Boateng, a un paso de la c¨¢rcel
El futbolista del Olympique de Lyon, que fue denunciado por violencia dom¨¦stica hace tres a?os, deber¨¢ presentarse en el juzgado este mismo jueves.
J¨¦r?me Boateng deber¨¢ comparecer este mismo jueves ante el tribunal de M¨²nich para responder ante las acusaciones de violencia dom¨¦stica a las que se enfrenta despu¨¦s de que fuera denunciado en el a?o 2018 por su expareja y madre de sus dos hijas, Sherin Senler. La joven culpa al actual jugador del Olympique de Lyon de ¡°haberla lastimado durante una violenta discusi¨®n hace tres a?os mientras estaba de vacaciones¡± aportando como prueba un parte de lesiones f¨ªsicas que presuntamente le provocaron los malos tratos.
El juicio tendr¨¢ lugar el 9 de septiembre despu¨¦s de que la comparecencia del denunciado se alargara en el tiempo debido a la pandemia de coronavirus que ha impedido que la audiencia se celebrase a lo largo del 2020. Y es que uno de los testigos hab¨ªa contra¨ªdo la enfermedad en la primera fecha programada. El jugador siempre se ha defendido de las acusaciones de su ex calificando el tema como ¡°un asunto privado basado en acusaciones no probadas de terceros¡±.
A finales del pasado a?o, la prensa alemana tambi¨¦n especul¨® con la posibilidad de que Boateng pudiera evitar la pena de c¨¢rcel gracias al pago de una cuantiosa multa que servir¨ªa de indemnizaci¨®n para su ex. Sin embargo, el deportista deber¨¢ exponerse a la justicia donde podr¨ªa enfrentarse a una pena de prisi¨®n de hasta cinco a?os seg¨²n adelantan varios medios franceses como 'L'Equipe'. Cabe recordar que el alem¨¢n y Sherin Senler tambi¨¦n mantienen una batalla judicial por la custodia de sus hijas.
Boateng y Sherin Senler vivieron una historia de amor de lo m¨¢s intensa llena de idas y venidas, y mucha pol¨¦mica. En el a?o 2011, se convert¨ªan en padres de dos gemelas, Soley y Lamia, aunque la sombra de algunas deslealtades por parte del futbolista terminaron por dinamitar la relaci¨®n. Dos a?os m¨¢s tarde, decid¨ªan darse una nueva oportunidad y reconciliarse para terminar, finalmente, en los juzgados.