Orantes: "Kirk Douglas quer¨ªa ser jugador de tenis"
Manuel Orantes recuerda su amistad con Kirk Douglas: "Su muerte me ha dejado una profunda huella. Conoc¨ª a su familia, a sus hijos, y luego segu¨ª toda su carrera".
La muerte del estadounidense Kirk Douglas (103 a?os) ha causado sensaci¨®n en Manuel Orantes, el primer espa?ol en ganar un Masters (1976), que precisamente este jueves cumple 71 a?os. "Una noticia triste y otra bonita en el mismo d¨ªa", ha se?alado el granadino cuya vida deportiva estuvo ligada al protagonista de "Espartaco", que una vez confes¨® a Manolo que su ilusi¨®n hubiera sido ser profesional del tenis.
"Me he enterado por la radio. Era un gran actor y todas sus pel¨ªculas eran muy bonitas y sus interpretaciones geniales, muy viril y muy cre¨ªble. Un d¨ªa me confes¨® que su gran ilusi¨®n hubiera sido ser profesional del tenis, que le hubiera encantado, a lo que yo le contest¨¦ que a m¨ª me hubiera gustado ser actor o cantante. Siempre me gustaron los Rolling Stones y los Beatles, y por supuesto Mick Jagger", cuenta Orantes.
Esa conversaci¨®n entre Kirk Douglas y Manuel Orantes tuvo lugar en 1976 en la casa del actor en Indian Wells, muy cerca de donde se disputa el Masters 1.000. All¨ª Douglas, conocido aficionado al tenis con visitas frecuentes a Roland Garros y Open USA, quiso conocer mucho m¨¢s a Orantes. "Nos hab¨ªamos visto antes varias veces en un torneo que se disputaba por all¨ª y acept¨¦, y la que m¨¢s habl¨® y me pregunt¨® cosas fue su mujer Anne Buydens, una gran aficionada al tenis como ¨¦l", dice Manolo.
Gan¨® gracias a la mujer de Kirk Douglas
Buydens tuvo luego una gran influencia en la victoria de Orantes sobre el polaco Wojtek Fibak en la final del Masters disputado en el Summit de Houston, donde el granadino se convirti¨® en el primer espa?ol en ganar este torneo, y el primero en ganar un t¨ªtulo en pista cubierta y moqueta. Orantes recuerda la an¨¦cdota, cuando el periodista Vic Braden se acerc¨® a los Douglas, que estaban sentados justo detr¨¢s de las sillas de los jugadores y les pidi¨® su veredicto. Fibak dominaba en esos momentos la final por dos sets a uno y 4-1 en la cuarta manga.
"Kirk dijo que Wotjek lo ten¨ªa casi hecho, incluso le felicit¨®, pero su mujer, que me hab¨ªa visto remontar ante Guillermo Vilas en el Open USA el a?o anterior y ganar luego la final a Jimmy Connors, ten¨ªa otro punto de vista", recuerda Orantes. Buydens tom¨® protagonismo en aquella entrevista al asegurar: "No tir¨¦is la toalla. El a?o pasado vi remontar a Orantes en el US Open. Seguro que lo har¨¢ de nuevo, no hay que descartarle porque Orantes jam¨¢s se da por vencido".
Aquellas palabras se escucharon en las dos pantallas gigantes que la organizaci¨®n hab¨ªa instalado en el recinto. Pero Orantes las percibi¨® al lado mismo. Y surtieron efecto. "Salt¨¦ de la silla y tras ganar un punto, alc¨¦ el pu?o, y acab¨¦ ganando gracias a ella", rememora el campe¨®n espa?ol, uno de los que integra el Sal¨®n de la Fama de Newport, que se impuso finalmente en tres horas y media de lucha por 5-7, 6-2, 0-6, 7-6(1) y 6-1.
"Su muerte me ha dejado una profunda huella. En aquella comida conoc¨ª a su familia, a sus hijos, y luego segu¨ª toda su carrera", a?ade Orantes.
Con Kennedy
Rosa interviene tambi¨¦n en la conversaci¨®n y apunta que el tenis les ha dado multitud de an¨¦cdotas y recuerdos imborrables como ¨¦ste. "Antes, cuando no hab¨ªa internet, no todo estaba tan programado, y suced¨ªan cosas imprevistas y espont¨¢neas. Recuerdo un a?o, en Washington, que al llegar a la habitaci¨®n del hotel nos encontramos con una invitaci¨®n de los Kennedy para cenar con ellos. Est¨¢bamos en ch¨¢ndal y nos cambiamos r¨¢pidamente y yo me puse un abrigo de vis¨®n blanco, que entonces se llevaba mucho", cuenta Rosa.
"Pero al bajar, el ch¨®fer nos advirti¨® que a los Kennedy no les gustaban las pieles, as¨ª que tuve que dejarlo en la habitaci¨®n y e ir con un vestido, me helaba de fr¨ªo. Recuerdo que nada m¨¢s entrar en su casa me encontr¨¦ con una foto de Manolo y que Jacqueline me dijo: "Lo ¨²nico que conozco de Espa?a es a Manuel Orantes y al Cordob¨¦s".