Sigue el drama Spice Girls: "Geri y yo ¨ªbamos en moto con los pechos al aire"

Si Mel B pudiera haber vislumbrado m¨ªnimamente las consecuencias que su entrevista de hace unas semanas con Piers Morgan le iban a acarrear a nivel p¨²blico y privado, tal vez se hubiera pensado dos veces abrir el ba¨²l de los recuerdos. Y es que su admisi¨®n de haber vivido una noche de pasi¨®n con su compa?era de las Spice Girls, Geri Halliwell, ha puesto en marcha un culebr¨®n que no deja de crecer y que tiene poca pinta de ir a acabarse pr¨®ximamente.

Su revelaci¨®n caus¨® una sorpresa monumental que se recogi¨® en los titulares de medio mundo, y a partir de ella no han dejado de gotear nuevas informaciones de todo tipo, hasta el punto de hacer saltar las alarmas sobre la posible cancelaci¨®n de la gira 'revival' que la banda tiene previsto empezar a finales de mayo.

Desde la pol¨¦mica respuesta de Geri, que desminti¨® en un comunicado el supuesto romance, a la posterior ira de Mel B por la negaci¨®n de esta, pasando por los rumores que aseguran que las dos involucradas no pueden verse la cara en los ensayos, ahora se suma a la rocambolesca historia unas declaraciones rescatadas de la primera autobiograf¨ªa de Mel B, publicada en 2002, y en la que la cantante asegura que Geri y ella eran "como novio y novia".

Una diversi¨®n extravagante

Concretamente, la an¨¦cdota que est¨¢ recabando atenci¨®n da una idea del grado de intimidad que supuestamente manten¨ªan las dos Spice. "A veces, Geri y yo nos ¨ªbamos a la cama el s¨¢bado por la tarde, nos despert¨¢bamos alrededor de las 2 de la madrugada, nos vest¨ªamos y nos ¨ªbamos de juerga al Ministry of Sound", comienza Mel B el relato del episodio en su libro, aludiendo al c¨¦lebre club nocturno de m¨²sica electr¨®nica de Londres.

Pero el relato no solo sugiere que la pareja compartiera cama y fiestas, si no que lo m¨¢s sorprendente se encuentra en la forma que ten¨ªan ambas de trasladarse precisamente de la cama a la fiesta. "Sol¨ªamos conducir en moto con los pechos al aire, para echarnos unas risas".

La alocada pr¨¢ctica les dej¨® de ser tan sumamente divertida, seg¨²n cuenta Mel B, cuando una noche descubrieron a un tipo de aspecto raro conduciendo a la par que ellas "con una sonrisa man¨ªaca en la cara". Al parecer, en esa ocasi¨®n el mir¨®n bast¨® para que se les bajara el subid¨®n, pues como especifica la cantante, las dos quedaron "repentinamente asustadas. Fue realmente aterrador".

Mel B narra en sus p¨¢ginas que entonces Geri tom¨® un desv¨ªo para perder de vista al sujeto, y que las dos se quedaron temblando tras el susto. Eso s¨ª, no parece que este les quitara del todo las ganas de seguir viajando semidesnudas por las carreteras, como asegura la cantante al final de su relato: "?Nos impidi¨® eso ense?ar nuestras tetas? No".