Un exjugador de la Premier League, condenado por masturbarse en p¨²blico
Neil Shipperley, que pas¨® por clubs como el Chelsea o el Crystal Palace, fue denunciado por una madre y su hija de 16 a?os.
El exdelantero ingl¨¦s Neil Shipperley, que jug¨® a lo largo de la d¨¦cada de los 90 en distintos equipos de la Premier League tras prepararse en las categor¨ªas inferiores del Chelsea FC, se ha sentado en el banquillo de los acusados de una Corte de su pa¨ªs tras la denuncia presentada por una mujer, que le acus¨® de masturbarse en plena calle, delante de ella y de su hija, un d¨ªa del pasado septiembre.
Seg¨²n ha testimoniado el fiscal del juicio, Shipperley se encontraba conduciendo una furgoneta por la zona de Hillingdon, en el oeste de Londres, cuando la denunciante y su hija se dispon¨ªan a cruzar la calle. El exfutbolista detuvo entonces el veh¨ªculo para lo que en principio parec¨ªa ser dejarlas ir a pasar. Sin embargo, cuando las mujeres se volvieron para agradecerle el gesto, pudieron ver que Shipperley hab¨ªa sacado su pene, que ten¨ªa en una mano, y "las miraba fijamente".
El episodio no acab¨® aqu¨ª, pues cuando las v¨ªctimas comenzaron a alejarse, el exjugador las sigui¨® con la camioneta. Seg¨²n ha asegurado la mujer, pudieron verle hasta en dos ocasiones m¨¢s exhibiendo sus genitales. En su declaraci¨®n, adem¨¢s, la denunciante tach¨® a Shipperley de "predador", y manifest¨® que "su objetivo era intimidarnos, aislarnos y dejarnos en shock, y tuvo ¨¦xito, quedamos impactadas, asqueadas y acongojadas por sus acciones. Siento mucho enfado hacia ¨¦l y su sucia excitaci¨®n".
La hija adolescente de la mujer, as¨ª mismo, declar¨® haber quedado "asustada, ansiosa y vulnerable". Adem¨¢s, clam¨® no saber "qu¨¦ hubiera podido pasar si su madre no hubiera estado all¨ª". Fue el propio exfutbolista el que se entreg¨® en la comisar¨ªa m¨¢s pr¨®xima justo en el momento en el que las v¨ªctimas estaban interponiendo la denuncia.
El Tribunal de Uxbridge donde se ha llevado a cabo el juicio ha resuelto que Shipperley cumpla una pena comunitaria de 12 meses, adem¨¢s de tener que completar 20 d¨ªas de rehabilitaci¨®n y compensar con 200 libras a sus v¨ªctimas.
Esto viene a sumarse a la larga lista de problemas que han salpicado la vida del exfutbolista desde que colg¨® las botas. Entre ellos, adicci¨®n al juego y dificultades financieras diversas. La defensa afirm¨® que el brit¨¢nico se sent¨ªa "avergonzado" de su acto, y que este hab¨ªa supuesto solo un desesperado "grito de ayuda".