¡®Pesadilla en la cocina¡¯: una hostelera revela los secretos del programa de Alberto Chicote

La sospecha de que el programa Pesadilla en la cocina (La Sexta) utilizaba artima?as para sacar lo peor de los restaurantes que visitaba, as¨ª como de sus propietarios y trabajadores, siempre ha estado detr¨¢s de las informaciones sobre el espacio presentado por Alberto Chicote.

Pues bien, una de las hosteleras se ha atrevido a contar su experiencia durante la grabaci¨®n a trav¨¦s de TikTok. Lourdes, due?a y cocinera de Los cinco sentidos (Coslada, Madrid), tan solo ocho meses despu¨¦s de la emisi¨®n del formato.

¡°Tres meses antes, te llaman d¨ªa s¨ª y d¨ªa no. Conocen tu vida entera. Es un redactor, sabe c¨®mo preguntarte, y entonces le cuentas un poco toda tu vida. Ah¨ª saben d¨®nde picarte. No hay un guion como tal, pero s¨ª que es verdad que detr¨¢s de cada camarero hay un redactor: ¡®T¨² ve, haz esto, t¨² haz lo otro¡­¡¯¡±, cuenta en el canal del perfil Cenando con Pablo.

Trucos para desestabilizar

Lourdes, por sus palabras, se muestra tambi¨¦n segura de que los redactores utilizan artima?as para desestabilizar al personal de los restaurantes y no hacer bien su trabajo. ¡°Nosotros funcionamos por medio de una PDA y, de repente, ponen ah¨ª un cami¨®n y ya no funciona. Te ponen un inhibidor de frecuencia y estoy convencida. Fue irse ellos y empez¨® a funcionar¡±, desvela.

Un palo en las ruedas que tambi¨¦n sugiere que le hicieron con las comandas. ¡°A m¨ª me ven¨ªan notas duplicadas. Yo le dec¨ªa: ¡®Esta nota ya la he hecho¡¯, y me dec¨ªa: ¡®Es imposible¡¯. Me quitaban notas, me daba la vuelta y me pon¨ªan cuatro o cinco encima¡±.

Su hijo, Borja, tambi¨¦n cuenta c¨®mo fue la experiencia: ¡°Hubo un momento en que me dijeron que lo cogiera as¨ª de la pechera y lo sacara para fuera, se pon¨ªan pesados contigo¡±. ¡°A Quique [marido de Lourdes] le mandaron a salir fuera, que se marchara, y que hiciera como que se iba¡±, a?ade Lourdes.

La an¨¦cdota

Quique, precisamente, se muestra muy enfadado al contar una an¨¦cdota. Al parecer, una parte de la grabaci¨®n no se film¨® correctamente y tanto Chicote como los redactores debieron volver a su restaurante para repetir la toma. Como este ya estaba reformado, tuvieron que grabar fuera, y, adem¨¢s, el cocinero quer¨ªa probar las gambas, que ya no estaban en la carta. Quique entonces las compr¨® solamente para ese momento, ¡°a 100 euros el kilo¡±, y el presentador recalcaba mientras las probaba que no eran de calidad.