El pueblo de Pap¨¢ Noel: el millonario imperio de Santa Claus en Laponia
Uno de los personajes m¨¢s queridos y esperados en esta ¨¦poca del a?o vive en el Santa Claus Village, cerca de Rovaniemi (Finlandia), un lugar muy lucrativo para sus intereses.
La misi¨®n de Santa Claus en esta vida es clara: mejorar el bienestar de los ni?os y la bondad de los adultos, as¨ª como difundir el mensaje de amor y buena voluntad del Esp¨ªritu Navide?o en todo el mundo. Pero para acometer semejante reto, uno de los personajes m¨¢s queridos y esperados en esta ¨¦poca del a?o necesita un lugar desde el que planificar bien todos sus movimientos. Y ese lugar es el Santa Claus Village.
El pueblo de Pap¨¢ Noel, est¨¢ ubicado, como no pod¨ªa ser de otra forma, en un m¨¢gico emplazamiento en pleno C¨ªrculo Polar ?rtico: en la Laponia finlandesa. Y m¨¢s, concretamente, muy cerca -a 8 kil¨®metros- de la localidad de Rovaniemi, la poblaci¨®n m¨¢s importante al norte del pa¨ªs y que cada a?o recibe a cientos de miles de visitantes que, evidentemente, ans¨ªan conocer a su morador m¨¢s famoso.
El pueblo, que presume de estar abierto todos los d¨ªas del a?o, m¨¢s all¨¢ de su id¨ªlica apariencia y de la ilusi¨®n que despierta sobre todo en los m¨¢s peque?os, es un negocio bien montado que genera millones de euros. Y es que en el fondo, no deja de ser una compa?¨ªa que gestiona a las mil maravillas una marca tan potente como cualquier otra que te venga a la cabeza (?Coca-Cola?).
Hist¨®ricamente, Finlandia, Noruega, Suecia e incluso Dinamarca, han pugnado por convertirse en el hogar oficial de Pap¨¢ Noel, pero por una suerte de avatares hist¨®ricos, como recoge Paco Nadal en este art¨ªculo de El Pa¨ªs, y el gran olfato de los finlandeses decantaron la batalla en favor de este pa¨ªs n¨®rdico.
Y desde mediados de la d¨¦cada de los sesenta, lo que fue una humilde caba?a se ha convertido en la mayor atracci¨®n tur¨ªstica de Escandinavia en la que, a poco que te descuides, vuelan los euros. Restaurantes, oficina de correos, tiendas de regalos, alojamientos, experiencias como dar paseos en trineo tirado por renos o huskies, o una foto con el mism¨ªsimo Santa Claus son algunas de las opciones que se ofrecen a los turistas por un m¨®dico precio. Un imperio millonario para seguir manteniendo a Pap¨¢ Noel y toda su cohorte.