrar equipo decide retirarse con 32 a?os. Colg¨® las botas pronto, pero el exmadridista sab¨ªa lo que hac¨ªa. Seg¨²n el diario dan¨¦s BT, invirti¨® el dinero que hab¨ªa ganado como futbolista en varios negocios que le permitieron multiplicar su dinero, alcanzando una fortuna superior a los 100 millones que le permitieron anunciar su segunda retirada a los 37 a?os. Fue entonces cuando se march¨® a Las Vegas.
Lo ¨²ltimo que se sabe del dan¨¦s es que se pasa los d¨ªas jugando al p¨®ker, al blackjack¡ en los mejores casinos de la ¡®ciudad del pecado¡¯ donde vive con su ¨²ltima pareja, la modelo Kamila Persse. Un retiro dorado que no pod¨ªa protagonizar otro. M¨¢s de una d¨¦cada despu¨¦s, el ¡®ogro¡¯ de los gal¨¢cticos sigue dando la ¡®nota¡¯ all¨¢ donde va. Una vida de desenfreno que en su paso por Espa?a nos dej¨® algunas joyitas que jam¨¢s olvidaremos.