La La Love You, el grupo cuya historia cambiaron Amaia y La Resistencia

David Merino responde al tel¨¦fono con una sonrisa. Esa misma con la que llena las canciones de la banda de la que es una de sus voces y guitarra desde hace tres a?os mientras llenan en letras grandes la parte alta de los carteles de los festivales. La La Love You se llamaron, como esa canci¨®n de los Pixies sin que ninguno de los componentes fuera especialmente fan¨¢tico del grupo. ¡°A nosotros los que nos gustaban eran Los Ramones¡±, confiesa sin que la sonrisa se escape de sus labios. Es como la m¨²sica de su banda. Alegre, divertida, de la que te lleva solos los pies. Bajo un asentir de cabeza.

Este 9 de noviembre regresan al WiZink Center, un escenario que ya conquistaron en marzo, para compartir cartel ¡°con muchas bandas amigas¡±. Carlos Sadness, Cupido, Shinova, La Paloma, Roc¨ªo Saiz, Lucy y Shego. Doce horas de m¨²sica para celebrar que el Vibra Mahou Fest celebra su primera edici¨®n en Madrid tras haber llenado, durante a?os, salas y recintos por toda Espa?a. Toda la recaudaci¨®n se donar¨¢ a Mensajeros de la Paz y Cruz Roja para ayudar a las v¨ªctimas y afectados por la DANA en Valencia. ¡°Es un honor formar parte. ?Qu¨¦ a qui¨¦n tenemos m¨¢s ganas de ver? Imposible elegir. Hemos coincidido con todos en festivales y son amigos. Carlos (Sadness) nos hizo los arreglos de una de nuestras canciones¡­ Imag¨ªnate las ganas que tenemos de formar parte de esto¡±, esgrime, antes de contarse desde el inicio hasta hoy cuando La La Love You acumula 2,6 millones de oyentes mensuales en Spotify. Para situar, Love of Lesbian suma 1,6; Viva Suecia, uno; Arde Bogot¨¢, 1,3. Sus 2,6 son los mismos que tiene Amaral. Hubo algo en su historia que lo cambi¨® todo y para siempre: la visita de Amaia Romero, ganadora de OT en 2017, a La Resistencia en 2019.

¡°Ninguno de nosotros estaba viendo el programa, pero nos empezaros a llegar mensajes. ¡®T¨², t¨², pon La Resistencia, que Amaia est¨¢ hablando de vosotros¡¯. Y no le dimos demasiada importancia, la verdad¡±, revela. Era una noche de 4 de junio y el programa de David Broncano, entonces en Movistar+, ya ten¨ªa el calado que hoy tiene en La 1 bajo el nombre de La Revuelta. Profund¨ªsimo, santo y se?a entre j¨®venes. ¡°Estoy escuchando mucho un grupo que, de hecho, conoc¨ª hace poco, se llama La La Love You¡±, comienza ella, bajo los focos. ¡°Pon ¡®M¨¢s colao que el Colacao¡¯ o algo as¨ª¡±, pide. Pertenec¨ªa a su disco hom¨®nimo, ¡®La La Love You¡¯, y en ese momento ten¨ªa menos de mil escuchas en Spotify, como el mismo Broncano se encarg¨® de se?alar. Sonaron los primeros acordes y la mecha estaba prendida. ¡°Al d¨ªa siguiente, ocho, nueve de las canciones de ese disco que ten¨ªa cinco a?os se hab¨ªan hecho virales¡±, cuenta David. Ese ser¨ªa el germen de su canci¨®n m¨¢s reconocida. Esa que t¨² tambi¨¦n has bailado y tarareado en una fiesta, en una noche, en un tardeo. ¡®El fin del mundo¡¯. Tiene 163.954.130 de escuchas hoy en d¨ªa, y sin dejar de subir.

¡°Pero, f¨ªjate, nosotros somos muy felices con todo lo que nos est¨¢ ocurriendo¡±, confiesa, ¡°pero tambi¨¦n lo ¨¦ramos cuando solo ven¨ªan a vernos nuestros amigos y familiares. O cuando ¨¦ramos underground, que no nos conoc¨ªa apenas nadie. Tocar y que hubiese gente que viniera a vernos, que llenara salas, que se supiera nuestras canciones, aunque fuese poquita, tambi¨¦n nos llenaba. Nunca tocamos para alcanzar la fama¡±, completa y esa sonrisa que no se le va de los labios ahora habla desde el coraz¨®n. La misma que no puede evitar ensancharse al regresar a los comienzos de todo. Los pupitres de ese instituto de Parla, localidad de Madrid al que sus padres se mudaron de Palencia, donde naci¨®, cuando ¨¦l a¨²n ni recuerdos ten¨ªa, de tan peque?o. All¨ª fue donde coincidi¨®, sin haber estudiado m¨²sica ni pisado un conservatorio, con Roberto Amor y Rafa Torres, primer bater¨ªa del grupo. ¡°So?¨¢bamos con montar una banda, parecernos a aquellos Ramones que tanto nos gustaban, as¨ª que nos repartimos los instrumentos y cada uno aprendi¨® a tocar el suyo. Nos los echamos a suerte¡±. A ¨¦l le toc¨® la guitarra. De manera autodidacta, ¡°y sin la ayuda de Google¡±, apunta, que de aquellas no exist¨ªa, aprendi¨® a tocarla, a que se movieran sus dedos por sus cuerdas como mandaban las melod¨ªas que iban brotando en su cabeza. Sus primeros ensayos fueron en la escuela municipal de Parla. Era 1996. Cuando lanzaron su primer disco, en 2004, junto a otros dos excompa?eros de banda, el indie-pop no exist¨ªa. ¡°No ten¨ªa tanto impacto. Ahora todo ha cambiado. Nosotros nunca hemos intentado adaptarnos a nada, ha ido cambiando todo y se ha ido adaptando a nosotros, a nuestra m¨²sica. El arco de edad que acude a nuestros conciertos oscila entre los ni?os a los abuelos que van con sus hijos o sus nietos¡±, aduce. Ellos, que ya eran extremadamente felices cuando lo hac¨ªan solo sus amigos. En 2009, su primer disco estaba en la calle. Se llam¨® Umm... Que Rico!

?C¨®mo cambi¨® todo? ?Despu¨¦s de ese momento de Amaia?

Aquello fue el detonante, pero entonces ya llev¨¢bamos mucho tiempo en la m¨²sica, sin tener nunca la sensaci¨®n de fracaso.

Pero despu¨¦s de aquello, surgi¨® ¡®El fin del mundo¡¯¡­ Y esa canci¨®n tiene las ra¨ªces en ese momento, ?verdad?

Un poco s¨ª. Tambi¨¦n cuando pas¨® lo de Amaia pensamos que ser¨ªa algo anecd¨®tico, que durar¨ªa un d¨ªa y ya, pero fueron sucedi¨¦ndose las semanas y vimos que la gente no paraba de escucharnos, que aquello iba a m¨¢s. ¡®El fin del mundo¡¯ lleg¨® de una manera completamente distinta a la que nosotros ten¨ªamos de hacer canciones.

?Y c¨®mo es?

Un poco desorganizada. Vienen y ya. Yo, en casa, tengo muchas veces la guitarra encima y de repente sale una idea y de ah¨ª empiezo a tirar y acaba siendo una canci¨®n. Casi nunca es algo buscado.

?Y qu¨¦ ocurri¨® tras aquel 4 de junio de 2019?

Bueno, que nos encerramos Roberto Amor y yo durante dos meses buscando la canci¨®n perfecta. Nos dijimos: ¡°Tenemos que aprovechar esta ola¡±. Lo de Amaia, que nos buscara, nos escuchara de pronto tanta gente. Y cuando termin¨® aquel encierro ten¨ªamos esa canci¨®n. ¡®El fin del mundo¡¯.

?Cu¨¢l dir¨ªa que es su secreto?

Que cuando nosotros nos lo pasamos bien, la gente tambi¨¦n suele divertirse. Se contagia.

Ya viven de la m¨²sica. Pero, ?cu¨¢l era su trabajo antes?

Yo trabajaba en medios como guionista de ficci¨®n. Mis ¨²ltimos a?os fueron en ¡®Salvados¡¯ de laSexta. Echo de menos a mis compa?eros (r¨ªe).

R¨ªe, y su risa es tan contagiosa como su sonrisa, como sus canciones. Como su ¨²ltimo disco, Que nadie me llore. Los que el s¨¢bado 9 de noviembre est¨¦n en el Vibra Mahou Fest de Madrid en el WiZink podr¨¢n contarlo. Como tantos a lo largo de los festivales en los que han sido cabeza de cartel los ¨²ltimos a?os. ¡°Hemos tocado mucho, eh, no s¨¦ el n¨²mero, ?m¨¢s de cien?¡±. Y sin dejar de subir tambi¨¦n.

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?Qu¨¦ es Vibra Mahou Fest y cu¨¢l su calado?

Vibra Mahou ya es una marca de m¨²sica. Parida desde la cerveza nacida en la calle Amaniel 29 en el a?o 1890 en Madrid ha ido creciendo bajo su amparo y un cuidado y profundo mimo. Ese que le pone David Pejenaute, Content Manager de Mahou, y su pater, siempre pendiente del talento emergente y de esos lugares y ciudades con mucha cultura musical, como por ejemplo Vigo, donde ech¨® a andar este festival en 2019, con Zahara, Xoel L¨®pez y Carlos Sadness. ¡°Y funcion¨® muy guay¡±, cuenta Peje, como le apodan. Despu¨¦s de la pandemia germin¨® en Gij¨®n, Le¨®n y un grupo entonces emergente llamado Arde Bogot¨¢. Cinco a?os despu¨¦s aterriza en Madrid con ese abrazo a Valencia, a cuyos afectados por la DANA se donar¨¢ toda la recaudaci¨®n a trav¨¦s de esas dos instituciones, Mensajeros de la Paz y Cruz Roja. ¡°Como la Mahou naci¨® en Madrid quer¨ªamos devolverle a su ciudad algo especial¡±, detalla.

Este festival tan distinto a todos los dem¨¢s. En el que la primera de sus premisas es una ant¨ªpoda de otros: la comodidad de los asistentes. En el Vibra Mahou Fest, por ejemplo, se permite entrar y salir del recinto con naturalidad y sin arrancar la pulsera. ¡°La idea es sumar tambi¨¦n en aquellos lugares en los que se celebra, no estar atado doce horas a un recinto¡±. Los que elige Mahou para su Vibra Fest siempre son c¨¦ntricos, con precios competitivos y mucho gusto musical. Que conjuga lo grande y peque?o, lo mainstream con lo underground en una balanza perfecta. Quien lo prob¨® lo sabe, que dec¨ªa Lope de Vega. Y repite. Por la experiencia en conjunto. En Madrid, por ejemplo, a toda la m¨²sica la acompa?ar¨¢ una oferta gastro comandada por Miguel Carretero, chef del restaurante Santerra, con una estrella Michel¨ªn y dos premios tan madrile?os como la cerveza Mahou: el de la ¡®mejor croqueta del mundo¡¯, obtenido en dos ocasiones, y el de las ¡®mejores patatas bravas de Madrid¡¯, otorgado en Madrid Fusi¨®n.

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