Trepidante encierro de los toros de Victoriano del R¨ªo en San Ferm¨ªn
Los toros de Victoriano del R¨ªo, de Guadalix de la Sierra (Madrid) completaron el recorrido en 2:20 en un encierro que dej¨® una carrera r¨¢pida y varias escenas de peligro.
Los toros de la ganader¨ªa madrile?a de Victoriano del R¨ªo Cort¨¦s han protagonizado un encierro, el sexto de las fiestas, veloz y limpio, como es habitual en ellos y sin heridos por asta de toro.
Hasta el Complejo Hospitalario de Navarra ha sido trasladado un corredor habitual del encierro con un traumatismo craneoencef¨¢lico leve y otro herido ha sido conducido al centro asistencial Doctor San Mart¨ªn, seg¨²n el parte m¨¦dico facilitado por el servicio de Urgencias.
La lluvia de nuevo ha acompa?ado la carrera, que ha durado 2 minutos y 20 segundos, con una manada liderada en gran parte del recorrido por dos toros negros y cerrada por un casta?o que, aunque se ha separado en algunos momentos de sus hermanos, no ha llegado a quedarse descolgado.
Con una menor presencia de corredores, se han vivido algunos momentos de tensi¨®n en la curva de la Estafeta al quedar alg¨²n corredor atrapado entre la pared y los toros, y en Telef¨®nica donde uno de los victorianos ha ca¨ªdo moment¨¢neamente al suelo muy cerca del vallado.
Puntual a las ocho de la ma?ana la manada ha partido de los corrales de Santo Domingo, perfectamente agrupada con un manso liderando el grupo, junto al que se ha situado desde los primeros metros un toro negro, que no ha abandonado la posici¨®n de cabeza.
As¨ª han contactado con los primeros corredores y han realizado hermanados este tramo, aunque el toro casta?o ha comenzado a quedarse un poco rezagado.
Ya en la plaza Consistorial el toro negro ha tomado la delantera y ha comenzado a liderar el grupo que ha atravesado este lugar con gran rapidez lo que ha provocado que uno de ellos resbalara al entrar en Mercaderes, aunque se ha levantado r¨¢pidamente.
A gran velocidad han cruzado esta calle y se han dirigido hacia la curva de Estafeta, que han salvado sin ca¨ªdas, aunque con el susto para algunos corredores que al principio de la calle se han visto emparedados.
Sin perder el ritmo y con dos toros negros adelantados en este tramo los corredores han tenido m¨¢s espacio para sus carreras, ya que la torada se ha ido estirando abriendo huecos entre los astados, que a m¨¢s de un mozo han golpeado con el testuz haci¨¦ndoles caer al suelo.
En Telef¨®nica un victoriano ha resbalado y se han repetido las ca¨ªdas de los corredores, dando lugar a momentos de peligro y de tensi¨®n, al igual que en el callej¨®n de acceso a la plaza, donde adem¨¢s del toro ca¨ªdo otro de los morlacos se ha acercado al vallado derecho pasando sus cuernos junto a la cara de un corredor.
En estos ¨²ltimos metros el grupo se ha dividido en dos y de esa forma han entrado de tres en tres en el coso, donde sin problemas se han dirigido a los chiqueros.