?Por qu¨¦ la Copa Am¨¦rica Centenario es un Torneo transcendental?
Todas la selecciones se tomaron el torneo con seriedad, una prueba de ello es el despido de Dunga, la renuncia de Ram¨®n D¨ªaz y la posible salida de Baldivieso y Osorio.
Muchas pens¨¢bamos -me incluyo- que la Copa Am¨¦rica Centenario no iba a tener la misma importancia que la Copa Am¨¦rica usual, por decirlo de alguna manera, la que hasta el 3 de junio s¨®lo se hab¨ªa jugado en Sudam¨¦rica. Existen hechos de facto que corroboran esta premisa, pero la que m¨¢s llama la atenci¨®n es que hasta el momento dos t¨¦cnico han perdido su trabajo, y en pocos d¨ªas el n¨²mero podr¨ªa aumentar a cuatro.?
Se hab¨ªa vendido la idea de que era un torneo conmemorativo y que no ten¨ªa sentido hacerlo en Estados Unidos, pero mientras los calurosos d¨ªas de verano transcurren, estos prejuicios se han desmoronado.
En concreto sobre el pa¨ªs sede, la asistencia ya ha rebasado el mill¨®n de asistentes, los?fabulosos estadios y el muy buen f¨²tbol han contribuido a optimizar la imagen de la Copa.
Los t¨¦cnicos que dicen adi¨®s
El hecho de que la Confederaci¨®n Brasile?a haya despedido de una vez por todas a Dunga, un personaje que dirige como jugaba, destruyendo y no creando; es una se?al de la seriedad con que se encar¨® el Torneo.
Ram¨®n D¨ªaz, por su parte, renunci¨® antes de que lo despidieran, luego de 18 meses al frente de la selecci¨®n guaran¨ª.
Julio C¨¦sar Baldivieso, si denuncia conspiraciones en su contra, dentro del seno de la selecci¨®n boliviana, lo l¨®gico ser¨ªa que tambi¨¦n de un paso al costado.
Juan Carlos Osorio, deber¨ªa presentar su dimisi¨®n porque realmente sus dirigidos fueron humillados por Chile en un partido en donde todo les sali¨® mal, no se trata de una derrota cualquiera. El puesto de t¨¦cnico en M¨¦xico no es tarea f¨¢cil y el t¨¦cnico colombiano no tiene ni el temple, ni la experiencia para afrontarlo.
La unificaci¨®n
Tambi¨¦n algo ha quedado claro una vez m¨¢s, Am¨¦rica es una sola, desde la Patagonia hasta Canad¨¢, por lo tanto una sola Confederaci¨®n deber¨ªa representar al continente.
Luego del FIFAgate, deber¨ªa darse una restructuraci¨®n del balompi¨¦ mundial y la CONMEBOL y la CONCACAF deber¨ªan pensar en esta propuesta.
?Qu¨¦ existen muchos intereses econ¨®micos? No hay duda de ello, pero lo cierto es que se necesita un cambio de estructura m¨¢s temprano que tarde.
El f¨²tbol es noble y ha trascendido ante la podredumbre de FIFA, pero el cambio se tiene que generar lo m¨¢s pronto posible.?